14 de junio del 2023

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                        Deseo

Me llamaste expresando tu amor por mí, manifestando que me extrañas, que deseas volver conmigo y hacerme feliz. Por un instante creí en tus palabras, pero pronto me di cuenta de que no puedo arruinar el progreso que había logrado al mantener contacto cero contigo. No puedo echar a perder la autoestima que estaba construyendo en mí.
Has regresado y ahora solo te veo como un amigo, deseas llenarme de afecto y halagos, insinuando que solo me querías para tener relaciones sexuales y divertirte.

Hablamos sinceramente y nuestra relación podría haber funcionado, pero tanto tú como yo tuvimos miedo. Todos experimentamos miedo, pero si no lo enfrentamos, nunca sabremos que nos depara la vida o qué sorpresas nos aguardan. Sé que estabas herido, pero yo no era la responsable. Ante este interrogante, me cuestionó cuál es el camino a seguir. La posibilidad de aceptarte de nuevo en mi vida me genera temor a revivir un amor de el pasado del cual he logrado liberarme. Temo que, si te permito entrar en mi vida nuevamente, pueda acabar siendo prisionera de esas cadenas de las que tanto tiempo luché por escapar. Aceptar tu regreso sería como renunciar a aprender de experiencias pasadas, como si me complaciera vivir en la adversidad, en este momento, mi única intención es cultivar una hermosa amistad contigo, poder brindarte apoyo y ser un salvavidas en tu vida, sin necesidad de enamorarme de ti.
Incluso si llegara a ocurrir, las circunstancias ya no serían las mismas.

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Una vez más tu Narcisismo ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora