Entró de servicio algo desganado, la situación con Freddy no había cambiado y por el contrario seguía ignorándolo cada que lo veía. Había perdido la esperanza de que en algún momento pueda explicarle que lo que le dijo en las duchas fue producto de los nervios que sentía. Nunca se había enamorado de nadie, algunas veces incluso pensó que era asexual, pero fue ver al comisario y empezó a sentir cosas que lo asustaron en principio.
-¿No piensas hablarle hoy tampoco?-Dijo Isidoro cuando entró en el patrulla.
-Yo lo intento, pero él me ignora.
-¿Pero donde está mi Gustabo que no le tiene miedo a nada?
-Pues al parecer es cierto eso de que el amor cambia a las personas.
-Joder... Deberías intentarlo, porque si no terminará creyendo que no le importas.
-Son dos semanas en las que traté, pero el pasa de mi y yo no pienso rebajarme y rogarle para que me de un mínimo de atención.
-Ese es el Gustabo que me gusta, pero debes cerrar este tema para bien o para mal. No podemos ignorar alertas importantes solo porque está Freddy presente, además parece que no te importa el tema, pero yo me doy cuenta de que realmente te duele.
-No ayudas con esas palabras Isidoro.
-Tú una vez me dijiste que los amigos son los que te dicen sinceramente cuando la estás cagando y este es el caso.
-Tal vez hoy trate... Pero primero vamos a trabajar un poco.-Se animó mentalmente para que esta vez sí pueda hablar con el comisario.
-Para bien o para mal, yo estaré contigo siempre Gustabo.
-¿Un abrazo?
-¡QUE!-Asustó al rubio.
-¡Pero que pasa joder, porqué gritas!
-¿Tú pidiéndome un abrazo?
-Bueno ya no quiero nada entonces.-Arrancó.
Empezaron el día atendiendo robos de tiendas y patrullaje ordinario, la ciudad parecía estar tranquila... hasta que saltó un Fleeca.
-Márcalo Isidoro.
-Pero seguro estará Freddy...
-¿Y qué? Se supone que hoy hablo con él, así que no tiene caso que me esconda más.
-Tienes razón... Aquí Z-30 acude al Fleeca.
Fue a todo motor hacia el banco, donde claramente estaba Freddy presente hablando con los atracadores. Esta vez no le había dejado tiempo para excluirlos como aquella vez, así que se acercó hacia ellos con toda la confianza del mundo aunque estuviera muriendo por dentro.
-¿Qué ha pedido de momento?-Preguntó.
-...
-¿Me dirás o debo jugar a las adivinanzas en pleno atraco?-El enojo que sentía después de que lo ignorara incluso estando al lado de él, no tenía nombre.
-Huida limpia y que le quitemos el helicóptero de momento.
-10-4 comisario.
Se fue con Isidoro, notó que empezaba a molestar a Freddy y no quería ponerse sentimental frente a él.
-¿Qué tal fue?
-Cómo una puta mierda, pero bueno ahora conduces tú.-Se puso de copiloto.
Luego de un rato, el comisario terminó las negociaciones y empezaron la persecución. Ambos lados estaban tensos y como muestra de eso Freddy casi choca en un par de veces, la situación no parecía mejorar cuando el auto en donde escapaban los atracadores se alejaba cada vez más.
ESTÁS LEYENDO
¿Con B de que? | Freddytabo
FanfictionGustabo no sabía que tenía cierto gusto por las manos de las personas, hasta que un día una imagen llega a irrumpir su patrullaje por la ciudad y casi le hace volcar con el coche.