Despues de darse una merecida ducha que disfrutó como nunca antes, la mujer se recuesta sobre su cama limpia y bien tendida para descansar.
"aaahhhh!"
Suspira mientras cierra los ojos y estira las manos hacia los lados mientras piensa en todo lo que debe hacer mañana hasta que recuerda el motivo por el que Evan la visitó hace unos minutos atrás.
"Ese niño quiere a mi niña tanto como ella a él."
Medita antes que la alarma de su lavadora le indique que la ropa está lista y limpia por lo que levantándose de la comfortable cama ella camina hacia el aparato electrodoméstico de color gris para sacar el pantalón, playera, sudadera y gorra que Evan le pidió lavar.
Bueno, técnicamente no le pidió que ella específicamente lo lavara, sino que le permitiera usar la lavadora porque la suya, por milésima vez, está descompuesta.
"Y huele rico."
Susurra ella mientras dobla la ropa antes de meterla dentro de una bolsa limpia de plástico transparente.
"Listo, ahora si puedo irme a dormir."
Se dice a si misma mientras apaga la luz del cuarto de lavado, verifica que la puerta lateral de cristal esté bien cerrada al igual que las ventanas antes de cerrar la puerta de su habitación con seguro para deslizarse dentro de sus sabanas y dormir lo cual hace tan pronto toca su cabeza la almohada.
Cuando despierta, muy temprano por la mañana ella aún puede recordar lo que estaba soñando, pero conforme pasan los minutos, el sueño poco a poco se va desvaneciendo de su memoria.
"Puedo estar cinco minutos más y después debo levantarme."
Se dice a si misma mirando la hora en su celular, al desbloquearlo lee de nuevo el horario en que llegará su hija más tarde, una sonrisa aparece en su boca porque su amada pequeña por fin regresara a casa y esta vez para quedarse.
Aunque quisiera quedarse más tiempo en la comodidad de su cama la necesidad de usar el baño es más grande, así que apartando las frazadas salta de la cama para vaciar su vejiga, tras lavar sus manos y cara, la mujer se estira antes de cambiarse por ropa vieja que pueda ensuciar ya que aún le resta demasiado por limpiar en la casa de sus vecinos.
Despues de haber encendido la cafetera para que hacerse un buen café matutino, la mujer arregla su cama, abre la ventana y calza sus oscuros zapatos deportivos antes de sentarse en la silla de la cocina para mandarle mensaje al técnico especializado en electrodomésticos para que revise la lavadora automatica de los pelirrojos panzones.
-Llegare aproximadamente en veinte minutos-
El mensaje del jardinero que aparece en su celular hace que ella se apure, por lo que mientras mastica media galleta de vainilla cepilla su cabello azabache con mechones rubios antes de amarrarlo en un lindo moño apretado sobre su cabeza, cuando termina sirve el delicioso cafe en una taza y lo bebe en sorbitos ya que está caliente.
Después de comer una segunda galleta y terminarse su café, lava la taza para dejarla limpia antes de salir de su casa.
"Casi lo olvido."
Ella entra de nuevo a la casa porque dejó sobre la lavadora la ropa limpia de Evan, tras tomarla con sus manos camina hacia el jardín de los vecinos para apreciar todo el trabajo que se tiene que hacer el cual es bastante, su celular de nuevo suena y vibra al recibir el mensaje de respuesta del técnico en aparatos.
-Estare ahí en dos horas-
"Perfecto, tengo dos horas para avanzar en la limpieza."
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Doble obsesión
RomanceEstoy iniciando una nueva etapa de mi vida en este vecindario que parece pacífico, pero con lo único que no contaba es que mis vecinos de al lado serían unos completos imbéciles sucios y descuidados a quienes todos les tienen miedo. Todos menos yo...