IV. Samantha Rink

59 35 5
                                    

2 años antes... de la primera muerte

El eterno día.

Aveces pensaba...

¿Cuanto faltaba?

Esperar hacía que dejará de oír las abruptas voces de mi cabeza, esas que me incitaban a hacer lo que se nos viniera en ganas.

Tenía que verla... Ella hacia que mi alma corrupta se apagará automáticamente.

Un eterno día.

Aquel gran sol de la tarde era deslumbrante y alusivo en los días en que comenzaba la temporada de invierno.

Me encontraba mirando el reloj en la pared del aula, contando los segundos que faltaban para salir de esta odisea.

La típica clases ya había terminado hace dos minutos exactos.

¿Cuándo más? Los minutos eran limitados pero aún así pasaban a la velocidad de un caracol.

Miré como se formaban nubes grises en los cielos, ocultando los rayos del sol.

El timbre por fin anuncio la salida de este manicomio llamado "universidad" al llegar a la salida principal me encontré con la única mujer con quién podía entablar una conversación por horas como si fuéramos las mejores hermanas del mundo.

La única chica que podría usar como referencia confiable, mi número de emergencias.

La bag girl del instituto, Samantha Rink.

Mi única familia en el país de hecho.

Está chica aún usaba el estilo de Grunge o como yo le decía "una combinación de negro con más color negro"

Eramos totalmente diferente, mis atuendos eran con tonos opacos y Vintage.

- Annie_ exclamó al verme con esa típica sonrisa exagerada en su rostro haciendo señas para que llegará a la salida.

- Estoy caminando Sami_ dije apresurando mis pasos y un tanto cansada de este lugar.

- Tengo hambre vamos a comer_ me hace ojitos_ tengamos una cita en la torre Eiffel.

- Primero si vamos a comer, y segundo estamos en Londres_ bromeó con eso último.

- Las primeras clases de hoy estuvieron muy divertida_ me mira mientras me da una botella con mi jugo favorito_ ¿Que tal las tuyas?

Avanzamos un poco por la vereda para luego salir al puente.

- Realmente no estuvieron mal_ expliqué sin más_ lindo sería ver a la profesora en un ataúd.

Ambas reímos, hasta que comenzó a llover, tuvimos que esperan en alguna zona con techo para resguardarnos de la lluvia.

Samantha es la única persona que realmente me conoce, ella sabe perfectamente que me alegraría con la muerte de algún conocido.

Ella conoce mi alma corrupta.

El sendero estaba lleno de charcos y las gotas no disipaban haciendo la lluvia más intensa.

- Mejor vamos a mi casa_ grito ya que el sonido de la lluvia era fuerte_ Es más cerca que la tuya.

Solo dije si con la cabeza para ser sacada hacia la lluvia.

Agradezco que mis botas de cuero marrones son lo bastante altas como para evitar mojarme los pies.

Sami me hablaba durante el camino pero no lograba escucharla.

Me quedé viendo cómo la ciudad se preparaba para recibir la noche.

A pesar que la lluvia era fuerte los restaurantes y cafetería tenían su letrero de "Abierto"

Por fin llegamos, la verdad siempre tiene razón su casa es más cerca que la mía.

La plata baja ocupaba una hermosa panadería al estilo francesa dirigida por su padre, saludé y subimos las escaleras.

Al llegar nos desvistimos y entramos a la ducha.

Samantha era un poco más alta que yo así que se encargó de consentirme, limpiando mi cabello y lavando mi espalda.

Sus manos me tocaban muy bien hasta sentir esos típicos besos sobre mis hombros.

No conozco a amigas que se quieran así, pero ni me importa.

- Sami_ dije casi en un susurro.

- ¿Si? Annie_ hablo en el mismo tono.

- Ya basta_ dije con amabilidad.

Se que no lo hace con mala intención pero no quiero llevar nuestra amistad a un nivel incontrolable.

Me conozco... Por eso mismo no voy a ceder porque se que la amaría de una forma que no es correcta.

- Está bien.

Mi ropa estaba mojada así que me prestó algo de su armario.

Cenamos y luego empezamos a estudiar cada una por separado.

Conocí a Sami cuando vine de intercambio a Londres hace como 7 años estaba en la preparatoria hasta ahora en la universidad.

Samantha y el señor Rink han sido mi única familia, ya que la mía nunca fue unida y por eso me mandaron aquí.

Sin embargo no les guardo rencor porque les tengo su debido respeto.

Al compartir la misma cama le recuerdo a mis voces que ella es familia y no debemos dañarla.

Así que tomo un polo extra le ayudo a ponérselo y nos acurrucamos hasta quedarnos dormidas.

Sami nunca ha tenido novio porque cree que los hombre no son tan necesarios como las chicas osea yo.

Pero no le gustan las chicas... Es algo complicado de explicar.

Ella es muy extrovertida, y se que el día que yo llegara a falta la destrozaría.

Soy capaz de arruinar mi mundo con tal de verla feliz.

Estoy conciente de que si me debo dañar por ella lo haría.

Una vez manches mis manos de sangre por ella, aquel tipo que la acosaba sexualmente murió en el mismo puente que nosotras cruzamos para ir a casa.

¿Cómo lo hice?

Utilize heroína diluida en alcohol, me hice pasar por puta hasta que su pobre corazón no aguanto la pequeña dosis de éxtasis.

Los policías creyeron que murió por sobre dosis que el mismo había consumido, debido al lugar era imposible determinar las huellas de algún sospechoso.

Concluyeron diciendo que fue una muerte accidental o suicidio.

¿Heroína?

He tenido problemas con la ley pero siempre existe una forma de arreglar las cosas.

Lo que sea por Samantha


Los Sentimientos De La VerdadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora