¿El amor no es lo mío o si?

Capitulo VI

Dahlia

Mí martes transcurrió con total normalidad, sin ningún mensaje de mí ex si así se le podría decir, no me desbloqueo, no pasó más nada, aproveche de ponerme o tratar mejor dicho de agarrar las cosas de la universidad, tenía que presentar unos trabajos prácticos y estaba bastante retrasada, no quería dejarme estar porque eran materias fáciles y si presentaba todos los prácticos no tendría que rendir final, mientras menos materias tenga que rendir en las mesas finales mejor para mí.

También me puse a organizar mí habitación la cual estaba hecha un desastre al igual que mí vida, creo que una vez vi un tik tok que decía que el orden o desorden que teníamos en nuestras habitaciones es cómo está nuestra vida ¿eso será real? pero eso no era tan fácil de solucionarla, con todo en orden a la tarde de vuelta al trabajo, no vi a Sol, solo estaba Mario cuando pasé a despedirme, ese día si aproveche de dar una vueltita en la moto obviamente a toda velocidad necesitaba esa adrenalina de sentir el riesgo. Luego de eso volví a casa cenamos en familia como casi nunca, cena que mi madre aprovechó para invitarme a un viaje de estudio que iban a realizar con unos alumnos.

-Dahlia te quería preguntar si me quieres acompañar a un viaje que haremos con los chicos- dijo terminando la cena- serán unos cinco días, aún nos queda organizar unas cuantas cosas también pensé que me podrías ayudar con eso, sé que te gusta viajar así que podrías aprovechar- lo pensé un rato antes de dar mí respuesta

-Si me gusta la idea- pensé que sería una manera de distraerme- ¿dónde piensan ir? ¿ya tienes quien los lleve? o cómo te estás organizando con eso- trate de preguntar

-¿Voy a contratar un colectivo, será para los chicos de tercero, un viaje de estudio y también como viaje de egresados, pensamos ir a Bahía Blanca, ya te mostraré los planes que tengo, té quieres sumar? - preguntó animada, parece que sí estaba emocionada por el viaje- también quiero llevarlo a Hernán con nosotros y otros dos compañeros de él que tienen excelente promedio- me parecía buena idea

-Está bien si acepto ir, decime con tiempo así veo si no tengo ningún compromiso con la universidad- le pedí necesitaba organizarme

-Si mi vida seguro será en el fin de semana largo que se aproxima, no está del todo confirmado pero será lo más probable- para eso faltaba un poco más de un mes, así que me pareció perfecto

-Dale si, gracias por la invitación- me levante dándole un abrazo

-De nada mí vida- aproveche de mantener este abrazo que lo necesitaba- te quiero hijita, ya te mandaré lo que estuve viendo, hay hoteles lindos para quedarnos y bueno si necesitaré que me des una mano con organizar una especie de aventura, dónde podremos ir, lugares llamativos, vos que sabes más de esta onda- dijo riendo y dándome un beso en mí cabello

-Si mami yo te ayudo seré la delgada de las aventuras ya buscaré en internet que cosas llamativas podremos visitar- me reí- y también te quiero

-Gracias- dijo soltándome- me voy a lavar las cosas de la cena y a acostar deberías hacer lo mismo ya es un poco tarde- tenía razón ya iban a ser las 1am

-Ya me voy a costar no te preocupes, hasta mañana mami que descanses- dije despidiéndome

- Que descanses hija- dijo dedicándome una sonrisa

Luego de hacer mí rutina nocturna me propuse dormir, cosa difícil de lograr estos días ya que mi mente me jugaba malas pasadas recordando todo, al final logré poder dormir a eso de las 5:00am. Me desperté temprano dentro de lo que cabe, me propuse fijarme cómo usar el programa que le tenía que enseñar a Sol, no quería quedar como una idiota si me hacía una pregunta, me pase como dos horas viendo todo y creando en mí cabeza posibles preguntas, ¿todos hacen eso o solo soy yo la loca? Después de eso me prepare un sándwich, salí a caminar con mis perros para despejar un poco la mente, me bañe y me dormí, hasta un poco antes que sea hora de ir al kiosco, realmente mí vida era muy monótona no tenía muchos amigos, mí otra mejor amiga se había mudado para estudiar en otra ciudad así que no la podía ver y tampoco hablábamos mucho, luego a muchos no consideraba amigos como para contarle mis problemas, solo eran conocidos.