El dragón y la novia

cap 11 [ Ido ]

La joven dragón inclinó la cabeza con curiosidad, mientras su nueva amiga, Mia, corría por los campos casi pasando la puerta.

Su padre le advirtió que no pasara el límite.

Sobre cómo el mundo de los vivos era un lugar peligroso.

Sobre cómo estaba lleno de las malas acciones de los humanos.

Pero a Biyoo le gustaban los humanos, después de todo, los humanos eran las formas originales de sus amigos y personas a quienes consideraba familia. Sangah, uno de los espíritus humanos más antiguos de la frontera, era como una madre para ella en ausencia de su único padre.

Gilyoung y Yoosung eran sus amigos y nacieron humanos.

Incluso los simpáticos guardias del palacio, Heewon y Hyunsung, originalmente vivían como humanos antes de dedicar sus espíritus al padre del joven dragón.

Entonces ella no entendía qué era lo que tenía tanto miedo de los humanos.

“¡Ba-BAHT!” Biyoo llamó a la otra niña, quien siguió corriendo hasta llegar a la puerta.

Y a medida que anochecía, el pequeño dragón se dio cuenta de que Hyunsung no estaba en su lugar habitual junto a la puerta. Mientras el bebé dragón miraba hacia el cielo, el crepúsculo avanzaba lentamente, lo que significa que era hora de que el hombre descansara. 

Biyoo, observó como la decidida chica llena de lágrimas abría la barra de madera de la puerta. Las letras ocultas de la madera bendita brillaron indicando la apertura de la barrera fronteriza. Los muros de piedra tarareaban en silencio su extraña canción. La humana no pareció notar el sonido de las paredes y la escritura brillante, lo que hizo que la joven se preguntara si todos sus sentidos estaban intensificados por su linaje draconiano o por el hecho de que no tiene una gota de sangre humana en su cuerpo. nublar los sentidos espirituales.

El pequeño dragón miró a su alrededor buscando a alguien que ayudara al humano, pero todos parecían haber entrado a preparar la cena y prepararse para pasar la noche. Una rutina habitual, ella nunca notó que era tan aislante a menos que estuvieras afuera.

Con poca o ninguna opción, la Dragonling saltó más allá de la frontera, su piel clara y su cabello oscuro se transformaron en escamas. Su figura se hizo más pequeña mientras caía sobre la hierba, amortiguando su cuerpo transformado. Ella no tenía extremidades como su padre ni el color que significaba el papel de un dios del agua.

Ella soltó un silbido frustrado, su forma prematura era mucho más pequeña de lo previsto, e incluso con toda su concentración, no pudo desarrollar sus alas ni convertirse en su forma humanoide. La energía espiritual al otro lado de la frontera era simplemente demasiado débil para sostener su cuerpo.

Sin otra opción, la pequeña dragoncita luchó y torpemente se deslizó siguiendo a su amiga hacia las profundidades del bosque.

                       <---------------------->

A mitad de la conversación, los ojos del Dios Dragón brillaron de rojo a dorado, indicando una perturbación en la puerta sellada. La presencia de dos seres vivos que lo atraviesan con éxito, alarmando a los muros de su rareza. Un sonido que sólo los Dragonantes escucharían, inmediatamente alarmó al Dragón y lo hizo levantarse abruptamente.