26. La Lista

1.5K 65 0
                                    

Violeta entró en la habitación con el corazón aún lleno de la intensa conversación que acababa de tener con sus padres. Sin embargo, al mirar a su alrededor, notó que la habitación estaba inusualmente tranquila y vacía. Una sensación de inquietud se apoderó de ella cuando se dio cuenta de que Chiara no estaba allí.

Frunciendo el ceño, Violeta buscó en la habitación con creciente preocupación, pero no había rastro de su chica. Una oleada de ansiedad invadió, preguntándose donde podría estar Chiara u si algo malo le había pasado.

Con manos temblorosas, Violeta sacó su teléfono y marcó su el número de Denna, sintiendo el corazón en la garganta mientras esperaba una respuesta. Sin embargo, el tono sonaba vacío, sin respuesta de la rubia.

El miedo se apoderó de Violeta mientras su mente empezaba a imaginar los peores escenarios posibles. ¿Qué podría haberle pasado a Chiara? ¿Dónde podría estar en ese momento?

Violeta se quedó tumbada en la cama mientras esperaba a Chiara, su corazón latiendo con una fuerza en su pecho mientras se preparaba mentalmente.

Chiara se encontraba en la habitación de al lado de Ruslana y Denna, compartiendo un momento íntimo y sincero con sus amigas. Con una sonrisa radiante en el rostro y los ojos brillantes de emoción, Chiara no podía contener la alegría que sentía al hablar sobre su profundo amor por Violeta.

"Saben, chicas", comenzó Chiara, su voz resonando con calidez y felicidad. "Estoy completamente enamorada de Violeta. Es increíble cómo ha cambiado mi vida desde que llegó ella."

Ruslana y Denna la miraron con atención, captadas por la emoción palpable en las palabras de Chiara. Estaban encantadas de verla tan feliz y realizada en su "relación" con Violeta.

"Es increíble cómo alguien puede llegar y transformar por completo tu mundo", continuó Chiara, con una expresión de asombro en el rostro. "Violeta me ha mostrado lo que significa querer a alguien de verdad y la verdadera felicidad, y no puedo imaginar mi vida sin ella la verdad".

Ruslana y Denna sonrieron con complicidad, emocionadas por la profunda conexión que Chiara había encontrado con Violeta. Estaban felices de ver a su amiga tan enamorada y realizada en su "relación".

"Que cursi te nos has vuelto" Dijo Ruslana, con un brillo de felicidad en sus ojos al notar a su amiga ilusionada. "Es que la quiero tanto" concluyó de decir Chiara llevándose una mini palmada en el hombro por parte de Ruslana.

Chiara entró en la habitación con una sonrisa en el rostro, pero se detuvo en seco al ver la expresión enfadada y preocupada de Violeta. La tensión en el aire era palpable mientras Violeta comenzaba a discutir con ella, sus palabras llenas de frustración y miedo.

"¿Dónde has estado?", preguntó Violeta con voz temblorosa, su tono cargado de ansiedad. "Te he estado buscando por todas partes, estaba tan preocupada"

Chiara trató de mantener la calma, sabiendo que era importante no dejarse llevar por la ira de Violeta "Lo siento, Vivi", respondió suavemente. "Estaba con Ruslana y Denna, solo me retrasé un poco. No quería preocuparte."

Sin embargo, las palabras de Chiara parecían caer en oídos sordos mientras Violeta continuaba expresando su frustración y miedo. Las palabras de Chiara no parecieron calmar a Villeta, cuya angustia seguía siendo evidente en cada gesto y cada palabra. "No puedes simplemente desaparecer así", insistió Violeta, su tono elevándose con cada palabra. "No sabía qué pensar, si algo te había pasado"

Chiara intentó mantener la calma "Vio, por favor, mantén la calma" instó, su voz resonando con paciencia y comprensión. "Entiendo que estés preocupada, pero no ayuda a nadie dejando que tu ira se apodere de ti"

Pero las palabras de Chiara solo parecían avivar aún más el fuego de Violeta, quien continuaba expresando sus temores y preocupaciones en un torrente de emociones abrumadoras. La discusión se convirtió en un remolino de palabras y gestos, con Violeta desahogando toda la angustia acumulada dentro de ella.

"¡No entiendes!", exclamó Violeta, sus ojos brillando con desesperación. "Tengo miedo de perderte, Chiara. No puedo soportar la idea de que te puedas ir."

Chiara se acercó lentamente a Violeta, extendiendo una mano con delicadeza para intentar calmarla. "Lo entiendo, amor", dijo con voz suave y tranquilizadora. "Pero necesitas calmarte. Estoy bien, estoy aquí contigo. No me voy a ir."

Las lágrimas comenzaron a emerger en los ojos de Violeta mientras luchaba por controlar sus emociones abrumadores. "Lo siento", murmuró, sintiéndose abrumada por la culpa y el miedo que la habían envuelto en un abrazo apretado.

Chiara la rodeó con los brazos con ternura, envolviéndola en un abrazo reconfortante "Está bien, Vio", susurró con cariño. "Todo va a estar bien, Estamos juntas en esto."

Violeta se aferró a Chiara con fuerza, sintiendo el amor y la seguridad que emanaban de su presencia. A pesar de la discusión acalorada, sabía que el amor que compartían era más fuerte que cualquier conflicto, y juntas podrían superar cualquier obstáculo.

Fueron a tumbarse en la cama donde Violeta se quedó acurrucada entre los brazos de Chiara ya apoyada en su pecho. Lo que Violeta no sabía era que Chiara tenía cada una de sus inseguridades apuntadas en una libreta que siempre llevaba a mano para sus composiciones.

Inseguridades de Vio para superarlas juntas:

1. Miedo al rechazo por parte de sus familiares: Superada.

2. Inseguridad sobre su apariencia física.

3. Dudas sobre su valía personal y autoestima.

4. Temor a no ser lo suficientemente buena en sus relaciones.

5. Preocupación por no estar a la altura de las expectativas de los demás.

6. Sentimientos de inferioridad en comparación con los demás.

7. Miedo al abandono en sus relaciones íntimas.

8. Temer a ser vulnerable y mostrar sus verdaderas emociones.

9. Sensación de no encajar.

10. Preocupación por no ser lo suficientemente atractiva.

11. Temor a ser traicionada por aquellos en los que confía.

12. Miedo a repetir patrones de comportamiento dañinos en futuras relaciones.

13. Temor a ser manipulada o controlada de nuevo.

14. Preocupación de volver a una relación tóxica.

15. Miedo de ser etiquetada como "dañada" o "rota" por parte de posibles parejas.

Chiara solo sabía que iba ayudarla a superar cada una de ellas poco a poco.

Destinadas a conocernos - KIVIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora