Una historia que, esencialmente, contiene amor.
1990 fue un año de luz para hogwarts, hasta que al final de la década volvió a repetirse la historia y la guerra mágica se desató. ¿Dónde quedaron los días de fiestas, guitarras, pergaminos nuevos y b...
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Damos un vistazo al pasado de Marlena y su historia. Spencer está en un dilema debido a la noche anterior.
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9 de marzo, 1995. Florencia.
ㅤㅤSu madre le había ordenado que se dirija hacia su habitación, pero no era extraño, ya que hace semanas notaba el cambio de actitud en ella. Parecía estar errática, más molesta y sonreía menos, incluso había notado como de repente compraba montones de alcohol y maquillaje para ocultar esas ojeras debajo de sus ojos. Suponía que se debía al trabajo, pero no era tonta, ella sabía que su papá últimamente llegaba más tarde que de costumbre y daba menos explicaciones.
ㅤㅤSu niñez había sido maravillosa, nadie podía decirle lo contrario. Marlena había crecido en una casa con padres amorosos, con gente que realmente la quería. Vivía en la cuna del renacimiento, Florencia, y toda su niñez había sido amamantada con cultura y subtemas que llenaran su alma y su cuerpo. Durante sus veintes, Margaret Lambert y Eros Mazzantini habían sido una especie de hippies, espíritus libres que solo se dedicaban a enriquecer su su mente subjetiva y posteriormente su cuerpo, y nada de eso cambió aunque el embarazo de Margaret no había sido planeado ni mucho menos deseado.
ㅤㅤMarlena recordaba con fervor aquellas tardes danzando frente al ocaso con sus pies desnudos sobre las costas de Nápoles, mientras oían jazz y su vestido largo se sacudía junto a las pequeñas vueltas que ella daba. Mirando hacia el pasado, la Marlena de 1997 quería advertirle que cuanto más arriba estuviera, más duro sería el golpe. Las cosas buenas jamás duran demasiado en el mundo.
ㅤㅤSu madre era escritora, Marlena estaba acostumbrada a oír durante horas sus relatos y a fingir que ella misma podía crear el mismo arte que ella. Su padre era un pintor y músico, por lo que era usual que no estuviera en casa sino en exposiciones o en algún show en las afueras de la ciudad. Su núcleo familiar estaba confirmado única y puramente por artistas maravillosos que le habían enseñado a apreciar la vida desde otro ángulo.
