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Los Wen llegaron a china con el docnel Xue que cargaba protectoramente a su recién nacido bebé, era prematuro pero saludable, solo al poner un pie en el país, los subordinados del doncel le calleron como lluvia ácida a los contrincantes, de repente Wen Chao estaba rogando por su vida, ruego que no llego ni a las alturas por que después de divertirse un poco con el le dieron el tiro se gracia.
Ya en su guarida Yang planifico con sus asistentes el contraataque, esos malditos Wen pagarían hasta la última gota de sangre que drenado de el padre de su bebé, ese bebé que fue tan deseado y que ahora solo respiraba por que su padre se sacrifico para que a ellos nos les pasara nada.
En la mansión Wang, los sirvientes ayudaban a su jefe con su bombom de crema, que diablos le hacia ese malparido hombre a ese pobre, delicado e inocente doncel que cada que intimaban lo dejaba como una jirafa recién nacida, es que no le tenia compasión, afortunadamente sus empleados lo tenían más mimado que en su antiguo hogar.
Yibo agradecía que su personal cuidara tanto del doncel, incluso algunas sirvientes lo veian feo, después de salir de la recamara con un aura feliz, por haberse comido esa tuna, se sintió feliz de que los empleados estubieran enojados con el por abusar de su delicada flor.
Esos días fueron pacíficos al menos para los Wang, Zhan no asistió a la universidad pues su cuerpo aún no se recuperaba de la embestida del toro Wang, Yibo iba diligentemente a su trabajo, además de coordinar con sus suegros la vigilancia hacia su casa, pues sabía que algo se estaba planeando en su contra.
Los Wen estaban moviendo ficha para acercarse a su familia y el estaria preparado esta ves no lo tomarían con la guardia baja, Lele y sus muchachos estaban listos para ahora si contener cualquier ataque que esos perros Wen o otro pudiera dar de ahora en adelante.
Rouhan estaba más que confiado que sus hijos le llevarían la victoria, no tenía noticias de Chao, pero eso no era raro, su hijo menor era tan vago que seguramente antes de llevarle ante el, al vándalo que le incumplió con el pedido, estaría por algún tugurio haciendo lo que mejor sabe hacer, coger como un perro caliente.
Unos días después Wen Rouhan estaba un poco preocupado, su hijo menor solía ser un vago eso no le quedaba duda, le dio unos días para presentarse en su presencia pero esto ya no era normal, pasar tantos días sin ir a dar la cara, así que llamo a sus hijos y sobrinos para que inciaran una búsqueda, su hijo debía aparecer a como diera lugar y en cuanto lo encontratan le rompería cada uno de los huesos por hacerlo preocupar.
Reunidos en casa del Wen mayor ,Xu el hijo mayor del hombre, Ning y Quing únicos sobrevivientes de la familia secundaria de la familia Wen y Nie Hausiang esposo doncel de desaparecido Wen Chao, estaban listos para saber que era lo que su líder tenía para hablar con ellos pues todos estaban más que ocupados tratando de obtener al doncel Wang por cualquier medio.
