(19) Always And Forever

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Capítulo 19

Macay

Caminaba sobre el angosto camino del cementerio, hacía el grupo de personas ubicados a vários metros de mí, todo el lugar estaba siendo custodiada por guardaespaldas, estaba un poco agitada, las manos me sudaban, muchos compañeros del instituto miraban de reojo a mi acompañante, a pesar de que le insistí en que no era necesario que me acompañará, Zeus no cambió de parecer, a pesar de todo era el único al que quería  a mi lado en un momento tan agobiante para mí, y agradezco infinitamente que simplemente no se haya dejado llevar por mi insistencia, y aquí estaba él, siendo mi mejor amigo, mi dios griego tomándome de la mano dándome su apoyo.

Mi abuela, llegó para el acto en honor a su hijo, tenía el rostro hinchado y el maquillaje un poco corrido, había estado llorando, todos mis primos estaban allí junto a cada una de sus familias, algunos miraban con enojo a mi abuela y otros compartían su dolor.

Me sorprendí al ver a Stefan aquí, lo había invitado a última hora y no sabía si vendría, sonrió al verme y devolví el gesto, Zeus se alejó y fue junto a su familia.

Mi corazón se aceleró cuando estuve cerca de mi abuela, solo me estaban esperando a mí para dar inicio al acto; asentí en forma de saludo a todos y cuando el sacerdote (gran amigo de mi padre) comenzó hablar, me transporte al día en que me dieron la noticia de su muerte, casi sentí a mis padres junto a mí, sin pretenderlo Zeus se acercó a mí nuevamente y tomo mi mano volviendo me a traer de vuelta a la realidad.

Mis labios temblaban, sin pretenderlo tragué fuerte, cuando me di cuenta que estuve ahí solo una vez en la tumba de mis padres, y juro que quise salir corriendo en el momento en el que la vi.

Esto no estaba siendo fácil.

Me aferre a Zeus con fuerza cuando me atreví a leer aquellos epitafios 

Milo Blaeck

Amado hijo, padre, hermano y amigo 

Excelente líder,  vivió para amar y murió por amar.

Alexa Rampage de Blaeck 

 Amada hija, madre, hermana y amiga

Vivió luchando por el amor, murió luchando para el mismo.

Quise correr, llegar a mi casa y encerrarme en mi habitación a llorar después de leer los epitafios, esto era doloroso.

— Tu puedes Macay — susurro Zeus y me sentí mal por la fé que tenía en mí cuando por dentro me sentía rota e incapaz de estar un minuto más rodeada de tantas personas que aceptaban lo sucedido, que aprendieron a seguir adelante mientras yo seguía estancada en el pasado.

Me quedé helada cuando sentí que alguien tomaba mi otra mano, era Mack quien sin pedir permiso llegó a mí para entregarme su apoyo, para sacarme de mi mierda, así como lo hizo en el pasado; me tendió un pañuelo y solté a Zeus para tomarlo, sin notarlo estaba llorando, y si no fuera por ellos dos, quizás me habría caído.

Así como Zeus me salvó de mi mierda cuando estaba siendo acosada por la máscara, así como Mack me saco de la depresión, ahí estaba otra vez para mantenerme de pie justo en un momento donde volví a ser débil, la vieja Macay.

Mi abuela ya había dado unas palabras muy emotivas, y ya me había cedido la palabra, pero había olvidado cómo moverme, Stefan me veía con dolor y pena, pero también me sonrió en señal de apoyo, sentí el apretón de ambas manos, me animaron a dar ese paso que tanto temía.

Suspiré tratando de encontrar mi voz — No sé cómo empezar— dije fuerte, viendo las lápidas de mis padres y no a los presentes. Abrí el papel que tenía guardado en mi bolso, y después de leer lo que escribir, lo arrugue— Escribí muchas cosas, pero ahora que estoy aquí, después de mucho tiempo siento que esas palabras no son nada, — continúe y me giré para ver a las personas presentes,  Zeus me sonrió animándome — cada uno de ustedes aquí presente, lo está porque son personas cercanas e importantes en mi vida, así como también lo fueron en la vida de mis padres que hoy nos hace reunirnos, para muchos es una vez más aquí… para mí es la primera vez presente. Antes no quise hacerlo, no porque no pude sino porque no era capaz de hacerlo. 

<<Odio las despedidas, porque estás duelen, más sé que comenzar de nuevo duele aún más, y hago esto porque mis padres se lo merecen, yo me lo merezco, porque cuando alguien fallece pasan los años y creemos que lo hemos superado. Pero entonces llega algo, un olor, un sonido, un lugar, una palabra y todo regresa, entonces somos conscientes de que solo nos acostumbramos a esa falta pero nunca aprendemos a vivir sin ella. Me dispuse a vivir por ello, cuando ellos murieron quise irme con ellos, pero tiempo después me di cuenta que era algo absurdo cuando la vida me estaban dando la oportunidad de vivir por ellos, entonces decidí vivir sin ellos, a una vida llena de tristeza y dolor… por ellos, para honrar su memoria, y no ha sido fácil — Mire al cielo esperando que me estuvieran viendo en donde sea que se hayan ido — Los extraño, mamá y papá, con ustedes aprendí que después de toda tormenta sale el sol, es momento de empezar de nuevo, por eso estoy aquí, para decirles gracias, para decirles adiós, les doy las gracias por todo lo que me dieron y lo que no pudieron, por haber estado siempre para mí. Los amo, por siempre y para siempre.— Finalicé, y cuando lleve mi mirada en dirección a todos, mordí mis labios para no sollozar, encontré a muchos con lágrimas en los ojos incluido el sacerdote que escuchó atento y a Jackson que me miraba con impotencia.

Sin pretenderlo mi abuela llegó a mí y me abrazó con fuerzas intentando reconfortarme, aunque no servía para eso, sí me ayudaba a saber que no estaba sola; ya había dado el primer paso y por primera vez en mi vida quería dejar a mis padres descansar en paz, vivos en mis recuerdos, pero mirando hacia adelante e intentar ser feliz.

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⏰ Última actualización: Aug 10 ⏰

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