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No quería que llegara la noche de nuevo, la anterior había sido un poco incómoda teniendo a Quackity en la celda; Quackity, Vegetta, Luzu y él habían estado en silencio todo el rato, incluso por la mañana.
Hasta estaba considerando pedir un cambio de celda pero sentía que tal vez era muy precipitado, aparte que él sabía lo suertudo que había sido con su celda desde un principio.
Bueno, suertudo hasta cierto punto, al menos tenía a Vegetta suponía.
Tal vez si se cambiaba de celda le tocaría con gente peor que Luzu.

Que hablando de, se dirigía a hablarle sobre lo que había dicho ese día hace unas horas en el comedor; Era horrible lo que iba a sugerir, sin embargo, tal vez era mejor a que Luzu mandara a uno de sus matones.
Tragó saliva y se le acercó cuando lo vió hablando con unos presos.

— Hey, Luzu. — Trató de no sonar nervioso; sentía que en cualquier momento en que siguiera hablando iba a vomitar, pero ni él sabía que otra opción tenía.

Luzu apartó a los reclusos que parecían ser sus clientes y se quedó solo con el castaño mirándolo detenidamente esperando a que siguiera hablando.

Roier sintió una presión en su estómago y tragó saliva. — Sobre lo que te dije, ya sabes, de que te debo y así..

— Ya no te preocupes de eso, Roier.

El de bandana levantó sus dos cejas, confundido.
Primero le dice que tiene que pagarle y le da a entender de que tiene poco tiempo para hacerlo, ¿y ahora no debe preocuparse por ello?, ¿qué o quién lo hizo cambiar de opinión?.

— ¿Cómo?. — Roier miraba perplejo a Luzu, quien parecía muy tranquilo con todo eso.— ... ¿Quackity te dijo algo otra vez?

— ¿Qué? no. — Luzu metió sus manos en las bolsas de su pantalón. — Solo deja de meterte en las arenas movedizas. — Luzu miró a Roier aún mas confundido por lo que rodó los ojos.— Deja de meterte en problemas y ya, no todo el tiempo va a haber alguien cuidándote.

— ¿Quién te dijo que me dejaras en paz entonces?.

— Fue decisión propia. — Luzu miraba a Roier con muy poco interés.

— Apoco. — Arqueó una de sus cejas.

El de bandana se cruzó de brazos mirando incrédulo al de ojos rojos.
Pensaba que todo aquello solo era una trampa para hacerlo bajar la guardia.

— Te voy a cortar la lengua si sigues preguntando, eres un dolor de huevos. — Roier se mordió la lengua para no contestarle, pero se quedó donde mismo y su mera existencia al lado del castaño era suficiente para insistirle a que le diera una respuesta.— Vete antes de que cambie de opinión, anda.

Cuando la persistencia del de bandana iba a colmar la paciencia de Luzu, llegó un guardia llamándoles la atención.

— ¿Pasa algo?. — Aquel guardia miró a ambos presos, quienes negaron con la cabeza; miró directamente a Roier. — Te hablan del despacho del director, 727, andando.

— Otra salvada. — Luzu susurró burlonamente lo suficientemente alto solo para que Roier escuchara.

Lo miró con el ceño fruncido darse la vuelta y seguir con su camino; maldijo en sus adentros por no poder obtener una respuesta, no tuvo otra opción más que seguir al guardia a aquel despacho.

Al llegar el director invitó a Roier a sentarse y él aceptó, aunque estaba un poco confundido de aquella situación.

— ¿Es algo del tiroteo en el bosque?, ya le dije todo a la policía. — Habló rápidamente interrumpiendo al director quién negó ligeramente con la cabeza.

— Me acaba de llamar el inspector Philza-

— También ya le dije todo a él, incluso ya habló con mi abuelo y mi hermano. — Volvió a interrumpir Roier.

Nuestra Fijación °•.°.•.°.. guapoduo vis a vis AU !!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora