Avatar La leyenda de Krypton

Capitulo 51

Cuenta regresiva

Sólo faltaban tres días para el regreso del cometa Sozin.

Después de una noche completa de descanso, volvió a entrenar a primera hora de la mañana, y Zuko hizo que Aang repasara todo lo que había aprendido hasta ahora con Fuego Control. Aang estaba lanzando fuego por todas partes en el patio trasero, culminando lanzando fuego a izquierda y derecha mientras lanzaba fuego hacia adelante. Sin embargo, solo obtuvo unas pocas brasas de ese movimiento final, lo que provocó una reprimenda de Zuko hasta que Aang lo hizo de nuevo y esta vez obtuvo tres grandes columnas de fuego. Para entonces, Aang se sentía agotado y Zuko quería que volviera a pasar por todo eso.

Katara salió de la casa, sosteniendo un par de sandías, que habían sido abiertas y convertidas en bebidas con pajitas. "¿Quién quiere jugo de sandía?"

"Yo", dijo Aang, y ya se dirigía hacia ella.

Zuko lo detuvo agarrando la parte de atrás de la camisa de Aang. "Tu lección aún no ha terminado."

No muy lejos, Suki estaba descansando junto a Sokka. "Vamos Zuko. Solo tómate un descanso por unos minutos."

"Bien", dijo Zuko, dejando ir a Aang. "Si quieres holgazanear como un montón de caracoles perezosos todo el día, ¡adelante!"

Desde el otro extremo del patio trasero, Taiyo estaba observando todo el asunto, más inclinado hacia la posición de Zuko que hacia la de Aang en la discusión. Aún así, fue lo suficientemente paciente como para dejar que Aang tuviera su breve descanso, aunque iba a ser mucho más corto de lo que a Aang le hubiera gustado. Taiyo caminó lentamente hacia donde Aang estaba disfrutando de su bebida frutal, cruzándose de brazos y dándole una mirada desdeñosa. Luego sus ojos brillaron rojos, dispararon fuego a la bebida, lo que resultó en la explosión de una sandía que los bañó a ambos con jugo rojo.

"¿Por qué hiciste eso?" Exigió Aang, lamiendo el jugo de su cara.

"No tenemos tiempo para esto", dijo Taiyo. Se limpió el jugo salpicado. "El cometa Sozin casi está aquí y no estás preparado para recibirlo".

Aang giró la cabeza, mientras aparecía una mirada sombría. "Sí, no estoy listo para luchar contra el Señor del Fuego".

Sokka se levantó y caminó hacia ellos. "No necesita serlo, no cuando te tenemos de nuestro lado".

"Creímos eso durante el eclipse, y mira a dónde nos llevó eso", razonó Taiyo. "El Señor del Fuego tiene gente dura de su lado ahora, y Azula probablemente le dio algo de kriptonita. Hay una buena posibilidad de que no pueda vencerlo por ti, Aang".

"El Señor del Fuego dominaba el Fuego Control antes de que yo naciera", describió Zuko. "Puede crear un rayo en un instante. Y será más fuerte que nunca durante el cometa. Necesitarás todo lo que puedas conseguir cuando luches contra él".

Aang se sentó, acercó las piernas al pecho y rodeó las rodillas con los brazos. "Bueno, tal vez no tenga que vencerlo ahora".

"¿No puedes hablar en serio?" —Preguntó Taiyo.

"Sólo escúchame", insistió Aang. "La Nación del Fuego ya tomó Ba Sing Se, así que prácticamente ya ganaron la guerra. ¿Qué más podría hacer el Señor del Fuego ahora que ya controla el Reino Tierra?"

"Él no controla todo", corrigió Taiyo. "Gran parte de ella aún resiste".

"No durarán mucho más," interrumpió Zuko. "Cuando Ozai lleve su nueva flota de dirigibles al Reino Tierra, lo quemará todo hasta los cimientos".

Cada mirada sorprendida estaba puesta en Zuko, siendo Aang el primero en decir lo que todos estaban pensando. "¿Por qué no nos dijiste eso antes?"

"No pensé que fuera necesario", respondió Zuko. "Supuse que todavía ibas a luchar contra él antes del cometa".