Entre libros y una Cama

Sin nadie

Yo estaba allí simplemente mirándolas, viendo cómo tenían el valor para recibir cualquiera mi respectiva decisión.

_ yo no soy un premio que se pueden rifar y que ahora llegan aquí para que simplemente elija quien va a ser la feliz ganadora. Olivia (llamo su atención) tu me mentiste jugaste conmigo, eres casada, no voy a ser tu premio de consolación cada que discutas con tu esposo o peor que te desquites conmigo. Fernanda, me has hecho muy feliz, pero eres tan libre que siento que en cualquier momento me puedes dejar por alguien mejor que yo, no sé si es la adrenalina por competir con tu amiga, pero de verdad Fernanda no puedo estar contigo y la conclusión es que con ninguna de las dos, ahora sí me permiten quiero que se vayan de mi trabajo tengo que trabajar.

Ellas se van y yo me echo a llorar, por suerte mi gran amigo ha visto a estás dos mujeres juntas entrar, sabía que en nada bueno terminaría para mí.

F: tranquila mi corazón, llora lo que necesites y luego para culo porque la espera de clientes es interesante.

Yo empiezo a secar mis lágrimas.

F: ten mucho cuidado no te limpies tus mocos en mi.

_ tranquilo solo te eche un poco

F: wacala estúpida mi vestuario. Dice mientras mira con asco burlesco.
Ven para acá perra secate esas lágrimas y a mover el culo (me da una palmada en la nalga)

_auch oye

F: luego nos ponemos al día, me tengo que ir, besos preciosa.

Francis siempre está cada vez que lo necesito, es muy buen amigo.

Solo me meto en la cabeza, mi carrera no se paga sola mientras este señor ya canoso toca mis piernas, ya falta poco, de verdad ya falta poco, él me pide que me quite el antifaz, desea ver mi rostro.

X: déjame ver ese rostro que me hace muy feliz en estos momentos, vamos no seas mala déjame verte.

_ no señorito, ahora me hace el favor y disfrute del baile que ensaye con mucho amor para usted, el hombre se acomoda en el sofá y solo se dedica a verme con el morbo que un hombre lo haría.

Siguiente día

No sé que horas del mundo son pero lo que sé es que descansé de maravilla, al despertar veo a Francis entrar con una bolsa en sus manos.

F: justo a tiempo, traje pollo. ( levanta su bolsa)

_ deja me organizo un poco y vuelvo.

El día se hace ameno con Francis ya nos estamos preparando para ir al bar  a trabajar las horas pasaron volando y el timbre de mi puerta suena.

X: buenas tardes, señorita Marilyn le mandaron esto, por favor me firma aquí (extiende la planilla de recibido)

_  ¿quién manda?

X: en la nota lo sabrá.

El hombre se marcha dejando un ramo de flores en mis manos con una nota:

No me importa tu respuesta, no descansaré hasta que seas lo primero que vea al levantarme y lo último al acostarme...

¿Quien cree que sea? Hola mis amores disculpen por lo desaparecida.