Llévame al lago donde todos los poetas duermen, donde el canto de aves en el aire se pierde. No pertenezco a esa gran ciudad, ni tú tampoco, mi amor. Parece un lugar perfecto para llorar, pero hace 5 meses que ninguna lágrima recorre mi mejilla. Tú eres mi musa; te doy el silencio que solo aparece cuando dos personas se entienden mutuamente, ¿Eso es suficiente para ti? Te daría el atardecer, te daría lo mejor de mí, pero la lluvia siempre vendrá si te quedas conmigo. Aun así, te construiría una cabaña para que estés tranquilo y la tormenta no interrumpa nuestra dulce nada. Me estoy yendo donde toda la magia ocurre, donde los sueños se hacen realidad, pero no me iré sin ti.