When Emma falls in love (Traducida)

Conociendo a Amanda

Capitulo catorce
Emma

2 de enero de 2017.

Emma se había despertado al amanecer, ansiosa por la llegada de Amanda. Habían estado unidos desde el verano anterior a su primer año de universidad. Emma nunca tuvo problemas para compartir cosas como esta con ella, hasta ahora. La semana pasada fue perfecta. Estaban solo ella y Taylor, atrapadas dentro de una burbuja de felicidad, sin nadie cerca para dar su opinión.

El pomo de la puerta giró y Emma saltó del sofá. Amanda entró y dejó su maleta junto al sofá. "Hey, ¿cómo estuvieron tus vacaciones?"

"Oh, olvídalo. ¿Qué has estado haciendo?" Amanda se sentó en una de las sillas de la cocina y le sonrió dulcemente.

Emma hizo todo lo posible por evitar el tema. "Pasé las vacaciones con mi madre en Londres. Fue tan encantador que realmente necesitaba regresar. La extrañaba muchísimo".

"Emma, ​​cariño, eso no es lo que quise decir y lo sabes". Amanda arqueó las cejas. "¿Con quién te tiraste en Año Nuevo? ¿Viene esta noche? Dijiste que cenaríamos". Amanda se rió cuando dijo tiraste. Ella era de la costa oeste y nunca había usado esa palabra antes de conocer a Emma. Ahora era casi una broma interna entre ellas, algo que nació la mañana después de demasiadas fiestas universitarias.

"No me acosté con nadie, dejémoslo claro. Sólo me quedé a dormir. En realidad, su nombre es Taylor".

"Oh, finalmente." Emma arqueó las cejas. "Sólo quiero decir que ya es hora de que traigas a casa a una chica de verdad y dejes de fingir que son sólo amigas a los que sólo ves por una noche".

Nunca le había dicho específicamente a Amanda que era gay. En realidad, no se lo había contado a nadie excepto a su madre. "¿Lo sabías?" A Emma no le sorprendió saberlo, sino que nunca dijo nada. Emma podía recordar al menos dos noches en las que había traído a casa a una chica y había tratado de simular una inocente reunión amistosa.

Amanda asintió. "Sí, no estabas engañando a nadie, Em. Además, entré y... oh, ¿cómo se llamaba? Kayla... o tal vez era Layla. Ambas estaban muy borrachas, no quería avergonzarlas. Debiste habérmelo dicho".

"Nunca se lo dije a nadie más que a mi mamá. Supongo que nunca encontré el momento adecuado para hacerlo".

"Está bien Emma, ​​no me debes una explicación. Háblame de ella. ¿Es alguien que conozco?"

"Taylor es tan maravillosa. Es tan amable y absolutamente deslumbrante. La conocí hace un par de meses. De hecho, vino a Londres hace un par de semanas y realmente me gusta, me hace muy feliz". El rostro de Emma se iluminó ante la oportunidad de hablar sobre su novia.

"No puedo esperar para conocerla. ¿Te quedaste a dormir con ella?"

Emma asintió, entendiendo lo que quería decir. "Lo hice, salió muy bien. Ella me hace sentir muy segura. Yo... uh... le hablé de James".

"¿En serio? Eso es genial Em, estoy muy orgullosa de ti. Tú también deberías estar orgullosa de ti misma, sé que no fue fácil para ti". Amanda se levantó y caminó hacia Emma, ​​abrazándola fuerte. "Ahora realmente no puedo esperar para conocerla".

Amanda llevó su bolso a su dormitorio, presumiblemente para empezar a desempacar. Emma miró entre los gabinetes, tratando de encontrar algo adecuado para la cena y rezando para no tener que ir al supermercado. En realidad nunca había sido una buena cocinera y no estaba muy segura de por qué se había ofrecido a cocinar esa noche. Los gabinetes y el refrigerador estaban casi vacíos, salvo las pocas cosas que tomó del supermercado hace un par de días.