Instituto Para Rebeldes || Sungsun & Jaywon

09🏫

Sunoo

Estúpido

Esa era la palabra que me definía a la perfección porque a pesar de haberlo echado, de haberlo ignorado tenía la esperanza de que volviera a aparecerse pero no lo hizo, ni en la tarde y ni siquiera en la noche, eran la 1am y yo no podía conciliar el sueño tenía las "disculpas" atoradas en mi garganta buscando salir en algún momento pero el no aparecia y era obvio

¿Cómo podía pensar que alguien más además de Jungwon sería capaz de soportarme?

Nadie lo hacía ni siquiera mi padre y por eso ahora estaba aquí encerrado pensando idioteces cómo si el niño entrometido de verdad me importara cuando no era así.

Por supuesto que no.

Entonces escuche un ruido en la ventana, voltee a ver hacia ella con la esperanza de ver su tierna carita asomada ahí pero no estaba, en realidad no habia nadie allí aún que podía ver un empaque color morado justo como el de el chocolate que el me había traído

Extrañado me levanté subí al espaldar y abrí el vidrio para encontrar que realmente había un chocolate allí, pero el no estaba o quizás eso se veía porque estaba seguro de que si estaba, solo que no podía verlo porque no estaba montado en lo que sea que el se montara para alcanzar la ventana, seguramente estaba en el suelo en completo silencio y si así fuese entonces...

—No se si realmente estás ahí pingüinito pero si puedes escucharme espero puedas disculpar mi actitud, nada es tu culpa en realidad y no quisiera que te alejaras de mi pero si tú lo hicieras yo lo aceptaría, gracias por ayudarme Hoonie...

No escuché respuesta alguna, suspiré rendido y tome el chocolate para cerrar el vidrio y volver adentro pero entonces su voz me detuvo.

Te disculpo Hyung, vendré a verte más tarde

Sonreí como imbécil y cerré el vidrio, saltando al colchón y ahí con una sonrisa estúpida en mi rostro me acurruque con la manta mientras comía el chocolate con una felicidad interna.

Jungwon

No podía dormir no cuando mi pie latia por el vendaje apretado que me habían puesto a petición del cara de ardilla exagerado, y mucho menos cuando en la otra cama estaba mi dolor de culo roncando como si fuera el único en el dormitorio

Debería asfixiarlo con la almohada

Rendido bufé sentandome en la cama, quizás podía escabullirme al dormitorio de Sunoo y dormir en su cama no creo que a Jake Hyung le moleste

Decidido a hacerlo me levanté con cuidado tratando de no apoyar demasiado el pie lastimado y caminé hacia la puerta abriéndola para salir directo al dormitorio de Sunoo que por cierto quedaba frente al mío, al salir mire los alrededores completamente vacío y camine a pasos lentos hacia la habitación, de repente se oyeron ruidos extraños y como buen chismoso que era cambie mi rumbo hacia aquel pequeño pasillo de dónde salían los ruidos, aún que estuviera cojeando y alerta de no ser descubierto

Ese pequeño pasillo según tenía habitaciones individuales muy pequeñas por cierto, habitaciones que te ganabas por buen comportamiento una que de seguro ni Sunoo ni yo tendríamos, pero ¿A quien le importa?

Tratando de hacer el menor ruido posible me acerque aún más solo para detectar que eran gemidos, una vez identifique los sonidos me di la vuelta para devolverme pero...

Oh más duro Jay

Mi cuerpo se paralizó y en realidad no sabía porque, porque aquello había causado escalofríos en mi, porque mi corazón se detuvo, porque todo parecía dar vueltas

¡Dios que bien me coge!

Los gemidos se hacian más intensos y aún que en realidad no fuera asi, podía oírlos cada vez más fuertes en mi cabeza

Me sostuve de la pared y empecé a caminar nuevamente hacia mi dormitorio, incluso olvide porque había salido en primer lugar, cerré la puerta detrás de mi y toque mi corazón tan acelerado como si hubiera corrido un maratón

Increíblemente los ronquidos habían parado, el ya no estaba roncando entonces quizás podría dormir tranquilo, quizás porque la verdad yo estaba seguro de que esa noche lo más probable sería que no podría dormir

🏫 🏫 🏫

—¿No dormiste nada? Tienes cara de Zombie—Jake me miraba mientras desayunabamos en el gran comedor de mierda

—Pase toda la madrugada pensando en Sunoo, me siento tan culpable, no dejaré de abrazarlo cuando lo vea

—No debes sentirte así, yo haría lo mismo por cualquier persona que yo quisiera—lo mire mientras el me sonrió—Ahora come, toca jardinería y necesitarás energía creeme

—Odio este maldito lugar—murmuré tomando la lechuga con los palillos mientras Jake reía

Oh Chanyeol ¿Cómo te fue con Jay Hyung?

Esa maldita voz, estaba seguro de que era Jeongin desde la mesa que estaba detrás de la nuestra

Como siempre el es tan bueno

Malditos imbéciles son un dolor en el culo de verdad lo eran, pero ¿Adivinen que? Nadie lo era más que yo

—Oh Jake Hyung ya no estaré triste por mi Sunoo—hablé en un tono en el cuál ellos también pudieran escucharme—pasado mañana lo tendré conmigo y estoy seguro de que no solo yo estaré feliz por eso, estoy muy seguro de que pingüinito Hoon también estará feliz de verlo.

Jake me miró y luego hacia la mesa, definitivamente el lo entendió

—¿Eso crees Won?

—Ujum asi es

Escuché un golpe en la mesa trasera y luego los pasos de alguien acercándose

—¿Que mierda dijiste?—Oh Jeongin tenía la cara tan roja llena de molestia que me hizo reír ¿Acaso no fuiste tú quien empezó a jugar? Y muy sucio por cierto

—Dije que..

—¿Que está pasando aquí?—la voz de Jay detrás de mi me hizo voltear para verlo justo alli, como siempre su semblante era serio y sus ojos potentes pegados a los míos ¿Acaso no podía mirar a alguien más?

—No pasa absolutamente nada, ya terminé—me levanté dejando de mirarlo, mientras Jeongin se disculpo y volvió a su mesa aún fulminandome con la mirada

Uy cuánto miedo te tengo jodido imbécil

—No comiste nada Won—Jake miro mi bandeja y luego a mi

—No pasa nada Jake Hyung me cambiaré y te esperaré en el gran jardín

El asintió y yo intenté caminar hacia la salida, intente porque el imbécil de Jay de puso delante de mi prohibiendo mi paso

—Quítate de mi camino

—Termina de desayunar

—Tu cara me quito el hambre—quise rodearlo y pasar por su lado pero tomo mi brazo—Que estás..

—Regresa a tu mesa y desayuna—me deshice de su agarre y lo miré

—Obligame jodido imbécil—sus ojos mostraban sorpresa una que al instante disimulo aún que era inútil yo ya lo había descifrado, pensó que lo obedeceria que iluso, no por nada me eh ganado el título de rebelde, sonreí con sorna—Eso pensé

Y sin mas y cojeando salí del comedor con una sonrisa en mi cara

Eso era matar dos pájaros de un tiro

Sunoo estaría orgulloso de mi, si señor.