31: Jiang.

81 10 2
                                    

Parte II – Capítulo 31.

Jiang.

Los días han pasado, incluso puede decir que ya lleva más de dos semanas en la soledad. Abandonó a los suyos esperando lograr algo, pero ahora más que nunca cuestiona si esa fue la verdadera razón por la cual salió de Lotus Pier.

Ha oscurecido; sus túnicas negras están manchadas de sangre y tierra, en su cintura aún cuelga la campana que representa a los miembros de la Secta Yunmeng Jiang.

Vuelve a pensar en Wei Wuxian, ¿cuántas veces han sido ya? Encontrandose en esa situación, no puede evitar imaginar el dolor que pasó en los túmulos funerarios.

Un siseo se escucha alrededor. Jiang Wanyin se encuentra alerta ante los posibles ataques por bestias demoníacas o inclusive cultivadores errantes que no desean intrusos en su zona de caza.

El siseo se hace cada vez más fuerte. Sin ser capaz de ver al animal que lo atormenta, camina con prisa, alejándose de la zona de peligro.

No esperaba ser arrastrado a un pozo lleno de lodo, tampoco ser enrollado por una gran serpiente blanca de ojos rojos que superaba su fuerza.

Jiang Wanyin odia el sentimiento; se siente transportado a cuando Lotus Pier fue quemada, a cuando fue humillado ante los Wen. Mueve su mano izquierda, logrando sacar una daga del costado de su túnica.

La serpiente demoníaca no se da cuenta de nada; está más interesada en acercarse lo suficiente al rostro de Jiang Wanyin, quien lo toma como una gran ventaja.

—Líder Jiang.

Una suave voz lo llama. Otra vez ese tormento incierto.

La serpiente no se mueve, lo observa, tan solo unos centímetros lejos de su rostro.

—Líder Jiang.

Jiang Wanyin la ignora y corta parte de la piel de la serpiente, quien sisea de dolor y retrocede.

—Humano débil y estúpido.

De la serpiente brota una gran cantidad de humo negro. Jiang Wanyin se levanta, listo para atacar.

—Tu existencia está condenada.

Ahora se encuentra seguro de que quien le habla es aquella bestia, no hay nadie más con ellos. Era eso o realmente estaba enloqueciendo.

—¡Tu existencia está condenada, Jiang Wanyin! ¡El humano que debió morir hace mucho!

De aquel humo aparecen grandes tentáculos; todos van contra él. Desenvaina su espada y suspira cansado; se defiende como puede; realiza cortes profundos en cada tentáculo que ataca.

Jiang Wanyin es incapaz de acercarse por los repetitivos ataques, pero sin una manera de escapar, solo le queda luchar.

—¡Ven a mí! Solo yo puedo ayudarte, solo yo te daré lo que siempre quisiste. Recuerda, durante mucho tiempo deseaste que las cosas hubieran sido diferentes.

Estaba seguro que la fuerza de aquella cosa era infinita. Hablaba mientras atacaba; con eso se aseguraba de distraerlo.

—Quieres tener tu núcleo de regreso. Desarías no haber estado en contra de Wei Wuxian cuando te reveló la verdad de la transferencia del núcleo.

Mentira. Basta.

Wei Wuxian tiene su núcleo, está junto a su hermana, está en la Secta donde creció.

Él nunca se arrepintió.

—Sin núcleo no eres nada, tienes envidia.

No, no, no.

Uno de esos tentáculos se lanza con él, Jiang Wanyin grita del dolor al ser apuñado en el brazo derecho.

—Soy tu salvación.

Otro, otro, otro.

Jiang Wanyin cae inconsiente.

(. . .)

Su cuerpo tardó un día entero en recuperarse, aunque tendrá cicatrices que lo acompañarán hasta el final.

Aquello logró su cometido, ser uno con Jiang Wanyin.

Fue en uno de los momentos de delirio por las múltiples heridas ocacionadas, que la bestia demoníaca se abalanzó contra su cuerpo, desvaneciéndose de inmediato.

Jiang Wanyin sabe que, a pesar de no haber aceptado directamente, tampoco puede rehusarse. La energía fluye por todo su cuerpo, y si sigue con vida, es por eso.



Jiang Yan-Li llegó a Muelle de Loto tan pronto como pudo, Wei Wuxian había mandado una carta a Lanling Jin tratando de hacer que su shijie mantenga la calma; la desaparición de Jiang Wanyin ha sido una gran noticia para el mundo del cultivo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Jiang Yan-Li llegó a Muelle de Loto tan pronto como pudo, Wei Wuxian había mandado una carta a Lanling Jin tratando de hacer que su shijie mantenga la calma; la desaparición de Jiang Wanyin ha sido una gran noticia para el mundo del cultivo.

Jiang Yan-Li era la única que quedaba con la sangre Jiang. Debía asumir el puesto de líder de Secta.

—A-Cheng debe estar cerca, no puedo ocupar su puesto.

Wei Wuxian puede entender su negativa; desde el primer día ordenó buscar a Jiang Wanyin, pero Muelle de Loto no puede seguir sin un líder; alguien debe hacer frente por la Secta.

Los líderes critican a Jiang Wanyin; la mayoría asegura que se marchó con algún amante.

—Shijie, lo buscaré personalmente. —Wei Wuxian tomó sus manos, sonriéndole—. Traeré a A-Cheng a casa, tal y como él lo hizo.

—A-Xian...

—Conviertete en la líder de Muelle de Loto.

Jiang Yan-Li es una mujer con cultivo débil, la cual durante los años de crisis ha demostrado distintas habilidades en combate. Su puntería en tiro al arco es impresionante; incluso puede compararse con la de Wei Wuxian.

Durante su embarazo mantuvo su perfil bajo, dejó de entrenar y se centró en ser Madame Jin, tal y como el médico pidió por los riesgos de embarazo. Ahora, con el primer mes cumplido de Jin Ling, debe aceptar tomar el lugar de su hermano menor.

—A-Xian, trae a A-Cheng a casa, por favor. —Pide entre lagrimas.

—Lo haré, lo prometo.

Cuando Jiang Yan-Li fue reconocida como la líder de Yunmeng Jiang, los líderes de Secta hablaron sobre la futura desgracia de la Secta Jiang.

Tener a una líder mujer solo les traerá más caos.











Holi, sigo vivito:3

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 09 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

La teoría de la felicidad | MDZS.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora