Ve por mis cosas, Potter | James Potter

Frog Choir

Chapter. 12

"Coro del Sapo"
Runas Antiguas

No pasó un sólo segundo de sentarse y James Potter ya estaba sobre ella. Sorprendentemente había llegado muy temprano a la clase, claro que nunca sacaba un solo libro.

—¿Entonces? ¿Qué tal el reencuentro entre primos?

Romance lo ojeó, el chico estaba apoyado sobre las palmas de sus manos, le dio la sensación de que intentaba aparentar ternura, pero no le salía muy bien.

—El concepto de primos me aterra considerando que querían desposarnos —no le devolvió la mirada, solamente sacó sus libros, plumas y pergaminos para la clase.

James se estiró, escondió una risa entre su suspiro, —Trauma dump, vamos un paso adelante. ¿Qué sigue? ¿Un abrazo?

Romance se mantuvo firme, mirando el escritorio de la profesora que aun no llegaba.

—He sido generosa contigo, puedo escucharte, James Potter, pero nunca me toques.

Recibió un suave golpe en el hombro, lo que la descolocó.

—Sólo estoy jugando, vamos dime, ¿cómo estuvo la clase con Black? ¿Te sentaste junto a él?

James se inclinaba hacia ella y se removía en su asiento como un niño queriendo llamar la atención de su madre. El constante entusiasmo de Potter la irritaba, quizá lo hacía a propósito, pero pensar que esa era su verdadera personalidad, le aterraba.

Dejó pasar el golpe, inhaló y exhaló para relajarse.

—Por más estupida que sea la clase de Estudios Muggle, prefiero tomar apuntes que darle un segundo de atención a Sirius.

De repente unos libros se azotaron contra el escritorio de Romance. El repentino estruendo no asustó a Potter, pero sí lo hizo ponerse alerta, levantó la mirada solamente para encontrarse con Vena Voison.

Romance suspiró. Aguantar a Vena y a Potter en la misma clase era un deporte de alto riesgo. Vio aquellos libros, unas palmas encima de sus pergaminos y sintió una presencia no grata invadiendo su espacio personal.

—Es verdad, la hija dorada resultó ser de hierro y se oxidó —dijo Vena, con su compañera Slytherin detrás de ella como perro guardián—. Escuché que estás en una clase de Muggles. ¿Qué piensa tu madre de eso?

James Potter se levantó de su asiento.

—¿Alguna vez haces otra cosa que no sea meterte en la vida de los demás?

Vena se rió entre dientes, lo miró con cierta fascinación y brillo en sus ojos.

—Veo que reemplazaste a Regulus. Además de asistir a clases mediocres, tu compañía se ha vuelto... escueta.

Romance rodó los ojos.

—James, por favor, siéntate.

—¿Qué! ¿Por qué debe...!

Por primera vez desde que llegó, Romance lo miró; y eso bastó para que el chico se calmara.