Cada pecador que caía al infierno nunca sabía cómo funcionaban las cosas en el infierno.
Alastor no era la excepción; al principio, él cometió algunos errores, uno de ellos fue tener una hija con otra pecadora, y esa pequeña niña eras tú. Tu madre te había nombrado T/N, pero Alastor nunca te vio como algo bueno; él siempre negaba ser tu padre frente a los demás pecadores.
Un día de exterminio, los ángeles andaban exterminando a muchos pecadores. Desgraciadamente, uno de los pecadores que atacaron fue tu madre, dejándote sola con Alastor. A él pareció ni siquiera importarle la muerte de aquella pecadora.
Para Alastor, fue una molestia tener que hacerse cargo de su hija; entonces, vio un camino fácil, que fue abandonarte en la calle.
Estabas confundida mientras mirabas a tu padre alejarse sin ti; intentaste ir detrás de él, pero claramente él fue más rápido. Te quedaste sola en las calles peligrosas y oscuras del infierno; empezaste a llorar desconsoladamente.
Estabas llorando cuando un hombre muy alto con el nombre de valentino se te acercó y te miró con confusión. Estaba pensando si hacerte daño o no, pero vio que solo eras una pequeña niña indefensa. Decidió adoptarte y criarte como su hija, junto con la ayuda de Vox, ellos dos eran pecadores poderosos del infierno, Valentino se en cargaba del entretenimiento para adultos y Vox se encargaba de las transiciones de televisión.
Tu la mayoría del día te la pasabas con Vox ya que no podías estar con Valentino debido a que el se iba a trabajar y por obvias razones no podías estar con el pero cuando Valentino volvía te pegabas a él como un chicle.
Y así pasaron los años; tú vivías con Valentino y Vox, los veías como tus padres, pero seguías recordando a Alastor como tu padre, y te dolía saber que él te había abandonado.
Un día estabas viendo una de las pantallas de Vox, cuando en una de las transiciones, aparece Alastor cantándole a la hija de Lucifer. Cuando lo ves, lo reconoces rápidamente y sientes una mezcla de emociones: alegría, confusión, ansiedad.
Pero hubo unos versos que te partieron el alma, que fueron "Eres la hija que no tuve jamás" "Me importas aunque no te pude engendrar".
Cuando escuchaste eso, miraste la pantalla con el corazón roto mientras las lágrimas empezaron a salir de tus ojos. Empezaste a llorar desconsoladamente, lo que hizo que Valentino y Vox llegaran rápidamente con una expresión preocupada.
"Cariño, ¿qué pasó?" - preguntó Valentino mientras corría hacia ti.
Tenías una mezcla de emociones que ni siquiera fuiste capaz de articular lo que sentías o lo que te sucedía, solo llorabas.Vox miró la pantalla y vio a Alastor en ella; él explotó y miró la pantalla con enojo. - "¿¡Ese hijo de puta está de vuelta!? ¡Volvió después de 7 malditos años!"
Valentino miró la pantalla, pero prefirió seguir consolando a su pequeña hija. - "¿Qué sucede, mi niña? ¿Por qué estás tan alterada llorando?"
Seguías sin ser capaz de articular cómo te sentías; solo llorabas y abrazabas a Valentino, mientras Vox seguía maldiciendo al ver que Alastor estaba de regreso.
Valentino decidió sacarte de la habitación dejando a Vox maldiciendo. Te llevó a la cocina y te preparó un chocolate caliente mientras intentabas calmarte. Aunque él podía ser un pecador horrible, era un padre muy cariñoso y protector.
Valentino te extendió el chocolate y unas galletas. - "¿Estás mejor?" - preguntó él con preocupación.
Tú asentiste mientras tomabas una galleta y empezabas a comer.
Valentino te miraba preocupado, ya que nunca habías llorado de esa manera, solo cuando él te encontró en la calle. -"Dime, T/N, ¿qué te sucedió?"-
Tú miraste a Valentino antes de volver a bajar la mirada, algo triste. - "Estaba viendo las transiciones que tenían las pantallas de Vox... Y en una de esas apareció mi antiguo padre..." - Dijiste desanimada y triste.
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❥ 𝑸𝒖𝒆𝒓𝒊𝒅𝒂 𝒉𝒊𝒋𝒂 / Alastor y Lectora
RandomEn las profundidades del anillo del orgullo, un demonio poderoso conocido como Alastor, un demonio poderoso y cruel quien tenía una hija llamada T/N, pero el despreciaba y odiaba a su hija. Debido al odio y desprecio decide dejar a la pequeña T/N a...