9. ¿Nunca sueñas, veneno?

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Kilian bebió un trago de su wiski escocés.

Inhaló profundamente y exhaló con la misma intensidad, tratando de descifrar el exacto momento donde comenzó a salirse todo de control. La llegada de la doctora al pueblo fue su única opción, pero algo en su interior dictaba que había algo más, algún detalle que había pasado por alto.

—Señor Black, Adara está aquí. —Avisó Will.

—Hazla pasar.

Will acató la orden de su amo y fue en busca de la mujer.

—¡No entiendo por qué tienes que llamar a Adara! —exclamó furiosa Izzy—. ¿Acaso yo estoy pintada en la pared?

—Deja a un lado tu absurda rivalidad con ella. Adara es más fuerte y más vieja que tú.

Kilian determinó que era momento de acudir a ella, la bruja Castell. La primogénita y única sobreviviente del linaje Castell. Will entró nuevamente al despacho escoltando a la mujer. Su cabello azul celeste rozaba su cintura.

Ella, a diferencia de las otras brujas, había desarrollado un aspecto muy peculiar, más bien parecía un hada que una temible desarrolladora de magia negra. Su iris incandescente color morado juagaba en contraste con sus labios bermellones.

Su piel estaba cubierta de finos símbolos, cubrían su mano derecha, incluyendo sus nudillos y dedos. Parte de su espalda, hombros y nuca también poseían las mismas marcas, simulando tatuajes de tinta oscura.

—Siempre supe que los hermanos Black acudirían a mí.

—No me digas —inquirió Izzy.

—Pese a la arrogancia y malos modales de algunos de sus miembros —concluyó Adara ojeando a Izzy.

—Adara, disculpa los malos modales de Yzma —interfirió Kilian a medida que se acercaba—, nos complace que hayas aceptado nuestra invitación.

—¿Nuestra invitación? Habla por ti, Kilian. Si dependiera de mí, esta estaría ya incinerada.

—¡¡Yzma!! —rugió Kilian asustándola, Izzy respetaba a Kilian, solo él causaba ese efecto—. ¡Te ordeno que te calles de una puta vez! Deja de comportarte como una niña mimada a la que le robaron su muñeca.

El silencio fue inminente en la sala. Kilian necesitaba la ayuda de Adara, sin ella no podría hacerle frente a Seth. El mutismo fue interrumpido por la risa irónica de la recién llegada bruja, quien caminaba con desdén hacia la botella de wiski, dispuesta a servirse un trago.

—Quinientos años ha pasado y aún continúa la misma escena. La malcriada de Yzma enfurecida cuando no se cumple ninguno de sus caprichos. Kilian por su parte, tratando de mantener la estabilidad de su ¨familia¨ y Seth... cagándose en todas las normas sociales como la oveja descarriada que es. Y tú, Will —Le observó—, sirviendo incondicionalmente a esta bola de hijos de puta cuando a veces se te olvida que tú también eres un Black.

Todos se observaron entre sí. Adara no era una persona fácil de persuadir, su temperamento era muy voluble. Kilian sabía que rebatiendo cualquier comentario no lograría su objetivo. Observó a la inestable de su hermana para que no intentase abrir la boca, ya que todo se acabaría arruinándose.

—Adara —Kilian intentó un nuevo comienzo—, necesitamos de tu ayuda. Eres la única que puede neutralizar a Seth.

—¿Qué te hace pensar que voy a tenderte una mano, Kilian Black? Tu familia le dio caza a la mía, tú concretamente. No entiendo en qué momento se invirtieron los papeles. Seth siempre fue un inestable, de él no me sorprende nada, pero, ¿qué pasó contigo? ¿El señor Jesucristo tocó las puertas de tu corazón? —rió malévolamente.

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⏰ Última actualización: Feb 25, 2024 ⏰

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