Todo fue una mentira

Prefacio

Querido lector.

Te invito a sumergirte en las páginas de esta historia, un reflejo de la vida misma, donde las verdades se ocultan tras capas de engaño y las apariencias pueden ser ilusorias. En un mundo donde la perfección es una fachada, descubrirás personajes que encarnan la dualidad humana: la luz y la oscuridad que residen en nosotros.

Esta no es solo la historia de Leah, sino también un viaje a través de los laberintos de nuestra propia existencia. A través de sus ojos, exploraremos los límites de la confianza y la traición, y nos enfrentaremos a la ambigüedad que define nuestra humanidad. Cada capítulo te sumergirá más profundamente en un océano de preguntas, donde las respuestas parecen tan esquivas como el viento.

Al escribir estas líneas, mi intención era sondear los rincones oscuros del alma humana y la complejidad de nuestras relaciones. ¿Qué significa confiar? ¿Cómo reaccionamos ante la traición? Estas son preguntas universales que, a través de esta narrativa, espero te ofrezcan una nueva perspectiva.

Los personajes de esta historia, con sus motivaciones ocultas y acciones contradictorias, te llevarán por un viaje donde cada verdad revelada podría ser un espejismo, y cada hecho aceptado, una ilusión. En este mundo de espejos rotos, encontrarás personajes tan complejos y contradictorios como tú, lector.

Este prefacio es una promesa: la promesa de que, al final de esta historia, tu comprensión de la realidad podría cambiar para siempre.

Cada página que gires es un paso hacia una verdad que puede ser tan conmovedora como devastadora. Prepárate para cuestionar tus creencias y descubrir que, a veces, las respuestas que buscamos han estado dentro de nosotros todo el tiempo.

Dicho esto, te doy la bienvenida a un mundo donde nada es lo que parece. Que tu lectura esté llena de misterios y revelaciones.

Con aprecio                                                                                                                 Amaralis.