童女ᅠ:⠀ 𝗪𝗘 𝗡𝗘𝗘𝗗 𝗔 𝗚𝗜𝗥𝗟? % ( SUNOOHAREM )

𝐗𝐗𝐈𝐕.

- ¿Por qué estás usando el uniforme deportivo? Hace frío y no nos toca Educación Física hoy. -observó Ni-Ki, haciendo un gesto a Sunoo y Jungwon que ingresaban al aula.

Se veían sospechosos.

Sunoo demasiado nervioso y Jungwon demasiado feliz.

Raro.

- Es cierto, ¿por qué usas short? -se unió Sunghoon.

Quizá lo más raro era ver al pelirrosa caminando a paso lento hacia su pupitre, parecía tener alguna especie de dolor. Eso fue suficiente para alertar a todos.

- ¿Te pasó algo? ¿Alguien te estuvo molestando? -agregó Jay, levantándose de su lugar con gesto agresivo.- ¿Alguien te golpeó? ¿Fue Minho?

Sunoo fue rápido al negar con la cabeza tras esa pregunta, pues los cinco muchachos que le observaban preocupados habían hecho el ademán de levantarse de sus lugares a causa de esa errada suposición. Probablemente buscarían al culpable.

- Hizo un mal estirón al recoger flores con Lee, por lo que se cayó y ensució su pantalón. -mintió Jungwon, acudiendo al rescate de un nervioso pelirrosa.- Ah, y su espalda duele por eso.

- Ese maldito. -refunfuñó Heeseung.- Bueno, supongo que todos necesitamos un baño caliente, mis huesos duelen.

La conversación terminó con algún gesto aleatorio por parte de cada chico, cinco de ellos lucían bastante golpeados, por lo que la idea de un baño caliente sonaba prometedora. Sin embargo, Sunoo estaba lejos de querer convivir con sus amigos en esos momentos, o incluso después, pues todo su cuerpo parecía estar "entusiasmado" aún y estaba seguro que ante la mínima provocación cedería a tener sexo.

Porque sí, había descubierto que el sexo real se sentía grandioso. Quería más.

Fue capaz de ignorar la urgencia que recorría su cuerpo, por lo que tras disimular una mueca de dolor al sentarse simplemente guardó silencio, manteniéndose enfocado en las clases que dieron inicio minutos después. Ignoró la mirada inquieta de Jake e incluso el toque que éste dió a su muslo en su intento por llamar su atención.

Debía ser fuerte.

- Seguiré diciendo que te ves muy lindo con esa ropa. -dijo Jake entre murmullos, parecía querer la atención de Sunoo a toda costa.

Razón por la que el toque que brindaba a ese muslo lechoso y suave no se detenía, su pulgar comenzó a delinear la piel con delicadeza, deteniéndose cerca del borde del pequeño pantaloncillo. Fue interrumpido por la delicada mano del pelirrosa, quien le sostuvo con sólo un poco de fuerza para evitar que siga tocando más arriba.

Sin embargo, el castaño no planeaba parar, insistió con su toque disimulado y subió un poco más su mano, sólo un poco más, lo suficiente para rozar brevemente sus dedos contra la entrepierna de Sunoo. No creyó que eso arrancaría en el pelirrosa un bullicioso gemido que atrajo la atención de todo el salón de clases, incluso el profesor había detenido su monólogo y ahora miraba con el ceño fruncido en dirección a aquel par.

El rostro de Sunoo se veía completamente rojo ahora, era lo más vergonzoso que podía haberle ocurrido, pero no pudo evitar sentir un poco de molestia y cosquilleo con ese ligero toque, su vagina estaba sensible y dolorida. Quería enterrarse bajo tierra.

Tosió disimulado cuando notó que nadie apartaba la atención de él, incluso Jake; el causante de ese desastre, le miraba confundido. No iba a ser de gran ayuda.

Lo regañaría más tarde.

- Lo siento, me siento un poco resfriado. -se excusó Sunoo, dirigiendo sus palabras al profesor.- Y mi cabeza duele demasiado.