Aftermath (Sahyo G!P)

8.

Jihyo por la mañana no acostumbraba a recibir correos, pero ese día cuando fue a abrir el restaurante se fijó en una lechuza que pasó a lo largo de la calle y dejó caer una carta sobre sus manos, estaba tan sorprendida que por un momento olvidó que hoy tenía que trabajar y abrió la carta sin pensarlo

"Querida Park ¿Cómo está Sana? Espero que bien y que apliques lo que te dije, escribí esto preguntándome, ¿Cómo la mente puede inhabilitar tu cuerpo por completo?"

Ya no quería leer, pues se trataba de un texto largo, pero recordaba que Dahyun estaba bastante preocupada por el estado de Sana y decidió continuar

"Sana es una bruja con un poder inmenso pero tal vez nunca vuelva a caminar y se haya vuelto muy frágil, jamás tendrá la resistencia de antes, ¿Pero si tiene tanta magia porque no la usa para complementar todos estos daños? La respuesta está en la siguiente frase "Mente Sana, cuerpo sano". Posdata: yo saqué los poemas anoche, si no quieres que siga interviniendo en el proceso entonces hazlo tu"

—Esa idiota...—Bufó, y arrugó la carta para comenzar su día

Tzuyu había pasado la noche en el comedor cuando se quedo dormida al lado de Sana, ella no despertaba aun por lo que Jihyo tomó cuidadosamente su silla de ruedas y la llevó a la habitación de su hija para que estuviera cómoda

Ayer pasó casi todo el día despierta cuando su normalidad era estar dormida (inconsciente) la mayor parte del tiempo, así que jihyo esperaba que no causara muchos problemas este día

Cuando vio a Sana dormida sobre la cama pensó en muchas cosas, especialmente por como sus heridas no se curaban del todo a pesar del tiempo

Obviamente, cosas como la cristalización de sus piernas jamás iban a sanar, ¿Pero que tal los rasguños que se hizo ella misma? O su complexión delgada de la que Jihyo podía ver sus costillas ¿Por qué nada de lo que hacía resultaba en un paso grande para su rehabilitación?

Ni siquiera su comida más engordante añadía los kilos faltantes de Sana

—Dios, mi espalda...—Se quejó Tzuyu cuando llegó al segundo piso con su madre —¿Cómo se encuentra?—

—Igual que siempre supongo. No parece que estemos haciendo suficiente—Contestó con decepción

—Yo pienso en algo que podría hacerla sentir mejor—

—¿Ya aprendiste pociones entonces?—

—No hablo de pociones, ¿Que tal si la llevamos a su pueblo natal?—

—¿Alatoum?—Cuando Jihyo recordó el sitio del que venía sana, se acompañó de una sensación de nostalgia, Tzuyu escuchó el nombre del poblado y no dejaba de pensar en lo maravilloso que podría ser—No lo sé, estamos como a tres portales de distancia, el camino es algo costoso ¿Qué te hace pensar que le gustará? Su familia está muerta y con suerte recordará la gente que vivía allí—

—Pues tampoco servirá que se quedé aquí todo el rato, ¿No crees? O tal vez que te pongas un poco mas cariñosa con ella la ayude, ¿Por qué no la acompañaste aquella ocasión que te pidió que te quedaras...—

—Tzuyu, no tienes ningún tipo de derecho para decirme como es competente tratar a Sana ¡Y es todo! La ayudamos porque...porque, olvídalo—

Tzuyu se enojó, no podía creer que su madre se quejaba de la falta de mejoría de Sana mientras que al mismo tiempo se negaba a cambiar su actitud con respecto a ella, y Jihyo sabía que consiguió enfadar a su hija cuando la cara se le puso roja, dandole la espalda para tratar de no continuar con la discusión

Ya de regreso en la cocina, todo transcurrió con cierta calma, el mundo le estaba diciendo que debía amar a Sana ¿Y qué si no podía? Mas bien, hacía mucho con atender sus necesidades, le exigían demasiado sin que tomasen en cuenta que Jihyo seguía lastimada por la forma en que su ex pareja la dejó