11. El encuentro.

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— Kakashi — fue el nombre que salió de los labios del Uchiha, podía sentir su cuerpo tensarse, la brisa removía con sumo cuidado sus hebras azabaches. Mantuvo su cuerpo estático, estaba algo sorprendido por ello, no sabía qué hacer, a dónde ir, ni qué decir o siquiera qué explicación iba a darle por su repentina desaparición.

— ¿Kakashi? — preguntó la figura contraria mientras se acercaba de manera intimidante al Uchiha, tomó de los hombros al contrario mientras fruncía el ceño — ¿Es lo único que puedes decir? — Preguntó mientras empujaba al moreno.

— Pues..es tu nombre, ¿o no? — cuestionó con cierto nerviosismo, ¿acaso había llegado a otra dimensión? Empezó a llenarse la idea de diversas ideas paranoicas sobre qué no iba a poder volver a casa, podía sentir la preocupación que poco a poco iba volviendo difícil mantener clara la visión, podía sentir sus ojos llenarse de pequeñas gotas de agua saladas.

— Eres un idiota — dijo el Hatake mientras acortaba la distancia y envolvía al azabache entre sus brazos, lo apretó con fuerza contra sí mismo, como si no quisiera soltarlo nunca, temía que al hacerlo el Uchiha se perdiera de nuevo de su vida, cosa que él no quería, no estaría dispuesto a soportar esa preocupación y dolor dos veces.

Obito simplemente se mantuvo quieto en su sitio, era la primera vez que el albino le daba una muestra de afecto como esas, levantó sus manos algo temblorosas por la emoción del momento y las aferró a la espalda ajena, ocultó su rostro sobre el hombro de este y dejó salir algunas lágrimas. Lo único perceptible en el ambiente era la silueta de los dos jóvenes unidos en un cálido y fuerte abrazo, iluminados por el creciente sol que iba saliendo indicando el inicio de un nuevo día.

El peliblanco se apartó un poco del abrazo, sin soltar al chico que estaba entre sus brazos, quien levantó la cabeza para enfocar sus enormes orbes azabaches en los ojos de Kakashi.

La sorpresa y admiración llenó la mirada de Kakashi, que era lo único perceptible en el momento, la vista que tenía frente a él era tan deslumbrante antes sus ojos; la poca luz del sol iluminaba la figura de Obito, el brillo que mantenían esos iris oscuros, llenos de vida y luz, pero al mismo tiempo tan profundos e intensos que eran capaz de capturar la atención de cualquiera, no era un color muy llamativo pero había algo especial en ellos.

Ambos se mantuvieron así por unos instantes, mirándose fijamente, absortos del mundo ajeno, como si no existiera más que ellos dos, una sonrisa se formó en los labios del azabache, sonrisa que fue como la más hermosa vista para el Hatake, el abrazo fue roto por el Uchiha, quien dió un suspiro y llevó una de sus manos a la parte posterior de su cabeza, como si estuviera avergonzado por algo.

— Realmente no sé qué decir.

— Lo más importante es avisar de tu llegada, iremos donde el Hokage.

El Uchiha simplemente dio un asentimiento y empezó a caminar junto al albino, mantuvieron una trayectoria tranquila, silenciosa mas no incomoda, les tomó un tiempo llegar debido al ritmo monótono y constante que mantenían, pero al estar en la entrada, tocaron la puerta por petición del Hatake, ya que sabía lo imprudente que podía llegar a ser el pelinegro.
Ambos esperaron hasta escuchar una indicación que les permitió entrar, hicieron una reverencia hasta que el mayor fijo su atención en cierto joven de cabello azabache.

— Hokage-sama — exclamó Kakashi como si fuera un permiso para hablar, autorización que fue denegada por Sarutobi.

— Kakashi, hablaré esto a solas con Obito.

El albino, no teniendo más opción, simplemente se dedicó a dar un asentimiento para mirar por el rabillo del ojo al azabache, quien le dio una amplia sonrisa indicándole que todo estaría bien, con eso en mente se pudo retirar tranquilo.

— Entonces, Obito...

— Le explicaré todo.

[...]

Ojeaba las hojas de su libro con desinterés, nunca se había aburrido de aquello o siquiera una vez se había sentido tan desanimado para mantener la lectura, pasaba hoja por hoja sin motivación alguna, como si estuviera enigma.
Realmente estaba más concentrado en saber de qué estaban hablando el Uchiha y el Hokage, ya quería entrar para poder llevarse al azabache con él, frunció el ceño y dió un suspiro algo pesado antes de que otras dos voces se hicieran presentes logrando captar su atención.

— ¡Kakashi! — fue la dulce voz que inundó sus oídos, seguido de eso, sintió el peso de la castaña sobre sí.

— Rin.

— No pensé encontrarte aquí, Kakashi — fue lo que dijo el rubio mientras llegaba hasta sus dos alumnos, mostró una sonrisa como solo él podía hacer y cuestionó al joven de cabellos blancos — ¿qué te trajo hasta aquí? — se llevó la mano derecha al mentón para sostenerlo en lo que era respondida su duda.

— Verán... — no sabía cómo explicarle la situación a su maestro y compañera de equipo, pero para su buena suerte y como una salvación, el Uchiha y Hokage salieron de la oficina para encarar al equipo.

— ¡Obito! — exclamaron rubio y castaña, la joven se dirigió a los brazos de Obito, quien la recibió gustoso en un apretón contra sí mismo mencionando así su nombre.

Por el contrario, el rubio estaba algo sorprendido por la aparición del pelinegro, ¿Desde cuándo había llegado? ¿Eran los únicos que no sabían? ¿Por eso Kakashi estaba aquí? Dirigió su mirada azulada a Kakashi, se dedicó a mirarlo con duda e intriga, estrecho sus ojos casi como si lo estuviera juzgando.

— Minato, al parecer tu alumno fue secuestrado por ninjas del sonido, pero ha salido ileso de la situación, es un excelente shinobi — interrumpió la voz agotada del Hokage, quien buscaba deshacerse de las cuatro personas que tenía delante para seguir en lo suyo.

Rubio, albino y castaña miraron al moreno con sorpresa, quien solo mostró una sonrisa nerviosa para no levantar sospechas.

— Buen trabajo, Obito — felicito el mayor de los presentes antes de revolver las hebras azabaches para acto seguido volver a su oficina.

El equipo siete quedó en silencio, nadie sabía que era exactamente lo que debían opinar o decir en esta situación. Eso hasta que uno de ellos decidió romper el silencio con una invitación.

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Holaaa, aquí nueva actualización, espero les haya gustado, más adelante veremos la nueva relación del equipo siete y el cambio de comportamiento de Obito, incluido el avance de poder y habilidad de este y su evolución respecto en madurez.

Gracias por leer, correcciones, dudas o inquietudes hacérmelas saber, con gusto os leo.

Hasta otra pronta ocasión, nos leemos luego.

~Causalidad~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora