Eren Jaeger | One Shots

¡Dame un hijo!

T/N esperaba a su esposo Eren como siempre, esa era su rutina diaria. El es un abogado que forma parte de uno de los buffet de abogados más prestigiosos, por lo que siempre esta hasta el cuello de trabajo, llegando cansado y todavía con trabajo para hacer en la oficina. Por lo tanto casi siempre está sola en casa, y siempre lo espera con una buena cena hecha y bastante cachonda, él está tan estresado que no nota la desesperación del libido de su esposa y tampoco el suyo.

Siento la puerta abrirse, e inmediatamente voy hasta la entrada para recibir a Eren con un cálido abrazo y un beso fogoso, el se aparta y deja sus cosas en el perchero.
—¿Qué tal tu día amor? La cena ya está lista, hice lasaña.—dije en un tono amoroso.
—Ocupado como siempre, no cenaré, tengo que terminar de revisar unos archivos, ten linda noche cariño.—dijo él en un tono cansado, agarró su portafolios y se dirigió hasta su estudio.

No reclamo por su indiferencia y mejor decido cenar ya. Desde hace tres meses el buffett tomo un caso muy pesado, por lo tanto el ha estado muy cansado y estresado, si bien me gustaría pasar más tiempo con él, no puedo quejarme, gracias a su trabajo tenemos este estilo de vida. He estado pensando en tener un hijo, ya llevamos dos años de casados, pero por su trabajo el está muy estresado para pensar en el tema. Doy un último bocado de la lasaña, me levanto y aseo la vajilla.

Voy hasta nuestro dormitorio, me tumbo en la cama y pienso en lo aburrido que han sido los últimos meses. Estoy tan cachonda, hace tres meses que no hacemos nada, cada que el vuelve a la casa tengo la esperanza de que cenemos juntos y luego me folle hasta que haya eyaculado dentro mío unas veinte veces por lo menos, pero no lo hace, porque siempre tiene papeles que revisar, y cuando termina está tan cansado que ni siquiera me mira.

Quizás hoy pueda ser esa noche, un buen polvo lo relajaría, tengo que seducirlo.

Me levanto de la cama y rápidamente y voy hasta mí armario para sacar del cajón un hermoso babydoll transparente perfecto para la ocasión, lo dejo en la cama, entro al baño, abro el agua caliente de la ducha solo para mojarme el cuerpo, agarró una afeitadora y me depilo cuidadosamente el monte de Venus, me terminó de duchar,y salgo del baño, voy hasta mí tocador cojo una crema de cereza y me la aplicó por todo el cuerpo, me aseguro de estar bien seca y me pongo el babydoll, una fragancia como las de Carolina Herrera no vendría mal, así que me aplicó un good girl que Eren me regaló para mí cumpleaños. Ya lista salgo de la habitación y voy hasta el estudio de Eren.

Me paro en la puerta, ya que esta entre abierta y lo veo revisando unas carpetas mientras escribe algo, sin esperar más abro la puerta entrando en la habitación. Él se da cuenta pero sigue concentrado con la cabeza gacha, me acerco hasta él y me pongo detrás suyo, empiezo a masajear su cuello suavemente.

–Estas muy estresado amor, relajate un poco.–le digo en un tono sensual, este reacciona por mí caricia y se pone aún más tenso.– Con tanto trabajo no tengo como.– dice este para seguir con su trabajo, aparto mis manos de él para girar su silla haciendo que esté quede frente mío. Me mira por primera vez, recorre mí cuerpo con su mirada de arriba a abajo, notando que no traigo nada más a excepción de ese diminuto babydoll, se relame los labios. Acabo con el poco espacio que hay entre nosotros, el me agarra de la cintura con ambas manos.

–Yo sé cómo quitarte el estrés  cariño.
– Linda me encantaría pero tengo...– el trato de oponerse pero lo interrumpo empezando a acariciar su miembro por encima del pantalón.–Shh cállate y disfruta.– me arrodillo frente a él teniendo su paquete a solo centímetros de mí cara, desabrocho el pantalón y saco su gorda polla la cual se va poniendo más dura por segundo, empiezo a masturbarlo mientras lamo la puntita de su miembro.

Una vez ya está completamente dura, la meto por completo en mí boca, la chupo lentamente al principio saboreandola provocando que el gima sonoramente, después de unos segundos aceleró el ritmo mientras acarició sus testículos. Bajo más mí cabeza tragando su polla hasta el fondo de mí garganta, podría morir atragantada con su verga y sería la mejor muerte.

La saco de mí boca para tomar aire y lo miro a los ojos, él me mira con lujuria, está vez él me toma del cabello y hace que vuelva a tragar su verga, me hace una coleta con su mano, moviendo de arriba a abajo mí cabeza contra su polla. Siento como se contrae para correrse en mí boca, haciéndome tragar su leche.

Levanto mí cabeza y un hilo de su semen se escapa por mis labios, el me limpia con su dedo y me atrae para besarme fogosamente, me aparto del beso y lo miro. –Espero que se te haya quitado el estrés amor~.– le digo a lo que él me vuelve a  besar y agarra mí culo fuertemente. –Todavia tengo que follarte cariño.– me respondió, sentí la emoción inmediatamente crecer en mí pecho, después de meses tendría la polla de mí hombre perforandome de vuelta.

El se levanta de su silla y me agarra de la cintura para ponerme sobre el escritorio, tira todas las cosas que están en este para poder acomodarme mejor. Empieza a besar mí cuello, mientras va bajando los tirantes de mí camisón y tocando mis pechos, gimo al sentir sus besos hambrientos bajando desesperadamente por mí cuerpo.–Sabes a cereza y hueles tan bien.– dice mientras besa mis pechos y muerde mis pezones, suelto un gemido ahogado por esto, con sus manos abre mis piernas, pasa sus dedos por toda mí raja causandome escalofríos.

–Estas tan mojada, tan lista para recibir mí verga.– dice a la vez que mete dos de sus largos dedos en mí coño, me acuesta sobre su escritorio, y empieza a chupar mis tetas a la vez que da estocadas rápidas con sus dedos hasta que llegó al orgasmo, estremeciendo me del placer.

Saca sus dedos de mí agujero, ahora que ya estoy bien lubricada mete lentamente su polla, mí coño se estira a medida que se va adentrando en mí, suelto un gran gemido cuando él me lo mete por completo, Eren  no se queda atrás, y gruñe fuertemente por la sensación. Empieza a dar estocadas rápidas y profundas haciendo que sus bolas resuenen contra mí piel.

Él va aumentando  la velocidad cada vez más, haciéndome gritar del placer.–Papi si que rico ¡Dame un hijo!– al escuchar mis palabras, Eren adopta una expresión fugaz de sorpresa, empieza a estimular mí clítoris con sus dedos, haciéndome gemir sin control fuertemente. Agarra mis piernas, sin salirse de mí, me da la vuelta dejándome de cara contra el escritorio, suelta mis piernas y sujeta mis manos detrás de mí espalda, me coje fuertemente, en un vaivén rápido, en esta posición su polla golpea directamente mí punto G.

– Te gusta así? Te gusta como perforó tu coño con mí polla.–dice él en un tono lascivo, acelera el movimiento de sus dedos en mí clítoris, y también sus embestidas son más toscas y fuertes, empiezo a contraerme sintiendo el placer estallando desde mí coño en un squirt, mojando todo su escritorio y empapando la verga y mano de Eren con mis jugos, siento su miembro hincharse corriendo se dentro mío, el gime explendorosamente al venirse, su semen caliente, llena rápidamente toda mí vagina.

Sale de mí y suspira cansado, una capa de sudor cubre su piel y su pulso es acelerado, me doy la vuelta para poder mirarlo, él me mira notando el desastre que hicimos en su escritorio, mis jugos y su semen gotean de mí coño cayendo en este.

El me toma de la cintura y me besa. –Te extrañe mucho linda, hace unos minutos tu dijiste ¿De verdad quieres que te dé un hijo?– pregunto él, esperando expectante mí respuesta.–Me encantaría, y creo que por esto si que lo tendré.