Capítulo 10

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Correteaba de un lado a otro 

Stolas no tardó en contestar así que partirían hoy mismo, cuando antes mejor

—Deja de correr maldita sea, me estás dando dolor de cabeza— refunfuñó Husk

—Lo siento, estoy muy nerviosa— confesó, siendo atrapada por Ángel antes de caerse de bruces al saltarse unos cuantos escalones 

—No te preocupes, seguro que le caes genial al pajarito— la dejó en el suelo y recolocó su pelo— recuerda que me tienes que ir informando de TODO, ¡Ojalá poder salir de aquí y acompañarte!

—Tú lo que quieres es follarte a algún diablillo fuera de este anillo

—Ais, ¿Celoso querido?

Charlie los ignoró. No dejaba de pensar en como sería el príncipe, en como le debía hablar, en cómo debía presentarse... Alastor le había aconsejado que mostrara su forma de demonio para verse más imponente, pero ella no era así

Y no quería dar una imagen errónea, menos jugar así cuando la situación era tan urgente

—Es la hora— dijo Alastor apareciendo de la nada. Miraba su reloj de bolsillo con calma, dándole el brazo para irse ya

Charlie suspiró

—Cuidad bien del hotel, avisadme de si habéis redimido a alguien y portaos bien

—Si mamá— Ángel le sacó la lengua. Sabía tanto como Husk que lo iba a hacer genial, pero no podía evitar que le causara mucha ternura verla hecha un flan

Por otro lado, Husk puso sus ojos sobre Alastor. Unas horas antes le había dicho que la cuidara bien, y aunque sabía que no serviría de nada, esperaba que el demonio no hiciera de las suyas

Charlie se concentró. Pronto sintió el calor a su alrededor, apareciendo en un abrir y cerrar de ojos en el ascensor de los círculos

—Increíble habilidad madam, aunque debo confesar que no estaba seguro de que funcionaría

Lo ignoró, estaba completamente asombrada con el ascensor. Las diferentes subespecies de demonios iban de un lado a otro, ¡Era increíble! Algunos la miraron con extrañeza, otros pasaron de ella y algún que otro diablillo la empujó al pasar

Era inmenso, poderoso, era, era...

—¡Esto es precioso!— no podía creer que nunca lo hubiera visto, que su padre no le hubiera hablado de un lugar tan bonito

Aunque cuando se fijó un poco más, pudo observar que, aunque la decoración chillaba el nombre de su padre, tenía toques de su madre por todas partes 

¿Acaso este era uno de los tantos regalos de su padre a su madre?

Una mujer habló por megafonía

—Es nuestro destino my dear, no se entretenga— dijo y Charlie corrió hacia él como una niña pequeña, tomándolo tan fuerte del brazo que casi lo tumba

Estaba emocionada, daba saltitos y tenía los ojos tan abiertos que asustaba a algún que otro niño. 

No tardaron en llegar. El cielo rojo como la sangre les dio la bienvenida, al igual que un carruaje morado con su chófer

Alastor la miraba con curiosidad, sobre todo al darse cuenta de que no estaba muy familiarizada con ese tipo de vehículo. 

Él pegaba mucho más allí que ella; era elegante y amenazante. 

Suspiró, se sentía muy pequeña

—No se desanime querida— colocó sus manos en sus mejillas y las apretó con fuerza— y recuerde, una buena sonrisa siempre dará una buena impresión

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⏰ Última actualización: May 02 ⏰

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