Un Giro Inesperado. La Rueda De La Infortuna.

La extraña escuela en el bosque.

Al llegar a la enfermería me bajé con dificultad del auto pues aún estaba sangrando de la rodilla y me dolía todo el cuerpo, en cuanto entramos la enfermera me dio un cambio de ropa y me ayudó con las heridas no antes de echar a mis rescatistas.

-Muy bien chicos se pueden ir, les recuerdo que aún no se controlan bien al ver sangre humana a sí que vuelvan al concierto.

Los dos chicos se fueron y me dejaron hay con la extraña enfermera, en mi cara se reflejaba esa petición de que no me dejarán a solas con ella pero me ignoraron.

-Puedo saber por qué los echo?

-No es claro son vampiros por lo que no pueden ver sangre, bueno por lo menos uno de ellos lo es y tú eres humano o no?.

Esa pregunta era rara, pues yo era más normal que una quesadilla sin queso, es más era más normal que el pozole blanco.

-Pues si, al menos eso creo yo, de dónde yo vengo no existen los vampiros ni nada raro solo son leyendas urbanas y nada más.

Digo esto mientras me levanto del taburete y me empiezo a mover de un lado a otro, mi instinto de ser un ser inquieto actuaba de inmediato, pues este instinto era el que siempre me metía en problemas porque no podía estar quieto mucho tiempo.

-Parece que ya estás mejor te llevaré con el director para que hable contigo porque en este lugar no ay humanos y es raro que uno llegué aquí con vida.

Claro tenía que ser tan cliché una escuela donde no hay humanos y aparece uno, será todo un desastre, ¿ Qué soy una bomba atómica o el apocalipsis personificado?

La enfermera me llevo a la dirección, en dicha oficina a vía un hombre alto de pelo negro y lo único que me llamo la atención fueron las dos orejas y la cola, este señor no es lo suficientemente mayor para hacer cosplay de Neko, o por lo menos hubiera invertido más por qué parece falso, tal vez solo es un show de espectáculos muy raro.

-Es de mala educación ver fijamente a una persona mayor y más de esa forma, que tus padres no te educaron bien?.

-Pues si me educaron bien, pero es la primera vez que veo a un híbrido, de dónde yo vengo no ay personas Neko.

Decía esto para desviar la mirada y centrarme mejor en la exagerada decoración del lugar, bueno la mayoría de las cosas eran de terciopelo rojo o azul, pero que gustos más excéntricos, yo en mi cuarto aduras penas tengo un papel tapiz con nube citas y eso que era del antiguo habitante de la casa.

-¿Y son de verdad las orejas y la cola o solamente es un mal cosplay de Neko?.

Me atrevo a preguntar esto mientras señalaba con el dedo mientras lo miraba indirectamente, obvia mente la pregunta no le agrado pues me miró con enojo y claro tenía que ser yo el tipo de ser curioso el cual su curiosidad siempre lo termina metiendo en problemas, medida metida de pata estaba haciendo, tenía que ser yo ese ser soso al que se referían cuando alguien terminaba en problemas.

-Si son de verdad, ¿Algo más o vas a seguir preguntando cosas sin sentido?, como siempre los humanos tan ignorantes.

Yo y mi bocota, siempre tengo que meter la pata, por lo menos no sigo en ese bosque con semejante tormenta, típico cuando llega alguien de mal augurio siempre llueve seré un símbolo de mala suerte, tal vez por eso mis padres me echaron de la casa.

-Como veo que ni tú sabes por qué estás aquí te dejaré al cuidado de los tres tontos que te encontraron, también tomarás clases y más te vale no ocasionar problemas okay?.

Claramente, este señor está pidiendo un milagro, pues meterme en problemas es lo mejor que hago y lo peor es que ni sé cómo terminó metiéndome en ellos, se supone que en las historias de reencarnadas la chica conoce el contenido de la novela que leyeron, que injusto yo ni sé el nombre del libro en el que estoy, espera yo ni me he muerto, estaba vivo o era un ser vivo creo, si me hubiera muerto lo recordaría y no lo recuerdo.

Salí de la oficina del director y en la entrada estaban tres chicos, dos eran mis rescatistas y el tercero no lo conocía, ¿Estos tres debían ser los protagonistas masculinos del libro?, Esperemos y yo no sea el villano del libro no quiero morir.

-Al parecer ahora somos tus guardianes nos presentamos como se debe, yo soy Eiden Vencher.

-Yo soy Patrick Sumer.

-Yo soy Carlos Del vasco.

APA nombrecitos y yo que tengo uno muy común, creo es común dónde yo vengo en mi salón hay casi uno o dos chicos o chicas que se llaman igual.

-Es un placer yo soy TN AP...

Me presenté como se debe y por primera vez los vi bien, Eiden tenía el pelo tintado de azul oscuro, su piel era pálida y sus ojos eran color miel, por otro lado, Patrick tenía el pelo castaño claro, también era de tés pálida y sus ojos eran verdes, claro típico de un vampiro y por último estaba Carlos su piel era apiñonada, su pelo era negro y sus ojos azules y válgame dios que si eran guapos, cliché los protagonistas de los libros siempre son guapos y yo que tengo una apariencia de lo más normal seré el feíto del grupo vaya que el mundo es injusto, dios de la literatura por qué no me hiciste de buen ver o de a perdis un viejo sabroso, o no sé, seré de esos personajes que tienen su desarrollo al final y se vuelven sexis.

-¿Porque no mejor vamos al Dormitorio y nos cuentas como llegaste aquí?.

-¿Pregunta su dormitorio cuántas habitaciones tiene?.

-¿Cuatro tres están ocupadas y una está libre por qué?.

-Ja, ja, ja es que sería raro compartir cama con alguien o habitación, no soy de compartir habitación ocupo mucho espacio.

Digo esto en tono nervioso, claro no quería despertar a las tres de la mañana y ver a alguien intentando comerme literalmente, uno era vampiro y bebe sangre.

-No te preocupes tendrás tu cuarto para ti solo.

-Que bueno, es que soy algo paranoico y imagino cosas.

Solo dije esto en un tono nervioso, mientras jugaba con mis manos.