Una eternidad a tu lado. (Eimiko)

Encuentro Fatui

-Bueno... Yo voy a salir a ver qué tal van las cosas en mi editorial.-dijo Yae yéndose de ahí.

-Oh, Si, está bien.-Dijo Ei apartando la mirada.

Yae se vistió y salió del apartamento para ir a ver qué tal iban las cosas en su pequeña pero exitosa editorial, había contratado dos personas para que se queden allí para que ahora se pueda abrir todos los dias y así vender más rápido.

Yae camino salió del hotel y empezó a caminar en dirección a su editorial, mientras caminaba pensaba mucho en Ei y en lo que había pasado anoche.

-Tal vez ni siquiera se acuerde de lo que pasó.-se dijo Yae.-Agh... ¿Por qué pienso tanto en un simple beso? Ayato ya me ha dado muchos... No es la gran cosa. Supongo...-se decía Yae.

De pronto Yae se chocó con un chico peli naranja con una bebida en la mano haciendo que se le cayera encima.

-Oh dios, fijate por donde caminas chica.-dijo el chico peli naranja de mala onda limpiándose la bebida de encima.

-Ah si, disculpa.-dijo Yae a punto de irse.

-Oye, oye, al menos me pagarás la bebida no?-dijo el chica volteando a ver a Yae.

-¿¡Que!? No te voy a pagar una mora.-dijo Yae indignada.

El chico ríe y dice:

-Solo bromeaba, tengo el mora suficiente para comprarme 10.000 vasos más.

-Oh wow, eso es increíble pero, ¿Te he preguntado?-dijo Yae mirando al peli naranja.

-Hm!-Exclamó-Público difícil, supongo. Bueno.-paro el chico.- ¿Puedo saber el nombre de tan bella dama?-Pregunto.

-Ew, yo me tengo que ir por allá.- dijo Yae girando para irse.

-Me llamo Tartaglia, pero puedes llamarme Nobile. Como guste la señorita-dijo el chico agarrando del brazo a Yae.

-Si aja, de verdad tengo que ir a hacer algo señor tartas-dijo Yae soltándose del agarre de Nobile.

Yae empezó a caminar dejando atrás a el chico de pelo naranja.*Hmm, Tartaglia... He escuchado ese nombre en algún lado.* Pensó Yae.

Miko abandonó esos pensamientos rápidamente por qué ya había llegado a su editorial y uno de sus empleados se acercó a ella para empezar a hablarle.

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Después de una larga conversación de cómo iban las cosas en la editorial y como podrían mejorar esta, etc, etc.
Ya tocaron las campanas de las 3 de la tarde.

-Bueno, ya es hora de que me vaya.- dijo Yae caminando hacia la salida.

-Espere señorita Yae!-dijo uno de los empleados.

Yae voltea y ve al empleado curiosa.

-Un chico llamado Nobile vino y le dejo esta carta.-dijo el empleado mostrando la carta.

-Oh, entonces no tiene importancia.- respondió Yae volviendo a girar para irse.

-Pero, ¡Señorita Yae! Es de parte de un Fatui!-dijo el empleado insistente.

Yae abrió sus ojos en grande y volteo a ver la carta, *Sabía que ese nombre me sonaba a algo.* Pensó Yae mientras agarraba la carta.

(Los fatui aquí serán otra cosa)

Los fatui son una organización proveniente de Snezhnaya son conocidos porqué siempre se alian con algunas empresas/negocios pequeñas para "ayudar" en su crecimiento y empezar a ganar mora (dinero) fácil desde estos, hacen que poco a poco sigas los pasos que ellos quieren que tú des y así quitarte todos los derechos que tienes sobre tu mini empresa/negocio. Cuando se apoderan de esta empiezan a poner a otros fatui a cargo de estas y a partir de ahí se hacen cada vez más ricos y poderosos. Con la mora que ganan empiezan a sobornar a personas más importantes para quedarse con todo. Todo aquel que se interponga en su camino desaparece "misteriosamente" o se encuentra muert0 en algún rincón de Teyvat. De todos los Fatui que rondan por las siete naciones hay once que más destacan en toda esta organización, los once son Fatuis destacados por hacer grandes hazañas por la organización. Y adivinen quien es uno de los once, exacto, Tartaglia es el undécimo de los once.