Consentido...???

diesinueve

Extra inocencia

Wangji llegó del colegio con una pintura de besito en el cachete izquierdo, su mamita Zhan le puso un protector en su mejilla para que no se le borrara al menos hasta la hora de la cena pues quería que su papi Yibo la viera también, sus hermanos envidiosos trataron de borrarla, Jingyi alegaba que ese niño era un atrevido al marcar a su hermano como un ganado cuando lo marcan con el fierro, Xichen decía que era demaciado vulgar para que su presioso hermano menor trajera ese chupeton de vampiro rosa en su linda y abultada mejilla.

Pero para el que era un niño serio y comprometido sabía que era la marca del amor, si señores el pequeño Wang Wangji había conocido a su primer amor, quizás el único para toda su vida, ese día en el jardín de infancia a los cuatro años de edad en el salón de las orugas del colegio Gusu para jóvenes infantes, un nuevo alumno entró al salón.

Era un pequeño torbellino de ojos plateados,sonrisa arrasadora, cabello rebelde y un poco más bajito que todos los niños del salón, donde el joven Wangji trillizo menor del matrimonio Wang Xiao tomaba sus lecciones de preescolar, fue sentado en una mesa al lado de el, pero el doncelito Wei Ying de inmediato se acerco a la estación de Wangji, alegando que se sentia sólito ahí, que le daba miedo, que era el nuevo del salón y que estar cerca le quitaba todos esos temores.

Las maestras al principio estaban preocupadas que el joven Wang rechazara a su compañero,  lo habían visto hacerlo en varias ocasiones con otros niños que trataron de acercarse, el chico Wang era sumamente huraño con el acercamiento, muy distinto a sus hermanos mayores( solo por unos minutos de diferencia).

Xichen era el mayor de los tres, carismático sonriente y acomedido, todo un sol brillante, jingyi era parlanchin, travieso y sociable, las maestras lo adoraban por su picardia, pero el tercero de los niños Wang era callado, diligente y reacio a la interacción social, todo un témpano de hielo, así que verlo dejar que el chico nuevo tomara sus colores, pintara su cuaderno y lo dejara tocarlo era un espectáculo que no creyeron ver en su vida.

Al llegar la hora de la despedida, Wei Ying saco de su bolsillo un pintalabios rosa bebé, de mojo los labios con el y lo estampó en la delicada, inmaculada y virginal mejilla del niño Wang, ni su mamita que era tan besucon, había mojado su cachete con pintalabios, sabía que al bebé Wangji no le gustaba que lo babearan, las maestras se horrorizaron, apenas iban a rescatar al atrevido doncelito, de la ira del joven Wangji, cuando vieron algo más sorprendente de lo que ya habían visto durante toda la mañana....

Ahora eres mi novio, exclamó el pequeño Wei Ying,  no puedes dejar que nadie que no sea yo, te de besitos, grito triunfante el niño mientras apuntaba con su dedito al chico Wang,  jijiiii dime que estas de acuerdo replicaba el doncel al ver que el otro no le respondia nada....

Mmm somos novios..

Hohooooooooooo dioooooss eso es una sonrisaaaa, diablos que belllooooo decían las niñas y donceles del salón, que intentado en otras ocasiones acercarse al niño, satisfecho con su obra Wei Ying salió del salón, para arrojarse a los brazos de su papá Chanze, que fue el encargado de recogerlo del colegio, en su primer día de escuela.

Así con esos recuerdos de ese maravilloso día, Wangji llegó a su casa brazos de su mamita Zhan, las asistentes le ayudaron a cambiarse para tomar el almuerzo, todas querían preguntar, pero no tenían el valor de hacerlo, pues el joven amo Wangji era sumamente serio en ese aspecto, nada que ver con el boca suelta de Jingyi o el risueño Xichen.

Mientras Wangji era atendido por las asistentes, Zhan no aguanto más la ansiedad y le exigió a su marido que hoy dejara botado el trabajo, pues su pequeño hielito esculpido tenía prioridad, Yibo no pudo negarse a una petición de su amado esposo,( Wang Yibo más vale que traigas tu gordo tracero de regreso a casa a menos que quieras pasar el resto de la semana sin meter tu pene en mi coño) santo diooosss a donde había quedado su lindo, inocente y delicado esposo.

En fin daba igual, de todas maneras el quería dejar esa fusión con esa empresa multinacional en espera, los millones que estaban en puerta, eran nada a comparación de una reunión con sus hijos y esposo, antes que sus hijos llegarán al comedor ese día , Yibo estaba entrando a su casa, veía todo normal. Xichen llevaba de la mano a su esposo, Jingyi bueno el siempre era el, pero al fijar su mirada en su más pequeño vástago entendió la ansiedad de su esposo, su Wangji tenía una picadura rosa en su regordeta mejilla......