Hoseok se dijo asi mismo que todo estaría bien y que podía sobrellevar esto, por lo que no dudó en darle una sonrisa cortes a la invitación de Kim que decía que irían a montar caballo. Acepto la propuesta no por otras intenciones que no sean divertidas.
Jimin obviamente iba a aceptarlo, porque él era un aventurero empedernido y porque le gustaba aquello después de haberlo probado gracias al señor Kim.
Cuando estaban yendo hacia los establos y sacando los caballos, Taehyung entonces dijo que volvería un momento.
Jimin soltó:—No se por qué el señor Kim está enojado.
—¿Lo está?—pregunto Hoseok con el ceño fruncido mientras aún acariciaba el caballo blanco que le fue montado.
Ambos estaban cerca de un árbol donde los habían amarrado a los tres caballos que usarían y esperaba que Kim supiera como enseñarle porque estaba seguro de que se caería.
—Sí.—aseguro con una cara asombrada—¿Acaso no lo notas?
Hoseok se hubiera fijado si no estuviera tratando de mantenerse compuesto y no verlo directamente.
—¿Por qué he de notarlo? El señor Kim tiene cosas que hacer al igual que yo—respondió evadiendo el tema.
—Pero…—alargo.—No lo sé, parecían cercanos.
—Tu también eres cercano a él.—arremetio sin parecer amargo.
—Eso creo—se encogió de hombros—Pero contigo es diferente.
—Claro que lo es. Mientras contigo es amable y bondadoso, conmigo parece más un hombre que trata a un amigo por su igual; es sarcástico y a veces bromista con las cosas que digo.
No quería soltar todo eso pareciendo resentido con el hombre, pero de alguna forma lo estaba.
Jimin río a su costado.
—Creeme que es diferente y no es como lo pintas.
Parecía seguro mientras lo decía, pero de todas formas volteo los ojos, imposible que su hermano menor sea hasta partidario del hombre.
Solto un “aja” flojo y siguió acariciando su caballo.
Más tarde, Kim hizo aparición con un hombre que estaba igual de montado en un caballo. Kim parecía serio mientras caminaba en dirección a ellos y al hombre no podía verlo bien por el sombrero.
—Tenemos compañía, es un amigo mio—dijo mientras miraba en dirección al hombre que se bajaba del caballo.—Espero que sea de su agrado y lo traten con amabilidad.
Entonces su mirada se poso en Hoseok, quien no entendía porque le tendía una mirada bastante dura, si él no había hecho nada aún.
El hombre se acercó y se quitó el sombrero, dando paso a una cara bastante fuerte con una barba poco pronunciada y su nariz respingada. Era bastante guapo y podía tener a cualquiera, ya que por su olor, era un alfa. También era alto y a gusto personal de Hoseok, apartando del hecho que era guapo, tenía el porte de ser alguien bastante protector.
Hoseok siempre sintió atracción por los hombres seguros de sí mismo, pero está vez, lejos de querer coquetearle, como hubiera hecho en el pasado, le tendió una sonrisa amable y admitió que era sorprendentemente guapo.
Pero eso era todo.
Lamentablemente y para su horror, su mirada se dirigió a Kim, quien no lo estaba mirando, estaba al lado del hombre que tenía su misma altura, pero no hacía nada más que esperar a que el hombre hablara.
La voz del hombre no era tan gruesa como la de Kim, pero si era bastante masculina. Por alguna razón, la masculinidad del hombre no le parecía atractiva, aún cuando sea guapo, le resultaba molesto, a menos que fuera…
No, no iríamos a ese pensamiento.
—Me presento, soy Roa.
El hombre hizo una reverencia y miro fijamente a Hoseok. Este se sintió un poco intimidado porque no entendía el porqué de su mirada intensa, como si supiera algo que él no sabía.
Hoseok mantuvo su compostura y de nuevo miro a Kim Taehyung, quien, con su mirada estoica, volteo a Roa y le dijo que empezarían montando cerca del lago.
Hoseok quiso ir hasta donde estaba él y preguntarle el porqué de su mal humor, y no es que fuera demasiado impertinente, pero quería, de alguna forma saber qué lo había puesto de aquella forma. Cómo había mencionado Jimin, tal vez él estaba siendo diferente hoy y a Hoseok por supuesto le preocupaba.
Para variar, su corazón hablando más rápido que su mente racional.
Alguien se interpuso en su camino.
Roa lo miro con una sonrisa un tanto siniestra a su propio gusto.
—Te ves muy bien hoy, joven Hoseok.
Lo dijo tan repentinamente que se sorprendió la confianza con la que fue dicha.
Hoseok se rió y apartó la mirada.
—Gracias por el halago, si me permite…—de nuevo quiso huir, pero Roa dio un paso adelante, sorprendiendo a Hoseok.
—Le ayudaré a montar su caballo y comenzar el recorrido.—ofreció.
—No se preocupe por eso, el señor Kim me ayudara…—fue interrumpido.
—El señor Kim, como vera—y se hizo a un lado para que Hoseok viera como Taehyung ayudaba a su hermano a estar arriba del caballo—, está demasiado ocupado, deje que me encargue yo.
Hoseok sopeso la idea.
No quería parecer un tanto caprichoso (como se lo había dicho el hombre ya varias veces) y hacer lo que se le diera la ganas, formando un escándalo para nada, aún cuando le decepcionaba un poco.
Hoseok se dijo que tal vez era mejor que lo ayude el otro hombre y así no parecer tonto y desesperado por la mínima atención del hombre malhumorado que le tendía una ligera sonrisa a Jimin.
Está no llego a sus ojos.
—Esta bien.—dijo en tono bajo y se dirigió al caballo.
Entonces el hombre poso su mano en su espalda y Hoseok quiso apartarla.
¿Este hombre que tenía? Estaba bien si quería ser generoso, hasta podría admitirle coquetear con él sin ser recíproco, pero tratar de invadir su espacio… casi como si intentará algo de todas formas, conociendo.
Hoseok estaba bastante desconcertado, pero aún así llegó al caballo y quiso subirse.
El hombre intento agarrar su cintura y el volteo delicadamente:—¿Por qué no mejor toma mi mano?
Y así fue como el hombre tomo su mano y Hoseok tuvo que contar hasta tres para no tener que gritarle al individuo.
Estaba bien, de todas formas lo estaba ayudando a subir al caballo. En cambio Taehyung… él seguía entretenido con su hermano.
Estaba bien, se dijo. No había porqué sentirse mal cuando él bien sabía que el hombre podía hacer lo que quisiera y no necesariamente ser el ideal con el contrario, sabiendo que él jamás sería diferente con él.
Hoseok trago su saliva amarga y miro desde arriba al hombre que le sonreía.
—Bueno, espero no caerme—solto con una risita.—, ¿Qué se supone que tengo que hacer?
Entonces el hombre le comenzó a explicar de buena manera, que se encontró sonriendo por lo didáctico de sus palabras. Puede que sea imprudente, pero por lo menos estaba haciendo una labor fabulosa en explicarle detalladamente.
Una vez termino, volteo a ver a los demás. Ellos estaban avanzando juntos con sus caballos a la par. Hoseok sabía que Jimin y él habían tomado clases con anterioridad y privadas. Eso no quito la amargura desde lo más mínimo, como lo era esperar, por lo que le tocó caminar a paso lento con su caballo montado a la par del hombre llamado Roa.
—¿Cómo has estado?—comenzó a hacer conversación.
Hoseok frunció el ceño.
Sonó un poco como si ya lo conociera, pero tal vez era una equivocación de palabras.
—Me siento bien, ¿y usted?
Hoseok no presto mucha atención a su contestación, dándose cuenta que era divertido caminar con el caballo montado y sentir el aire fresco en la cara. Era un bonito día, por lo que a él respecta, algo muy malo tenía que pasar… con ansias esperaba que no fuera así.
—… me parece que ha estado demasiado tiempo desaparecido.—comento como última instancia.
Hoseok volteo a verlo.
—¿En qué sentido?—pregunto.
—No ha estado en la capital por mucho tiempo, a mi parecer. Todos dicen que ya está comprometido.
Bueno, eso era realmente sorprendente.
Se había olvidado por completo que su pasatiempo era ir a reuniones a conocer gente y viajaba constantemente a la capital; sin embargo, con todo lo que ha pasado con respecto a Kim, se le había ido pasando el tiempo y no había querido movilizarse fuera de su hogar, demasiado cómodo para intentarlo.
Eso le preocupó de alguna manera.
—He estado ocupado con otras cosas, pero los rumores son falsos. Probablemente pueda ir el siguiente mes.—respondio evadiendo la mirada.
—No queremos que nos prive de su elegancia y belleza.—respondio el hombre, se inclino.—Se ha vuelto más bello, joven Hoseok.
Este volteo a verlo con un poco de extrañeza.
Cómo lo dijo, debía sonar halagador, pero comenzaba a darle un poco de miedo como la confianza subía. Cómo si supiera cosas que él no estaba del todo enterado.
Una voz los saco de su conversación.
—Paremos aquí, Jimin quiere un poco de agua.
Hoseok aprovecho eso para alejarse del hombre y cabalgar hasta donde estaba el señor Kim junto con su hermano. Casi a nada cerca del río junto a un gran árbol de peras. Bajo con cuidado del caballo y se acercó a su hermano que jadeaba.
—Me encanta cabalgar, pero es tan agotador—tomo un trago de la botella de agua que habían traído.
Le tocó el hombro, dándole golpecitos.
Miro a su atrás, Kim y Roa conversaban con mucho ahínco. Hoseok volvió a su hermano.
—¿Te ha mencionado algo Taehyung acerca de su amigo?
—No, ¿por qué?
—¿No notas algo extraño en él?
Su hermano lo miro con extrañeza.
—¿No? Es decir, creo que está bastante bien a mi parecer—se encogió de hombros y siguió acariciando a su caballo.
—No sé si solo soy yo, pero lo noto muy extraño y me pone nervioso.
Automáticamente sintió un escalofrío pasar por su cuerpo. Una mala sensación.
Jimin bufo con una risa.
—Cuidado, podría cualquiera pensar que te pone nervioso porque te gusta.
Hoseok abrió la boca con ofensa.
—No me gusta, porque…
Se callo automáticamente, antes de cometer una locura.
Jimin alzó una ceja, pero luego hizo un ademán:—Como sea, si te interesa, solo coqueteale como normalmente haces con todos.
Hoseok frunció el ceño. Este día lo hacía más que de costumbre.
—¿Qué quieres decir?—pregunto, sintiéndose amargado de repente.
—Que eres… accesible en ese aspecto.—respondio.
No parecía meditar lo que decía, al parecer. Por algo ofendió a Hoseok, aunque sabía que su hermano no lo decía de mala fe.
—¿Accesible? Suena mal si lo dices así.—rio sin gracia mirando hacia otro lado.
—Mirate—señalo con una media sonrisa—, a comparación mía, tu eres mucho mas abierto y no está mal serlo. Quiero decir, está bien, aunque…—se encogió de hombros callándose de repente.
—¿Qué?—pregunto con verdadera curiosidad por tal misterio.
—Hasta el señor Kim dice que se puede malinterpretar tus buenos y abiertos modales.—se encogió de hombros nuevamente sin mirarlo—No quiero ahondar en nuestra conversación, pero tal vez tenga razón…
Hoseok ahora sí que se estaba ofendiendo.
—No sabía que hablaban mucho de mi cuando estaban juntos.—suspiro sin poder creer lo que decía su hermano. Miro la silueta de este—No creo que el señor Kim sea el más apropiado para hablar de ese tema.
—¿Por qué no?
—Si habla así de alguien que no es cercano, como sería él con alguien que es más que una amistad.
Hoseok no quería sonar amargado, pero lo estaba. Pensó que Kim por lo menos tendría otra opinión acerca de él; sin embargo, se confundió por completo. Totalmente tonto a todo.
—Hoseok… no seas así.—advirtio Jimin sin parecer realmente ofendido—No lo dijo en mala fe, solo que lo eres…
—¿Lo soy? ¿En qué sentido, Jimin? Estás siendo muy sincero hoy, así que coméntame aquello.—animo Hoseok con una mueca bastante enfadada.
Oyó como tragó su hermano.
—Solo digo que deberías calmarte… en general.—entonces suspiro demasiado harto—No es deshonesto o maleducado decir que tú buena charla puede ser confundida por otra cosa y que por eso, tal vez, los hombres con los que te juntan piensen en el primer instante que estás disponible a todo.
Hoseok se quedó sin habla por un momento tratando de asimilar las palabras.
—¿Estás diciendo que si el señor Roa o quien sea se comporta extraño conmigo, es porque yo lo invito con cualquier charla que haga?
Hoseok no podía creer lo que se le decía.
Jimin nuevamente trago, pero ahora luciendo un poco asustado.
—No es eso.—trato de explicar—Como dijo el señor Kim alguna vez: no es malo que seas encantador a tu manera, pero tal vez no te das cuenta que por ser demasiado sin límites, puede que los hombres a tu alrededor piensen otras cosas. No digo que seas el culpable, pero te conozco y sé que eres demasiado amistoso con cualquiera que te rodea solo porque estás aburrido o quieres conseguir algo. Tal vez los hombres a tu alrededor buscan otra cosa y tú eres demasiado ingenuo o egoísta para notarlo.
No sabía que su hermano podría pensar todas aquellas cosas como si fuera la voz que todo lo sabe.
Aunque fuera terco, Hoseok sabía un poco a lo que se refería: él no era sensato, solo quería divertirse y buscar algo sin pensar en la otra parte, lo cual traería consecuencias; no es su culpa si sucedía algo malo, pero debía ser cuidadoso y dejar en claro que él no era tan “abierto” como se pensaba.
Estaba bien si era así, al fin y al cabo, no hacía daño a nadie… aún cuando tal vez lo estaba haciendo sin darse cuenta. Tal vez debería aprender a diferenciar y saber que si no quería ser amigable, no forzarse a serlo y establecer límites, tal y como había dicho Kim…
Pero si dejaba de hacerlo, entonces su tía tendría razón: nadie querría estar con un Omega sin titulo. Lo único que le quedaba era el don de la palabra y su sonrisa para que lo tomarán como un posible candidato.
Pero y si… y si en realidad no tenía que hacerlo.
De todas formas no podría porque estaba enamorado, pero en su mente pensó que tenía que seguir adelante (aún si estuviera triste por ello). Ahora estaba dudando un poco acerca de todo.
Maldijo a Kim Taehyung y a toda su palabrería a él y a sus allegados por venir a su vida a poner patas arriba su mundo.
—Bueno, gracias por tu sinceridad. No pensé que por solamente estar cerca de una persona se consideraba pecaminoso y que al instante estarían todos sobre mi, incluido Roa.—no evitó estar enojado.
—Sabes que no me refería eso—dijo Jimin con ojos acusatorios—Eres mi hermano y te quiero, pero sabes bien que eres el maestro de coquetear con cualquier alfa en busca de lo que sea. Solo digo que tal vez Roa piensa que eres así cuando sabemos que no lo eres. Solo dije que se aleje y ya no te sentirás extraño.
—¡Pero no hice nada!—no puedo porque me gusta el idiota que te dio esas ideas sobre mi, quiso decir, pero se abstuvo.—Como sea, dile a Kim que si quiere hablar sobre mi persona, que primero se mire en un espejo y piense en lo que hizo mal.
Y con eso se fue alejando.
Oyó que su hermano lo llamaba, pero no miro atrás cuando siguió alejándose. Paso por encima de los dos hombres, quienes lo miraban con sorpresa por caminar tan molesto y alejarse de la escena.
Aún así, no miro atrás.
Estaba molesto por como la sinceridad calaba sus huesos y como nadie podía comprender del todo que jamás fue su intención ser descuidado con su propia imagen, pero también estaba molesto consigo mismo por dejar que esas cosas pasarán.
Tal vez debió ser un poco más lógico a la hora de mostrar su personalidad si no quería ser interpretado de una forma.
Bueno fuera que le interesará las opiniones en general o hasta de su hermano, sino del hombre apellidado Kim. Quien no se abstuvo de dejar en claro que Hoseok seguía sin tener clase indirectamente por ser tan encantador con todos.
Bien, puede irse por donde vino.
De todas formas, él se iría y Hoseok podría hacer lo que quisiera.
Salvo que le provocaba una sensación amarga al no volver a verlo, a pesar de que tenía conceptos feos sobre él.
Hoseok grito frustrado y paro cerca de un riachuelo. Se quedó parado mirando su reflejo y solo vio a alguien cansado. Se preguntó si siempre fue así o Kim lo hacía así. No quería saber, solo quería que todo parara y volviera todo como antes.
Aún cuando sabía que no quería eso y quería otras cosas diferentes.
—Aquí estas…—solto una voz grave.
Era Roa.
Bien, lo último que quería.
Bufo y se dirigió a él.
—Lo siento por salir corriendo, estoy un poco sensible, es todo—se excuso con educación.—Volvere en unos minutos.
Espero que se fuera, pero el hombre no se movió.
—Me quedaré a esperarte.
Hoseok quiso voltear los ojos, pero sus buenos modales no le permitieron.
—Prefiero estar solo.—sonrio como disculpa y se volteo, esperando que esté también y se fuera.
El hombre no lo hizo.
—¿Es algo grave? ¿Qué es lo que te molesta?
—Nada, solo es… personal.
El hombre se quedó callado por un buen tiempo, antes de soltarlo así como así:—Lo siento, Hoseok, pero creo que no puedo soportarlo más.
Hoseok volteo a verlo confundido.
Sus ojos parecían muy abiertos ahora.
—¿Disculpa?—se sorprendió por lo descarado que fue al solo nombrarlo sin el ‘joven”.
—Creo que es hora de parar.—solto con su mirada filosa en él—Hemos jugado mucho como para negarlo.
—¿Disculpa?—volvio a preguntar con aturdimiento.
El hombre se acercó, poniendo de nervios a Hoseok, quien se quedo quieto sin entender nada.
—Tu lo sabes, yo lo sé—dijo a unos centímetros de donde se encontraba Hoseok. Este no se movió por el miedo que le estaba causando el hombre al verse demasiado siniestro con toda la palabrería—¿Por qué te haces el difícil?
Hoseok retrocedió un paso, oliendo el feroz olor del alfa, quien exudaba excitación y algo así como furia.
Hoseok empezaba a tener miedo.
—Lamento no entender de qué habla.
Río con preocupación a punto de rodear al hombre e irse allí, pero entonces este lo sostuvo de la cintura y lo acerco pecho a pecho.
Hoseok se quiso zafar, pero el agarre fuerte del hombre lo tenía prisionera. Estaba comenzando a entrar en pánico cuando aún sus manos yacían en el pecho contrario no lo dejaba irse.
—¿Qué cree que hace?—pregunto con desespero.
—Hoseok, no te hagas.—solto con tanta amargura a unos centímetros de la cara del contrario—Haz estado haciendo esto desde la fiesta.
—¿Fiesta? ¿qué fiesta?—pregunto aun tratando de salirse fuera del agarre del hombre.
—Sabes de lo que hablo—lo apretó más cerca. Apostaba que dejaría una marca en su espalda y cintura— Haces eso con todos o es exclusivo para mi.
—No se de lo que habla, señor. ¡Suélteme ya!—una vez más tratando de irse, sin escape alguno.
Este hombre tenía mucha fuerza o Hoseok necesitaba vitaminas.
Comenzó a hiperventilar y quería gritar y pedir auxilio.
Una persona vino a su mente, pero antes de gritar, el hombre dijo:—La fiesta del banquete del señor Woodstock. El señor que te invito por ser demasiado amable con él, nos conocimos allí y hablaste tanto conmigo que quedó enamorado, pero tú solo te fuiste al día siguiente sin decir adiós. ¿Eres tan desalmado cuando se trata de cosas del amor?
Hoseok ahora sí que no podía procesar nada, notándose desesperado.
—Juro que no lo conozco y no me acuerdo de nada de lo que usted dice. Déjeme ir, por favor…
Intento, sin resultado.
—Hoseok… hablaste y coqueteaste conmigo toda la noche y luego te fuiste. ¿A cuantos más les haz hecho esto o solo me haces sufrir en vano?
Este hombre debía estar loco porque juraba que no se acordaba de nada y menos que alguna vez haya coqueteado con él, y si lo hizo, Hoseok no le tomo importancia como siempre hacia.
Quería rebobinar el tiempo atrás para jamás haber hablado con alguien si esto iba a pasar.
—Juro que no se nada, déjame ir…
—Entonces te daré algo que recordar.
Y con eso, estampó sus labios fuertemente con él. Hoseok al instante lo apartó de un empujón. Estaba a punto de querer decirle que era un asqueroso bueno para nada y que cómo era posible que le haya dado un beso sin su consentimiento (robándole la buena experiencia que pudo haber tenido), cuando entonces sus ojos, por unos breves segundos, se posaron atrás del hombre, dando lugar a la imagen de Kim Taehyung presenciado lo que acaba de pasar.
Hoseok abrió los ojos con sorpresa.
—Perdone, no quería interrumpir—dijo con la voz más ronca que pudo recoger y dio una vuelta para salir del plano.
Hoseok no podía permitir eso.
Sin oír los reclamos del contrario, fue corriendo en busca de Kim. Lo llamo varias veces mientras caminaba apresurado hasta que pudo tomar su brazo y darle vuelta. Este se apartó, pero no le impidió decir:—No es lo que crees, lo juro, yo…
—No me debes dar explicaciones, Hoseok.—dijo sin sarcasmo, sin diversión, sin formalidad o bajo, casi pareciendo cariñoso.
No había nada y su cara parecía tensa.
Hoseok estaba entrando en pánico.
—Pero quiero dártelas—comenzo a explicar tratando de tragar saliva de su garganta apretada—él me besó, yo jamás haría algo así…
—¿En serio, Hoseok?—lo corto—¿Estás seguro de eso?
—Si—solto estupefacto queriendo que le crea—Jamas he besado a alguien y menos lo haría con ese desconocido, quien por cierto, no me gusta.
—¿Cómo puedes ser tan indiferente con los sentimientos de los demas?—Kim negó con la cabeza mirando a otro lado—Ese hombre sufrió meses por ti.
Hoseok estaba simplemente fuera de si tratando de hablar.
—¡El problema es que no se quién es él y no recuerdo nada, si hasta coquetee con él o lo que sea que me dijo!—entonces, osadamente, tomo el brazo de Kim, quien para su sorpresa no lo apartó está vez—Te juro que puedo ser bastante amable con todos, pero no es mi culpa si alguien queda enganchado conmigo. Puede que él esté confundido, pero no le da derecho a tratarme así.
Kim lo evalúo acusatoriamente.
—Es mi amigo desde hace años. A ti te conozco hace solo unas semanas— dijo con tanta amargura que Hoseok lo sintió por todo su ser. Era claro a quien le creería—Es la primera vez que se ha enamorado de alguien y cuando te conocí sabía que eras aquel Omega que pasó toda la noche embelesandolo sin dejar rastro luego; eso solo dicta quien eres y como usas a los demás sin importarte sus sentimientos. Es por eso que jamás tendría una buena opinión de ti.—se zafó de su agarre, Hoseok lo dejo porque estaba sintiéndose débil y dolido a más no poder con las palabras duras de Taehyung. Comenzó a sentir que se le empañaba los ojos—¿Sabes algo, Hoseok? Esta bien si eres nada timido con todos y los dejas sin meditar, pero cuando se trata de las personas que conozco y respeto, no puedo dejarlo pasar.
—Taehyung… ¿Por qué?
De nuevo lo corto.
—Tu no sabes cómo estuvo dolido tratando de encontrarte y no sabes lo feliz que se puso una vez le dije que estabas aquí… tu solamente piensas en ti y no mides las consecuencias y está bien, pero…—su mirada se volvió algo decepcionante—, solo ten un poco más de amabilidad cuando dejas a alguien con el corazón roto.
Y como una última daga, se fue dejándolo demasiado aturdido y tan débil que no midió cuando las lágrimas ya estaban saliendo de sus ojos.
No sabía que había hecho de mal. No sabía que estaba haciendo de bien. Y jamás sabría porqué Kim Taehyung tenía que ser tan cruel para dejarlo en mal estado. Él se lo permitió al enamorarse.
Hoseok se fue de allí porque no podía respirar.
No sabe cómo llego hasta el caballo, pero oyó a su hermano decir:—Le decía a Kim que mi cumpleaños sería pasado mañana y que podía invitar a Roa. ¿Ya no estás molesto, verdad, Hoseok?
Se subió al caballo aún llorando sin poder respirar bien.
Tenía que salir de aquí.
Dolía mucho y no sabía cómo parar el dolor.
—¿Hoseok, por qué lloras? ¿Estás bien?—Jimin lo seguía aún cuando el caballo comenzó a caminar—¿Qué haces? ¡Hoseok, no estás listo para cabalgar!
Y aún así, se fue. Corriendo con el caballo.
No estaba pensando claramente, obviamente, pero el dolor sordo de que tu primer amor te diga tantas cosas feas e inexactas, simplemente hacia que su corazón se estrujara.
Hoseok tenía que salir del mundo para poder calmar su dolorido corazón.
Y vaya que lo hizo cuando entonces no se dio cuenta de una pequeña rama y la vida como siempre, se rió de mala manera hacia él y cayó de bruces contra el suelo, dejandolo inconsciente al instante.👔
me di cuenta que 1. el Hoseok en mis historias siempre se tiene que sacar la chucha o no es él JAJAJAJJAAJJA; y 2. que estoy colgando los caps más lentos y esto jamás me ha pasado en la vida 😃, pero le doy la culpa todo a mi enfermedad de mierda (malditos doctores del hospital, ojalá que cuando se andan muriendo como yo, les digan: "con paracetamol y ya te curaste", hdppp).
en fin, espero les este gustando y pido paciencia: he estado yendo de hospital en hospital en busca de una solución a mi enfermedad, de dolor en dolor, de fiebre en fiebre, que apenas tuve tiempo de algo que no sea quejarme.
en fin, love u guys 💗 sigan leyendo que se viene la mejor parte muejeje
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Omega perfecto
RomanceHoseok pensó muchas cosas acerca de Kim Taehyung. Y este pensó muchas cosas acerca de Jung Hoseok. Algunas de esas cosas no eran nada favorecedoras para ambos. Lo que no sabían era que el amor estaba más cerca de lo que ellos esperaban, pero es más...