Champagne problems | Taylor Swift

i only have eyes for you

OMNISCIENTE

[FINALES FEBRERO 2015]

Beatrix aún seguía preparándose para su cita con Taylor. Desde temprano, Logan había puesto en marcha un itinerario muy específico para su encuentro con la cantante. Tenía programadas incluso sus idas al baño, algo que, según ella, rayaba en lo ridículo. Parecía que el que iba a salir con Taylor era él.

—Solo imagínalo, Bumblebee. Yo siendo cuñado de Taylor. Cuando mis hijos entren a la universidad, podré decir que Taylor Swift es su tía. ¿No es eso increíble?— dijo Logan, su entusiasmo desbordante.

Beatrix levantó una ceja, mirándolo con escepticismo.

—¿Debo preocuparme por tu nada normal emoción?

Logan se llevó una mano al pecho, fingiendo ofensa.

—¿Nada normal? ¡Estamos hablando de Taylor Swift!

Beatrix rodó los ojos, divertida pero tratando de no mostrarlo.

—Soy consciente de ello.

Logan se acercó, poniendo un brazo alrededor de los hombros de Beatrix.

—Este ha sido tu sueño durante toda la vida. ¿Recuerdas ese fanfic que leías de ella cuando eras una adolescente? ¿Cómo es que se llamaba? Daddy...

—¡Bien! Es suficiente. Ya entendí tu punto— interrumpió Beatrix, sus mejillas enrojeciendo.

—Lo digo en serio, Bea. Soy un chico swiftie ahora. Si me lo preguntas, mi era favorita es Red.

Beatrix soltó una risa sarcástica.

—Lo supuse.

Logan frunció el ceño, curioso.

—¿Lo supusiste? ¿Por qué?

Beatrix le lanzó una mirada divertida.

—¿Tengo que recordarte tu última relación?

Logan hizo una mueca, cambiando rápidamente de tema.

—Dejemos de perder el tiempo— dijo una vez que ella le recordó a su exnovia.

Beatrix suspiró, mirando el reloj.

—Eso es exactamente lo que yo digo. Solo faltan dos horas.

Logan sonrió, satisfecho con su planificación.

—No te preocupes. He llamado a Rose y ella vendrá a ayudarte con el maquillaje.

Beatrix levantó las manos en señal de rendición.

—Logan... Vamos a cenar, no a la Met Gala.

Logan se encogió de hombros, con una sonrisa traviesa.

—Y si esto funciona, dentro de unos meses podrían ir juntas.

Beatrix sacudió la cabeza, divertida.

—Yo no recibí invitación y lo sabes.

Logan puso una expresión de falsa tristeza.

—Puedes ser mi más uno o, mucho mejor, puedes ser su más uno.

En ese momento, escucharon el sonido del timbre. Logan sonrió ampliamente.

—Debe ser Rose. Yo abro— dijo, saliendo de la habitación.

Beatrix se quedó mirando su reflejo en el espejo. Seguía pensando igual: si Taylor realmente estaba interesada en ella, la vería por lo que era. No creía que fuera necesario esforzarse tanto. Aunque, si lo pensaba bien, era un tanto hipócrita porque solo ayer pasó todo el día en el salón de belleza.