Capitulo 3🌸

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Mientras en el palacio todos se preparaban para el inicio de la ejecución del campesino, en las afueras de Hanseong un grupo de personas conspiraba contra el emperador.

-¿Estás completamente seguro? -preguntaba la joven doncella de cabello negro y ojos miel.

El médico asintió-Sí, mi señora. Sin lugar a dudas, usted está embarazada.

La mujer respiró profundo y se volteó lentamente hacia un gran ventanal que daba a un pequeño jardín.

-Entonces, mi padre debe saberlo -anunció con tono firme, y el médico desapareció instantáneamente tras las puertas. Unos minutos después, un hombre anciano acompañado de un soldado joven llegó.

El hombre se acercó a la joven y extendió su mano hacia ella; la doncella la besó suavemente y luego hizo una reverencia.

-Mi señor padre -lo saludó.

-Chin Mae, mi querida hija, el médico acaba de darme las buenas nuevas -sonrió.

-Así es, padre. Por fin estoy esperando un hijo -sus miradas se cruzaron brevemente con las del soldado, quien apenas le sonrió.

-Excelentes noticias. Este niño es la confirmación que necesitábamos -caminó hasta el ventanal-Con este niño, podremos sacar de una vez por todas a ese maldito bastardo del trono.

-Así sea, querido padre -sonrió malévolamente, y sus ojos nuevamente se encontraron con los del soldado.

-Ahora todo lo que resta es poner el plan en marcha. Con la confirmación de tu embarazo, podremos irnos de una vez al palacio.

La joven suspiró y caminó elegantemente hasta el ventanal. Padre e hija continuaban mirando al jardín.

-Padre, ¿cree usted que todo saldrá según lo planeado? -preguntó aún mirando al frente.

-Por supuesto, Chin Mae. Esa escoria que se hace llamar emperador no puede seguir en el trono de Joseon. No es un hijo legítimo de los Joo, sino más bien el fruto de una de las muchas aventuras de su padre. Una desgracia que no merece llevar la corona, una deshonra para el linaje real. En cambio, tú, mi querida hija -el anciano se volteó y acarició la cara de la joven - Tú mereces ese puesto, al igual que tu hijo, porque es tuyo por derecho. Además, recuerda que las mayores fuerzas del país no lo están apoyando, y cuando tengamos ese respaldo, todo será mucho más sencillo.
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En el palacio del emperador, el joven castaño estaba esposado y atado a un tronco en el medio del patio. Con los ojos vendados con telas blancas de seda. Se retorcía mientras las lágrimas fluían sin cesar. ¿Qué había hecho para merecer tal trato, tal crueldad inusitada? Cada día en aquel lugar era un nuevo calvario; realmente, aquella gente podía ser despiadada y maliciosa.

-Por favor, les suplico -lloraba con el rostro bañado en lágrimas-. Permítanme regresar a mi hogar, por favor. Les aseguro que guardaré silencio, solo déjenme marchar.

-¡Qué molestia eres! -exclamó una sierva-. ¿Por qué no te callas de una vez? Deberías estar agradecido por tan gran privilegio -lo reprendió con brusquedad.

-No lo comprendo, señora -lloraba desesperado-. ¿Cómo puede ser un privilegio ser tratado de esta manera tan atroz?

- ¡Qué insolencia! No comprendo cómo se te permite expresarte de esa manera.

- Por favor, ¿qué van a hacer conmigo? - exclamaba entre lágrimas, incapaz de percibir lo que sucedía a su alrededor.

- ¿Acaso no lo sabes? ¿Eres tan ingenuo? Serás ejecutado por orden directa del emperador.

Bajo el árbol de cerezo/ Jinx Fanfic Donde viven las historias. Descúbrelo ahora