{LEXUS} UN MATRIMONIO FALSO.

CAPITULO 7

Incluso si hubiera una hilera de matrimonios promiscuos a la sociedad lo único que le interesa es el anillo en los dedos.

Teniendo eso en cuenta Logan entraba y salía del interior del Omega tan rápido como se estrellaba contra sus glúteos haciendo sonidos lascivos que posiblemente se escuchaban fuera de esa habitación.

Para Noa esto era estar en las nobles, con una capa y un super poder que explotaba sus entrañas, había deseado tanto esto que tenerlo era sofocante, el peso de Logan sobre el y la intensa punsada en su estómago, se sentía bien, extasiado, lleno y satisfecho.

Más perdió toda concentración cuando se escucha la voz de alguien en los pasillos ¿Quien demonios se atreve a invadir el área donde se encontraban la residencia de la familia real?

La voz nombraba su nombre, primero en voz alta y luego en voz baja hasta convertirse en un susurro. ¿Será Juno? No, ninguno de sus hermanos lo llamaría en un susurro.

Intentaba pensar, pero la manera en la cuál el miembro de Logan raspaba contra sus paredes lo hacía voltear los ojos y apretar la madera con fuerza para no dejar soltar los gemidos.

—Noa —lo llaman a la puerta.

No arquea la espalda sintiendo pánico por ser atrapado en esta situación.

Mira hacia la puerta y unas manos toman su rostro —¿Quien es ese?

La mirada de Logan penetra sus ojos buscando la verdad —No lo sé. —responde Noa.

Lo vuelven a llamar y Noa entiende que sea quien sea no se irá sin hablar con el. Empuja a Logan para que se aparte de el, Pero el alfa sujeta sus caderas con más fuerza. —Te quedas.

Se entierra en su interior tan profundo que Noa siente como un matiz de ardor gobierna en sus entrañas.

—Alto, detente —susurra tratando de apartarlo —Nos atraparán.

—Soy tu marido, que me importa a mi que nos atrapen.

No, esto no estaba pasando.

El placer lo tiene risueño, más la voz que lo sigue llamando perturba todo.

—Logan, detente.

—¿Por qué? ¿Quieres ir con el?

¿De qué estaba hablando? Nisiquiera sabía de quién era la voz.

—Esta bien, ve con el.

El cuerpo de Noa es suspendido en el aire, sus piernas abiertas, su intimidad al aire, si alguien entra vería la escena en primera plana.

El espejo colocado en la pared le muestra la pose nada conservadora en la que está, puede ver cómo el miembro desaparece en su interior y como vuelve a aparecer para volver a entrar.

Su frente toca la puerta y muerde tanto sus labios para mantenerse callado, Pero pequeños quejidos se escuchan y el sonido de su agujero lubricado era tan fuerte que Noa jura que la persona a fuera debió escucharlo, pues parecía haberse callado.

Logan tenía razón, son esposos, nadie los juzgaria, Pero realmente era necesario pasar por esa vergüenza ¿Por qué a él? Lo único que deseaba era un poco de paz.

—Era tu amante —susurra Logan en su oído —¿Que pasa, le juraste que no tienes nada con tu esposo? Que solo es un matrimonio falso.

Noa niega con la cabeza, ahora mismo se siente herido e incluso el sexo no parece satisfactorio desde esta perspectiva.

En estos momentos desearía ser Juno, su hermanito siempre fue sentimentalmente más fuerte que el, no quería llorar, Pero sus lágrimas mojan su rostro y su pecho siente algo más que indignación, siente desepcion.

Juno tenía razón, el tenía opciones y aún así escogió a Logan Marfort, un alfa que desde un principio le dejo claro que no quería un matrimonio.

Esto es todo lo que podía aspirar con alguien como Logan.

—Por favor... Suéltame... Me duele.

El pecho de Logan se detiene. Su respiración se corta al notar la humedad en sus mejillas. Lo baja con cuidado, sintiéndose como la mierda cuando su miembro sale del interior del Omega mojado de algo más que lubricante: (sangre)

—Lo lamento —era el idiota más grande del mundo, se dejó llevar por sus celos y no pensó en las consecuencias.

Intenta ayudarlo y Noa se aparta.

Noa no lo mira a la cara, se levanta con las manos y piernas temblorosas, siente una punsada en su estómago tan grande que lo hace llorar.

Entra a la ducha se lava el cuerpo y para cuando sale, Logan sigue en la habitación, a su lado está el doctor de la familia real, lo examina y según el doctor, no es nada grave, solo desgarramiento de su paredes.

Perfecto, esto era lo último que esperaba, que un doctor le dijera que acaba de ser desflorado por segunda vez.

—Debemos hablar —pide Logan lleno de odio a si mismo —Esto...

—¿Esto que? —Noa se aferra a su camisa —¿Que quieres de mi, Logan? ¿Por qué me haces esto?

Mientras se duchaba, Noa empezó a analizar toda la situación, esto sucedió por qué Logan se sintió amenazado. Eso solo significa que... Significa que Logan tiene sentimientos por el. A eso se refería Juno cuando le dijo que ambos estaban siendo testarudos y ciegos.

—¿Me amas? O al menos ¿Te gusto?

—Tengo afecto por ti Noa, Pero... No puedo amarte.

Noa ignora el dolor que sobrepasa a su dolor físico.

—¿Por qué no? —indaga, si va a seguir con este matrimonio almenos quería escuchar la verdad —¿Hay otra persona?

... ... ...

El silencio lo golpea como una oleada de veneno que carcome su pecho.

—Entonces, hay otra persona —Noa sonríe algo afligido y aunque deseaba ser racional todo en el se pierde —Es mi hermano ¿Verdad?

Logan alza la mirada indignado.

—¿Que demonios te hace creer eso?

—Todos lo saben. Todos saben que te gusta Juno desde que lo conociste.

—Es el prometido de mi primo.

—Es un Omega.

—Es tu hermano —enfuerece Logan —¿Cómo puedes pensar eso?

—Eso no quita que lo ames.

—Por el amor de Meera, no me gusta tu hermano.

—Mientes —Noa toma su camisa, se viste e intenta salir de la habitación —Ni siquiera puedes fingir que es mentira.

Cierra la puerta estrellandola.

Se siente como la mierda y toma vocanas de aire antes de aventurarse ante la multitud de invitados que siguen en el jardín.

Su familia siguen en la mesa junto a la reina y los demás invitados. No desea ver a nadie ahora mismo. Se escabulle entre la multitud sube a un aeroplano yendo donde pueda estar solo.

—¿Dónde necesita ir? —pregunta el chófer.

—¿Conoce usted un lugar solitario?

El chófer duda antes de responder un, si.

CONTINUARÁ...