Sombras de papel: amor en llamas

Décima carta

Cacería 

Una semana después empaque mis maletas y agarre el primer avión que saliera hacia Costa Rica para transbordar y agarrar otro hacía Bogotá, Colombia y por último agarrar uno hacía mi querida ciudad Cali, Colombia, para poder enfrentar mis pasados. Yo te juro que me había mentalizado de todo lo que podía pasar; sin embargo, la vida siempre tiene obstáculos. Querido Handsome.

Salí de Nueva York un domingo, para iniciar mi semana en casa, el día lunes los chismes corrían como pan caliente cuando están en promoción al 2x1. Le dije a una amiga, comenta a todos que he llegado a casa a enfrentar a mis fantasmas, puedo llegar a terminar loca es muy probable, pero la vida dice que para solucionar el problema en su totalidad hay que eliminar el problema desde su raíz y eso iba a hacer yo.

Mis padres estuvieron encantados con mi llegada, pero era de esperarse que estuvieran más enfocados en sus trabajos que en su propia hija, al final su crucero terminó mucho más antes de lo que esperaba.. No me dolía absolutamente para nada. Pero sí me preocupaba un poquito que estuvieran enterados o que no me dejaran jugar mi próxima posición en el tablero del juego perverso creado por ti y por mí.

¿Sabes, my love? A los tres días mis informantes me informaron que ya estabas al tanto de toda la situación de mí. Y qué ya habías leído mi carta, lo que sí me sorprendió fue tu reacción al leer la carta, tengo entendido que te enviaron a la sala de aislamiento junto con esa horrible camisa de fuerza que uno ve en las películas, porque estabas tirando todo a tu alrededor y que maldecías, pero que luego te reías, como el psicópata que eres baby, Pero yo no estaba al tanto de lo que realmente ocurriría.

Estando ya en casa me llegó la invitación a un evento de una marca ecológica para que fuera parte como modelo, nunca había modelado, pero no pasaba nada con intentarlo. Cuando hice la pasarela me sentía una diva, fantástica, encantada. Terminé mi participación en el local y al llegar a mi casa como ya era de costumbre mis padres no se encontraban, pero en el comedor había una tarjeta colorida que decía mi nombre.

Al abrirla decía: "Para nuestra pequeña, papá y mamá por temas de trabajos se tuvieron que ir fuera de Colombia, tuvimos que viajar a España de emergencia, sabemos que acabas de llegar, pero corazón a veces hay prioridades, cualquier cosa nos llamas, las personas que nos ayudan en casa, están llegando día de por medio, Martha llegará todos los días a casa a cocinar y hacerte compañía, cuando estés lista ya está todo preparado para tu regreso al colegio, habíamos hecho una reservación en un lugar tranquilo a las afuera de la ciudad, para no cancelar decidimos que ibas a ir tu corazón, ve a disfrutar ya está todo pagado serán tres días, pero si quieres otras cosas del mismo lugar sabes que no hay problema, hay una tarjeta de débito con fondos ilimitado en tu habitación encima de una maleta ya preparada. Llegarán a recogerte dentro de una hora después de que hayas leído esto... Te amamos Papá y Mamá.

Tal como estaba escrito en esa tarjeta llegaron por mí, un coche negro con un hombre muy sexy, condujo por más de dos horas y llegamos a un lugar llamado "Hacienda el Paraíso" estaba ubicado cerca de un bosque principal de Colombia, tal como decía el nombre era una hacienda con muchas propiedades, pero en esa gran hacienda se encontraban cabañas para parejas o para solteros que simplemente querían relajación. Al entrar a la propiedad me hizo recordar la vez que quería matarte, pero simplemente todo fue un caos que tuve que salir huyendo y que gracias a Dios no me morí al llegar a tiempo a esa veterinaria y que tampoco levantarán sus sospechas o que tampoco hayan llamado a la policía cuando me atendieron.

"Muy buenos momentos" pensó mi subconsciente "Eran días en los que te desconocías"

Y sí, mi subconsciente tenía razón, porque eran comportamientos anormales que estaba viviendo desde tu llegada.

Al entrar a la cabaña lo primero que observé fue una gran cama matrimonial porque era de esperarse por la reservación que habían hecho mis padres, seguí observando y vi un gran ramo de rosas blancas y rojas. Un detalle que me sorprendió. Me acerqué al ramo y la tarjeta que tenía hizo que retrocediera tres pasos atrás, sentí que iba a estar nerviosa, pero fue lo contrario a eso. Sabía que estabas cerca de mí y parte de mí te estaba esperando con ansias. Tuve la valentía y leí la nota que estaba en inglés que decía: "Todos estos crueles meses mi amor, han valido la pena, para poder verte el día de hoy"

Cuando volteé a ver, estabas tú con una chaqueta de esas camisas que son de fuerza, pero que están muy de moda últimamente, junto con un pantalón negro de vestir y una sonrisa perversa que mostrabas solo conmigo. Y yo estaba con un vestido color negro con escote de corazón, al parecer se iba a crear una escena que solo se iba a disfrutar una sola vez.

Te acercaste a tal punto de solo oler mi perfume, luego retrocediste y llamaste a alguien por el teléfono que se encontraba en la habitación. Yo reaccioné, me atreví a acercarme a la puerta para ver si había gente, pero todo estaba solitario.

—Anda que no va a ver nadie, estamos solo tú y yo. Serán tres días de muchas decisiones, tres días que podemos disfrutar a las buenas o terminar muertos.— me confesaste.

Creo que lo del psiquiátrico no sirvió de mucho y mucho menos las palabras de esas cartas nunca fueron sinceras. 

Nota de la autora: 

1. Pd. La imagen la hice con inteligencia artificial.

2. Espero les haya gustado el capítulo.