9 "Secreto"

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Pedro, Najwa, Álvaro e Itziar regresaron a Madrid para continuar con las grabaciones en el foro. Esta vez, Pedro y Najwa se sentaron juntos, permitiéndoles a Álvaro e Itziar ver dormir a la pelirroja recargada en Pedro.

Al bajar del avión ese mundo del país de las maravillas en el que habían vivido por tan pocos días se acabó y regresaban a ser "amigos".

Los dos estaban cazando al otro siempre que podían. Pedro investigó las horas en las que Najwa comía para aparecerse por ahí y si bien no se sentaba junto a ella, la observaba. Cuando él entra a cualquier lugar en el que estuviera la pelirroja está lo miraba cada segundo.

Eran como los protones y electrones que se atraían por la interacción electromagnética.

Cierto día, Najwa estaba en su camerino esperando a que le llamaran para grabar. Esa mañana se había topado con Pedro, quién la había pasado rozando con él hombro.

WhatsApp

Me rozaste al pasar por el pasillo
¿Crees que no me doy cuenta?

Hola, Najwa
No sé de qué estás hablando

No te hagas tonto, te he estado observando

Honor que me haces

¿Dónde estás?

En mi camerino

¿Qué harías si te tocara justo ahora?

Creo saber lo que quieres 🔥

Tal vez, nunca nos descubran si es que lo hacemos

Algo ilicito

¿Si no hacemos ruido?
Porque puedo verte esperándome al final del pasillo

Es que tía, eres muy guapa
Sé que quedamos en algo...
Pero en serio, no dejo de pensar en nosostros encerrados en esa habitación

Come here

.

Desde esos mensajes, trataban de coincidir lo más que podían en los mismos lugares solo para poder comerse con los ojos. Se habían vuelto una necesidad. Hacerlo en el trabajo era más candente que hacerlo en sus casas, aunque claro, también lo hacían ahí.

Las miradas los delataban, levantando sospechas en los demás miembros del cast, en especial de Úrsula.

Úrsula caminaba por uno de los pasillos cuando alcanzó a escuchar la risa de Pedro, algo raro, porque él casi nunca estaba por ahí.

— Ya tienes que irte, vamos, tira — Pedro la tenía abrazada de la cintura, pero le preocupaba porque tenían la puerta abierta de su camerino

— Tengo libre un rato más

— Pero yo no, vas hacer que me despidan

— No importa — besó su cuello

— Pedro, no hagas eso — logró apartarlo de ella — ya vete, alguien nos puede ver

— Dame un beso y me voy

Najwa accedió y lo besó, durante el beso pudo sentir las manos de Pedro en su trasero. Carajo, lo hacían cada que podían en cualquier lugar y si no tuviera que grabar, lo metería dentro de su camerino otra vez.

The Great WarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora