Destinadas a conocernos - KIVI

1. La Rutina Diaria

Como todos los días me levantaba para poder ir a mi trabajo, era costumbre ya, los días se me hacían repetitivos. Me había mudado aquí a Barcelona para convivir con la que ahora es mi ex pareja. No tenía motivo para estar ahí pero tampoco tenía motivo para regresar a lo que abandoné en un principio. Ahora trabajaba como una señora amargada y mi vida social fue encaminada hacia abajo al ver como la mayoría de mis amigos me habían dejado de lado después de mi ruptura, por suerte tenía a mis dos mejores amigos Denna y Álex eran los que siempre me ayudan y a pesar de todo siempre estaban para mí.

Me vestí con ropa de calle algo sencillo, caminé unos 15 minutos hasta llegar a mi trabajo donde me recibía una Denna bastante contenta y emocionada.

"Vio, llegaste justo a tiempo" Dijo la rubia cuando vio a la pelirroja asomarse a lo lejano. Violeta conoció a Denna gracias al trabajo del que formaba parte ahora, las dos son camareras y después de un tiempo acabaron haciendo muy buenas migas entre las dos.

"¿Qué paso Denna? Contesté mientras sacaba la llave para poder abrir el local. El local era de un señor rozando los cincuenta más o menos, tenía un hijo llamado Martin el cual pasaba algunas veces y nos solía saludar.

"Hoy viene Álex a vernos"  Mire a mi amiga, ella estaba enamorada de Álex y ellos eran una pareja muy bonita. Llevaban saliendo más tiempo del que yo había estado con mi pareja anterior que fueron más o menos 2 años.

"Que bien, me alegro mucho de que haya decidido por fin pasarse a vernos" Me estaba haciendo la indignada ante mi amiga, nuestro amigo trabajaba un poco más lejos así que no nos podíamos ver todos los días a diferencia de Denna y yo que somos vecinas.

"No seas mala, él hace un esfuerzo" Su amiga enamorada lo defendía siempre de cualquier comentario aunque fuera una simple broma, admiraba mucho la relación que tenían y me parecían de lo más adorable. 

"Lo sé Denna" terminé de abrir el local y nos adentramos en él, nos fuimos a la parte de atrás para cambiarnos y ponernos nuestros trajes y empezar la jornada larga que nos esperaba hoy.

A lo largo de la mañana mucha gente entraba y salía, no paraban de salir cafés y bocadillos para que la gente desayunara. La tarde se hizo más amena, la gente solía venir más a desayunar entonces las meriendas eran de lo más tranquilas. En particular mi mirada se desvió repetidas veces a una morena que estaba sentada en una de las mesas del fondo junto a una pelirroja, habían pedido unos cafés que les entregué pero después desaparecieron sin dejar rastro. Apoyé las tazas de sus respectivos cafés en mi bandeja repleta de tazas de otros clientes y después estaba dispuesta a poner las tazas en el lavavajillas encontré un papel con una nota escrita a mano. 

"Escríbeme +34 *** ** ** **"  No tuve tiempo de reacción y cuando me di cuenta, tenía a Denna detrás mío.

"Parece que alguien quiere hablar contigo" Comentó detrás mientras soltaba una risilla pícara, no se me había pasado por la cabeza escribirle a la persona que me dejará ese papelito, decidí centrarme más en el trabajo y la nota sería algo que discutiría después conmigo misma.

La tarde fue de lo más aburrida, la gente iba disminuyendo poco a poco hasta que no quedó nadie en la cafetería, Denna y yo fuimos a la parte trasera para volver a ponernos nuestra ropa de calle, cerré el local y después fuimos rumbo a casa las dos juntas.

"¿Le vas escribir?" Preguntó Denna sacándome un poco de mis propios pensamientos. 

"¿Qué?" Fueron las únicas palabras que salieron de mi boca.

"¿Vas escribirle al número que te dieron hoy?"

"No lo sé" Fue lo único que dije para seguir caminando y mirar hacia delante.