𝐗𝐗.

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Heeseung y Jake hablaban tranquilamente sentados sobre la cama del segundo, se habían unido a ellos Sunghoon y Jay, pues habían despertado más temprano de lo habitual por lo incómodo de dormir en el suelo.

- ¿Conocían al tipo de ayer? -preguntó de forma repentina Sunghoon, se veía molesto al recordar al chico que había tocado a Sunoo.

- Yo no, no lo he visto en el internado antes. -comentó Heeseung.- Se veía un tanto mayor, ¿no creen?

- Quizá sea alguien del otro internado. -agregó ahora Jay.- Un profesor o algún trabajador de ahí.

Bufaron casi al mismo tiempo, era desagradable imaginar que un profesor quisiera pasarse de listo con un menor, además de que había tocado a su objetivo en frente de todos, sin vergüenza alguna. Se preguntaban si alguien hubiera ayudado en una situación así, ya que nadie fue capaz de intervenir al menos hasta que ellos lo hicieron. Era inquietante lo desprotegido que parecía estar Sunoo sin ellos.

Sin embargo, a ninguno le molestaba cuidarlo, se estaba volviendo prácticamente un deporte entretenido para ellos. Pero eso les advertía también que desde ese momento en serio debían estar siempre cerca del pelirrosa, sin importar qué.

Aunque aún no comprendían por qué Sunoo se había alejado unos días, no querían hacer más preguntas al respecto, no luego de haberse confesado ayer y de haber podido besarle. Todo estaba resuelto con eso.

- ¿Por qué no se callan? -se quejó Ni-Ki, quien había despertado por el molesto sonido de la conversación que llevaban a cabo sus amigos.

A su lado comenzó a moverse Jungwon, tallándose los ojos con ambas manos en su intento por quitar toda la pereza de su sistema. Ahora estaban los seis despiertos y se miraban con el ceño fruncido, principalmente por el comentario del rubio.

- Estábamos hablando bajo. -se defendió Jay, señalando con el dedo al chico japonés que se había levantado del suelo para irse a sentar a la cama de Jake también.

Se les unió Jungwon segundos después, sosteniendo una almohada para tenerla abrazada y así estar más cómodo. Su cabeza aún caía ligeramente hacia un lado en su intento por no quedarse dormido nuevamente.

- Es hermoso. -murmuró Sunghoon, su vista estaba enfocada en el pelirrosa que aún dormía plácidamente en la cama delante de ellos.

- Mierda, sí, demasiado. -le siguió Heeseung, todo su foco estaba alrededor de aquel precioso rostro relajado.

Los presentes asintieron con la cabeza casi al instante, claro que todos estaban de acuerdo con ese comentario. Había que ser ciego para creer que había algo feo o malo en Sunoo, y aunque era aterrador para un grupo de chicos heterosexuales admitirlo, el pelirrosa era precioso.

Y sabían que más personas podrían notarlo, se volvieron conscientes de ese hecho a causa de lo ocurrido con Bangchan, la carta de Yeonjun y el ataque de aquel hombre hacia Sunoo el día anterior. Incluso al principio muchos se vieron interesados en el pelirrosa y por eso murmuraban cosas a sus espaldas, pero todo había cesado desde el momento en que Sunghoon y Jay golpearon a Bangchan.

- No podemos dejarlo ir, menos con Yeonjun merodeando a su alrededor. -señaló Jungwon, quien aún dormitada en su lugar.

Nadie más habló luego de eso, no porque no quisieran aportar en el tema, sino porque el objeto de la conversación se estaba moviendo inquieto bajo las sábanas. Aquellas largas pestañas se batieron con rapidez buscando acostumbrarse a la luz que entraba por la ventana de la habitación, y el par de ojos almendrados se fijó en los seis chicos que le veían atentamente desde la cama de Jake.

Se sintió abrumado y avergonzado, pero cuando el cansancio se fue de su cuerpo y ya tuvo la lucidez necesaria en él, recordó que estaba llevando a cabo un plan importante y sentir vergüenza no era parte de éste. Así que estiró sus extremidades mientras se deslizaba fuera de las sábanas, exhibiendo su cuerpo totalmente desnudo.

童女ᅠ:⠀   𝗪𝗘 𝗡𝗘𝗘𝗗 𝗔 𝗚𝗜𝗥𝗟?   %    ( SUNOOHAREM )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora