𝑭𝑨𝑲𝑬 𝑩𝑶𝒀𝑭𝑹𝑰𝑬𝑵𝑫 ── ʀᴇᴍᴜꜱ ʟᴜᴘɪɴ

15 • t h e g i r l i l i k e

La mañana siguiente el castaño se encontraba de muy buen humor mientras caminaba por los grandes pasillos de Hogwarts dirigiéndose a su próxima clase junto con sus amigos, estos iban riéndo y bromeando entre sí mientras planificaban alguna que otra broma para la profesora de Herbología, la señorita Sprout, estaban en busca de algo cruel pero que tampoco fuera demasiado, simplemente algo con lo cuál vengarse por la regañada que se llevaron la última clase de su parte.

─ ¿Y si solo no hacen nada y evitamos otro castigo?─ propusó Remus pacíficamente.

─ Apoyo la idea─ habló bajito Peter.

─ ¡Le quitas lo divertido!─ abucheo Sirius.

─ ¡Oh, ya se!─ alertó rápidamente James haciéndo que lo miren─ ¡Una poción de sueño en su taza de té para tener la hora libre la próxima clase!

─ ¡Oh, eres un puto genio, Potter!─ refutó el pelinegro a su lado.

─ Sí, salvo que al ser una bruja experimentada descubra la poción con solo olerla─ respondió obvio y sensato Remus.

─ Pequeño gran detalle─ suspiró el de lentes rascando su cabeza como si los pensamientos brotaran de allí.

─ Por eso necesitamos de ti, Remusin─ Sirius le dió una palmada en la espalda a su amigo.

─ No, no me metan en sus bromas.

─ ¡Oh, tengo una idea mejor! Solo tenemos que secuestrar a la señorita Sprout y lueg-

─ No, James─ regañó el castaño antes de que siguiera.

─ O simplemente usen el encantamiento Calvorio para dejarla calva para no tene clases.

De pronto una voz femenina habló detrás de ellos, Maddie Crouch se encontraba parada de brazos cruzados con su lindo uniforme de slytherin y por lo que se veía, había estado escuchado la conversación por lo que sugirió algo mas divertido.

─ ¡Esa es una idea extraordinaria!─ gritó James mientras se tiraba al suelo y comenzaba hacer pequeñas alabanzas, cosa que termino rápidamente ya que Remus, algo avergonzado, lo pateó con su pie ligeramente en señal de que se levantara y dejara de hacer el ridículo. Maddie solo los miró con una ceja levantada.

─ ¿Te gustaría ayudarnos con la broma?
─ sugirió un sonriente Sirius.

El castaño solo se limitó a fruncir el ceño con molestia, ¿Por que de pronto hablaban con la slytherin?

─ No, gracias─ dijo sonriendo, no quería que los demás pensaran que ahora se juntaba con aquellos molestos merodeadores.─ De hecho, estaba buscando a Remus.

─ ¿A-a mi?─ pronunció el recién mencionado.

─ ¿A él?─ dijeron sus amigos.

─ Es lo que dije─ agregó un poco de sarcasmo a sus palabras.

Su amigo James entendió rápidamente lo que estaba pasando y desde luego que notaba aquella vibra tensa entre los jóvenes, por lo que no tuvo mas remedio que hacer lo obvio.

─¡Todo tuyo, Mads!─ dijo el recién nombrado aproximando a su amigo hacía la muchacha de un empujoncito─ De todas formas teníamos cosas que hacer.

─ Eso no es cierto.

Rápidamente James pisó el pie de Sirius disimuladamente, quién parecía no entender del todo la situación como el ojiazul, quien intentaba explicarselo con miradas furtivas y levantamientos de cejas muy extraños.

─ Oh si, cierto, debemos de hacer cosas─ dijo el pelinegro luego de un momento, captando la situación.

Remus solo masajeaba su cien algo avergonzado de la tonta y repentina actitud de sus amigos al no saber disimular ni siquiera un poquito aquello. Pero oara su sorpreso, en menos de lo que parpadeó notó que sus amigos ya no se encontraban allí y lo agradeció internamente.