𝐗𝐗𝐈.

3.8K 278 242
                                    

La habitación número 12 se había visto nuevamente invadida tan pronto la última clase dió fin, se había vuelto una costumbre tener ese cuarto como lugar de encuentro, por lo que incluso los chicos que no eran dueños de ese espacio habían comenzado a dejar prendas o utensilios para el aseo personal ahí en caso de necesitarlos.

Habían seis chicos sentados en la cama de Jake, cinco de ellos tenían una enorme sonrisa en los labios y conversaban animadamente con Sunoo, esperando a que Heeseung terminara su ducha para poder estar todos juntos y hacer algo divertido. O eso creía el pelirrosa.

El plan de los chicos era otro, pues Jake había notado algo que quizá era mínimo y un poco tonto, pero sabía que Sunoo era un adolescente al igual que ellos, por lo que sus hormonas y deseo sexual eran evidentes. Y se percató de lo ansioso y feliz que se veía cuando Sunghoon y Heeseung se habían quitado las camisas en el salón vacío. Podrían usar eso a su favor al menos una vez.

Era simple, habían hablado de ello en algún momento de la última clase donde Sunoo había ido a charlar con el profesor sobre una duda que tenía respecto a unos ejercicios matemáticos. Uno de ellos encendería la calefacción de la habitación, lo que les daría la excusa perfecta para quitarse la ropa y pasearse semidesnudos alrededor del pelirrosa. Con un poco de suerte lograrían obtener una reacción suya.

- Mira, mi caligrafía ha mejorado un montón. -presumió Ni-Ki, quien mostraba su cuaderno a Sunoo.

No era cierto, pero al menos la atención del pelirrosa estaba en las hojas llenas de trazos ilegibles e intentaba comprender qué decía para no hacer sentir mal al japonés, lo que permitió a Jungwon encender la calefacción de forma muy disimulada y silenciosa.

El calor comenzó a notarse poco a poco en el cuarto.

Luego de alrededor de cinco minutos la temperatura en la habitación se había elevado lo suficiente para tener a los presentes sudando incómodos. Jake fue el primero en despojarse de su pijama, quedando sólo en bóxer, le siguió Jungwon y Jay, Ni-Ki y Sunghoon habían optado por sólo quitarse las camisetas.

La mirada de Sunoo cayó inevitablemente en los chicos sentados a su lado y alrededor, el abdomen tonificado de cada uno de ellos le tenía tragando saliva con dificultad, era difícil desviar la mirada hacia otro lado, pues el rastro de sudor que dejaba un brillo en la piel de sus amigos le provocaba imaginar situaciones indebidas. Era demasiado.

Sin embargo, el calor comenzó a afectarle también, se sentía asfixiado por sus propias prendas, lo que le llevó a despojarse de toda su ropa, a excepción de sus lindas bragas rosadas. Suspiró aliviado luego de eso, pues el calor ya no se sentía tan sofocante de ese modo.

- Lo siento, estaba secando mi cabello. -la voz de Heeseung sólo atrajo la atención de Sunoo.- Qué calor hace aquí, creo que sólo me quedaré así.

El peliazul señaló la toalla que rodeaba su cadera, una tela bastante corta y delgada que parecía estar húmeda aún. Las mejillas gorditas de Sunoo siendo cubiertas por un sonrojo delataron su estado actual, sentía revoloteos en su estómago, pero no podía apartar la mirada del bulto que se marcaba contra la tela de aquella toalla.

Era un adolescente gay en una habitación con seis hombres semidesnudos, alucinante.

- ¿Qué haremos esta noche? -preguntó Heeseung, sentándose en la cama de Sunoo al no encontrar un espacio libre en la de Jake.

- Podríamos ver películas, no tengo ganas de hacer mucho. -respondió Sunghoon.

Por su parte, el pelirrosa no podía siquiera formular una respuesta o unirse a la conversación que ahora llevaban a cabo sus amigos. Y es que el peliazul había decidido sentarse en la cama de en frente con sus piernas ligeramente abiertas, lo suficiente para dejar ver lo que había bajo la toalla. El pene de Heeseung se exhibía sin vergüenza ante los curiosos ojos de Sunoo.

童女ᅠ:⠀   𝗪𝗘 𝗡𝗘𝗘𝗗 𝗔 𝗚𝗜𝗥𝗟?   %    ( SUNOOHAREM )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora