Mi destino es usted, profesor Joo

regreso a clases

Los días pasaban, cada quien vivía las consecuencias de encontrar a su alma gemela de diferente manera y Dan tenía muy claro que nada era como en las películas, en esas escenas ficticias no mostraban todo el dolor que un Omega podía llegar a sentir al ser rechazado de la manera más cruel por su alfa, alfa que se supone debía de cuidar de el, decirle que todo estaría bien porque ahora estaban juntos, pero no lamentablemente a Dan no le tocó el Alfa más bueno del mundo. Su alfa simplemente lo despreciaba, lo miraba con odio y repulsión y eso hacia que el Omega se muriera por dentro.

El pequeño había estado una semana entera en la cama, su abuelita intento de todo para animarlo pero nada resultaba, el Omega solo lloraba y chillaba llamando a su alfa, (ese llamado especial de todos los omegas tenían y que usaban en momentos críticos, para avisar a su pareja que estaba en peligro y necesitaba ayuda y protección) su marca dolía demasiado, sentía que quemaba y estaba muy inflamada a pensar de que su abuelita cuidaba que no se infectara. Haci paso toda esa semana, llorando, sin comer y solo dormía. Se había puesto más flaco y eso preocupaba a su tutora la cual quería quedarse a cuidarlo pero la necesidad era más fuerte, era quedarse con Dan y no comer en semanas o dejarlo dolor y traer dinero para los gastos, gastos que habían incrementado por la deuda que ahora tenia en el hospital. Así que Dan se quedaba solo la mayor parte del día y noche, por que su abue llegaba muy tarde, aunque para ese punto Dan había perdido la noción del tiempo.

Esa noche su abuelita llegó muy cansada a casa, calentó la comida y afortunadamente Dan comió un poco.

-Por qué no regresas a la escuela?— cuestionó la señora mientras tomaban un poco de té— te hará bien, asi podrías estar cerca de el

-pero el no quiere verme— Dan se mantenía recostado, tapado hasta la cabeza, el frío que hacía en su pequeña casa cada vez era mayor, eso o tal vez las defensas del chico estaban bajando mas—

-pero con que lo veas es necesario, no necesitas estar pegado a el, inténtalo cariño eso te ayudara— su abuelita trataba de darle ánimos, ya se había cansado de ver a su nieto en esa situación—

-Después de pensarlo un poco Dan por fin respondió— está bien, iré el lunes

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Y el lunes llego, Dan despertó temprano, desayuno, tomo su comida para la escuela y salió de su casa rumbo a la institución educativa. Caminaba sin muchas ganas mientras pateaba una pequeña piedra, así hasta llegar a la Escuela. Entro y fue directo a su salón, afortunadamente nadie se había enterado de lo que sucedió, la Escuela lo había escondido muy bien.

Entro al aula y se sento hasta el frente, hacia estaría a la vista de los profesores y las burlas y bromas disminuirian, espero a que el profesor llegará mientras el salón se iba llenando de los alumnos.

Cuando el profesor entro todos se sentaron y pusieron atención, Dan se dio cuenta de que no lo conocía, era un alfa alto, cabello rubio, bastante guapo, tenía un aroma agradable y su sonrisa inspiraba confianza.

-bien, retomemos lo de la clase anterior— comento recorriendo a sus alumnos con la mirada, percatandose de una cara nueva, alguien que no había visto en las clases anteriores— jovencito, se acaba de inscribir?

-Dan tardo en reaccionar para después negar— no señor, estuve ausente por problemas personales, solo estuve aquí el primer día— dijo respetuosamente

-Ya veo, cuál es tu nombre?— pregunto de una manera amable-

-Soy Kim Dan

-Mucho gusto, Kim Dan soy el profesor Choi Heesung e imparto la materia de inglés

-Mucho gusto, profesor Choi— le dio una sonrisa amigable la cual fue correspondida por el profesor-

-tienes que ponerte al corriente con las actividades, puedes pedírselas a tus compañeros

-sobre eso, no podría decirme usted cuáles son? Si no es mucho pedir— Dan estaba avergonzado de pedir tales favores.-

-no puedes pedírselo a tus compañeros?

-...lo aria pero se que no me los darán

-por que no lo arian?

-no les caigo muy bien, podría por favor darme los trabajos?

-bien, ve a mi oficina después de clases

-muchas gracias— sonrió en grande.-

Después de aquella conversación el profesor siguió con su clase, algunas cosas no le quedaban muy claras a Dan pero esto era por todo lo que había perdido de clases, asi que hizo una nota mental para preguntarle después al profesor, estaba tan concentrado que incluso por un momento olvidó el dolor de su marca y al pequeña opresión en su pecho.

La clase del profesor Choi termino sin inconvenientes y el siguiente profesor remplazo al de inglés, está vez la clase era química y el profesor era un señor bastante grande, no muy viejo como si abuelita pero por su cara se sabía que había vivido bastante, dan lo recordaba por qué lo había visto en la primera semana de clases, una ves iniciada la sesión todos se callaron y prestaron atención, bueno con decir todos se refiere a la mayoría por qué algunos seguía hablando y prestando nula atención a la clase cosa que era totalmente lo contrario a Dan, está materia se le daba muy bien y es por eso que prestaba más atención, ya que le encantaba adquirir nuevos conocimientos respecto al tema.

Sus siguientes clases fueron iguales a las anteriores, todo iba muy bien demasiado para Dan, o tal vez si había una que otra broma o insulto pero el Omega estaba tan concentrado en las clases que ignoraba todo lo demás, si era fácil ignorar la molestia en su cuerpo era mucho más sencillo ignorar a los idiotas que tenía como compañeros.

El recreo llegó y Dan no dudo en levantarse y correr o más bien caminan rápido hacia el baño, se aguantó todas las clases y estaba por explotar, es por eso que entró rápido a los sanitarios e hizo sus necesidades, al terminar arreglo su uniforme y lavo sus manos, camino hacia la salida secando sus palmas en el pantalón del uniforme, es por eso que llevaba la mirada baja y no se dio cuenta de que alguien estaba frente a el, siguió su camino y esto trajo como consecuencia que el Omega chocará con la persona de en frente.

-Ohh lo siento profesor— el pequeño rápidamente se disculpo haciendo una pequeña reverencia-

-no te disculpes, no paso nada— respondió el docente Heesung-

-aun así lo siento, estaba distraído

-yo soy el que debería disculparme un poco más y te podrías caer y hacerte lastimando— el profesor hablaba con un tono algo preocupado— con ese cuerpo tan pequeño y delgado te puedes lastimar fácilmente

-s-si— Dan estaba más que avergonzado con el comentario del mayor-

-bueno te dejo para que vallas a comer algo, no quiero quitarte tu tiempo— el profesor llevo una de sus manos a la cabeza de Dan y lo despeinó juguetonamente mientras sonreia-

-No se preocupe, de todas maneras solo iré a pasear por ahi— respondió el Omega mientras sonreía al toque del mayor-

-no comerás algo antes?

-...no traje nada y la comida aquí es más cara— respondió Dan con la mirada baja y el rubor subiendo por sus mejillas-

El profesor entendió todo a la primera, era más que obvio que si alumno era de bajos recursos, por la ropa que tenía puesta y el echo de estar tan delgado, era evidente que había una desnutrición en su pequeño cuerpo.

- si me esperas un momento podría invitarte tu almuerzo— menciono con amabilidad el docente-

-eso sería abusar, no puedo hacer es—respondió de inmediato el Omega-

-pero te estoy invitando, por mi propia cuenta eso no cuenta como abuso— respondió mientras entraba al baño— así que me esperas aquí

Y Dan no tuvo más opcion que esperar al profesor, mientras hacia esto sintió una molestia en su marca y algo más como si alguna sustancia le recorriera el cuerpo y lo hacía calentarse, apretar los puños y fruncir el ceño, así es era irá creciendo dentro de el, lo que el Omega no sabía era que esa emoción no me pertenecía a el, si no al alfa al que estaba unido, mismo alfa que lo veía desde la sala de reuniones.