𝐗𝐗𝐕.

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- Esto no va a funcionar.

Los siete chicos miraban con decepción el tamaño reducido de la ducha, no habían pensado en el hecho de que debían entrar todos en ese lugar tan estrecho. Era imposible.

- Debimos pensar en otra cosa, tardaremos mucho y aún nos queda otra clase. -razonó Jake.- Este receso sólo dura una hora.

- Quizá podamos bañarnos en duplas o algo así. -propuso un muy ruborizado Sunoo.

- Si es contigo, claro. -añadió Heeseung.- Si es con otro, no.

Todos suspiraron al unísono, se notaban frustrados y al menos los otros cinco muchachos tenían la misma exigencia que Heeseung.

Finalmente y dado el poco tiempo que tendrían para decidir y bañarse, optaron por jugar a: piedra, papel o tijeras. De ese modo, a medida que uno iba perdiendo, se unía al siguiente perdedor para la ducha. Los últimos tres que quedaron debían compartir la ducha entre ellos, considerando el número impar del grupo.

Los primeros en perder fueron Jake y Ni-Ki, les siguieron Jay y Sunghoon, por lo que el único grupo conformado por tres fue el de Sunoo, Heeseung y Jungwon. Había un azabache que vió con desaprobación a ese trío, retirándose a paso furioso hacia la habitación. Los demás salieron segundos después para dar privacidad a Jake y Ni-Ki.

El pelicastaño y el rubio estuvieron al menos cinco minutos en la ducha, desde afuera sólo se podían oír risas por parte de aquel par y uno que otro insulto o queja. Eran como dos niños peleando. Salieron del baño con sólo un par de toallas cubriendo su desnudez, Jake aún tenía un poco de jabón en el pecho y Ni-Ki todavía tenía un rastro de suciedad en el mentón, sólo podían concluir que se habían duchado con los ojos cerrados.

Siguieron Jay y Sunghoon, lo único que se podía escuchar era silencio absoluto, sólo el agua corriendo generaba una especie de eco. Salieron también luego de unos minutos, al menos ellos sí lucían correctamente aseados, pero el azabache de gran estatura seguía viendo con recelo a los dos entusiasmados chicos que esperaban por su turno junto a Sunoo.

- Recuerden que Sunoo no se siente bien. -dijo Sunghoon de pronto.- Así que no lo molesten.

- Y no tarden tanto, tengo que darle su masaje a Sunoo. -se unió Jay.

El pelirrosa asintió con timidez, pero Jungwon y Heeseung ignoraron totalmente las palabras de sus amigos, guiando casi con desesperación a Sunoo al interior del cuarto de baño. Fueron recibidos por el vapor y humedad, obligándoles a quitarse la ropa de inmediato para no arruinarla.

- ¿Qué pasa? Quítate la playera también. -pidió el peliazul a un evidentemente nervioso Sunoo.- No puedes bañarte con ropa.

El pelirrosa suspiró armándose de valor antes de despojarse de esa última prenda, la dejó junto a la ropa de sus amigos y caminó hacia la ducha, quería terminar pronto con eso. Sabía que se vería agobiado por algún interrogatorio, o en su defecto tendría que luchar contra sus propios impulsos para no sucumbir al deseo de ser follado.

En segundos estuvo rodeado por Heeseung y Jungwon, el peliazul se había ganado justo frente suyo y el castaño se había situado atrás, podía sentir la respiración del chico de ojos gatunos chocando contra su cuello. Sin embargo, lo que le tenía más tenso era la mirada curiosa del peliazul enfocada en algún punto en su cuerpo.

- Tienes una mordida aquí. -Heeseung señaló el hombro de Sunoo tras decir eso.- Y en tu cintura también se marca algo inusual, qué interesante, asumo que no te caíste, ¿cierto?

El interrogatorio del alto puso tensos al par de muchachos que se sintieron aludidos con esa acusación, Sunoo sólo desvió la mirada y cerró los ojos, confesarlo a Sunghoon ya había sido bastante difícil y arriesgado, decírselo a Heeseung parecía ser una misión imposible, era el más impulsivo de los chicos. ¿Y si golpeaba a Jungwon?

童女ᅠ:⠀   𝗪𝗘 𝗡𝗘𝗘𝗗 𝗔 𝗚𝗜𝗥𝗟?   %    ( SUNOOHAREM )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora