What I Have

Capítulo 1

- ¡YA SON LAS 9 ANDROMEDA!

Escucho un toc toc

- ¿ALO? ¿TODAVIA VIVES? 

Penosamente si

- ¡LA UNIVERSIDAD!! ¡SON LAS 9 LLEGARAS TARDE!!!

Es verdad.

Abro los ojos y dejo que primero se levante mi cerebro, eso toma tiempo.

Salgo de la cama y corro al baño, me cepillo los dientes, lavo mi cara, regreso al cuarto para tomar la ropa que deje tirada ayer y me visto, acomodo mi flequillo frente al espejo, bloqueador, rímel, hidratante de labios, mochila lista del día de ayer.

¿Qué me falta?

¿Mi cerebro? Dentro de mi cabeza.

¿Mi cabeza? Pegada a mi cuerpo.

Listo.

Bajo a la sala, tarde 15 minutos, Flash se queda seco a mi costado.

- ¡Taraaaaa! ¡Lista!

- Wow, funciono de nuevo — me dice mamá.

- ¿De nuevo? — Volteo a ver el reloj empotrado de la pared son las 7:35 a.m. – ¿Acabas de levantarme temprano con engaños otra vez?

- Se dice "Gracias mamá por preocuparte por mi"

- Gracias por casi provocar un mini infarto, creí que llegaría tarde — y recuerdo que yo tengo algo llamado despertador —  Por lo menos es el ultimo examen ¿Sabes qué significa? Adiós universidad, al fin.

- Viva la vida laboral entonces yupi – dice mi mamá con muy falsa alegría diría yo mientras saca leche normal de la refrigeradora y lo deja frente a mi puesto en la mesa del comedor.

- ¿Yo? ¿Trabajar? Pero si apenas soy una niña post adolescente — digo mientras guardo la leche normal, que no me gusta y en su lugar saco leche de almendras.

- ¿Niña de 18 años? — Si, ya tengo 18 pero trabajar es mucha responsabilidad para este ser de 1.55 m de largo.

- El psicólogo decía que la Juventud se lleva en el corazón, y más vale hacerles caso a los expertos eh

- Bueno, me voy al trabajo, suerte Andro, cuando llegues, te toca lavar los trastes, limpiar el refrigerador y meter la ropa a la lavadora.

¿Había dicho Flash? Quise decir cenicienta, disculpen, me confundí de película.

En fin.

Haciendo cálculos tengo 1 hora para hacer mi desayuno, comerlo y digerirlo, y otra para llegar tranquilamente a la universidad.

Preparo lo único que me sale bien para no morir de envenenamiento, panqueques de avena. Me siento en el comedor con mi desayuno y mi laptop para repasar para el examen. Y a esto le llamo paz y tranquilidad.

Yo amo y adoro mi casa cuando estoy completamente sola. Soy feliz, cero ruidos.

Me pongo a repasar recién ahora porque con adrenalina trabaja mejor el cerebro, eso escuche por ahí, y si no lo escuche pues me lo invente, pero de que me funciona, me funciona.

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- Hola, buenos días — Saludo a los de seguridad de la puerta de la universidad, estos señores me han visto la cara durante 3 años y me siguen pidiendo identificación como si no me conocieran.