4: Entre demonios acuáticos y confesiones vergonzosas.

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Observar a Wei Wuxian degustar el helado que han comprado en Caiyi llega a ser entretenido. Jiang Wanyin era consciente de sus expresiones poco sinceras, incluso ahora lucía aburrido.

—¡Esto es delicioso! A-Cheng, ¿Por qué no comes?

—No quiero. No puedo creer que comas con euforia sabiendo que, serás castigado cuando Lan Qiren regrese.

—Por el momento no está, debemos disfrutar mientras podamos. —Sin permiso, toma el postre de su dídi y lo come—. Además, ya has enterrado mi cadáver antes, hacerlo ahora no hará una diferencia.

Cuando Wei Wuxian terminó su castigo, le contó junto a Nie Huaisang sobre el incidente de una novela erótica con el segundo jade, lo había hecho enojar. Como si fuera poco, esa misma noche insistió con la idea de probar el talismán de intercambio de almas sobre ellos mismos, debido a un descuido por las dos veces en donde podrían haber sido atrapados, la activación del talismán se vio afectada y terminaron creando una pequeña explosión.

Ambos huyeron del lugar sin ser vistos.

—¿Quién te asegura que lo haré?

—Tú, me hiciste la promesa de hacerlo siempre. A shijie le encantaría este postre, cuando volvamos compremos algunas para llevarle.

Jiang Wanyin asiente con una sonrisa.

El aroma del licor de arroz se siente en el aire. Wei Wuxian no se hace de esperar y corre a una pequeña balsa, dispuesto a comprarse algunas.

—Si sigues así terminarás cayendo al lago. —Jiang Wanyin grita desde su asiento.

—¡Gracias por tus buenos ánimos, traeré uno para ti!

Al verlo alejarse, nota como gran parte del postre ha sido dejada en el plato, toma la cuchara de palo que le correspondía y le da un bocado.

Los dos jades de Lan están sobre el puente, observando a cada discípulo traído consigo.

Xiongzhang, ¿por qué ellos están aquí? Esos payasos no hacen falta para el exorcismo en el lago Bi Ling. —Cuestiona Lan Wangji, siendo testigo del desastre que Wei Wuxian ha causado con Jin Zixuan.

—El mejor discípulo y el único hijo del líder del clan Jiang son muy conocidos en Yunmeng, es muy probable que sepan hacer más que simples payasadas. —Conecta miradas con su hermano, sonriéndole agrega—: Tú también querías que el joven Wei estuviera aquí.

Las orejas de Lan Wangji se ponen rojas, esquivando la mirada de su hermano.

—No es así.

Lan Xichen observa al aburrido heredero Jiang. Si no fuera por los sentimientos de su hermano, de igual forma habría aceptado que los acompañaran, cumpliría con su deber en la Secta y estaría junto a su prometido.

Su pequeña burbuja de fantasía se rompe cuando escucha los gritos de Nie Huaisang, están siendo atacados por los ghouls acuáticos.

Lan Wangji lanza talismanes de contención a los ghouls que rodean a los discípulos, mientras él se encarga de los alrededores. Sin perder de vista a sus acompañantes, se sorprende por la rapidez en que Jiang Wanyin corre a la ayuda de Wei Wuxian.

Cuando han acabado con los ghouls restantes, regresa junto a los discípulos.

—Xichen gege. —Exclama un asustado Nie al verlo.

—Huaisang, tú no puedes volar espada, aguarda nuestro regreso aquí.

Dejaron a Nie Huaisang junto a Jin Zixuan en una posada, les indicaron que, si tardaban, partieran por su propia cuenta.

La teoría de la felicidad | MDZS.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora