━━ Demons love | Ni-ki

🎐 26 | LEVANA AND JAY

Levana despertó enredada entre los brazos de Riki, así que con cuidado se levantó para ahora ella hacer el desayuno. Recordó uno de los desayunos favoritos de su novio, los waffles, así que lo sorprendería con su desayuno favorito.

Tiempo después Riki despertó al sentir un espacio vacío en la cama y aparte un delicioso olor a waffles que venía de la cocina.

Pero la imagen que vio al levantarse hizo que se le derritiera el corazón, Levana tenía las mejillas ligeramente llenas de waffles y un chongo sencillo y un taza de café en sus manos la hacían ver muy adorable según Ni-ki.

El demonio corrió a donde estaba Levana y le dio dos besitos en las mejillas. —Que linda te ves mi niña— le dio una sonrisa.

—Buenos días Kinnie— también le dio un beso en su mejilla, logrando que su novio se muriera de ternura.

Esta mañana habían amanecido más melosos de lo normal. Después de desayunar y arreglarse, Riki debía de irse a entrenar.

—Adiós bonita, prometo regresar para comer— la rubia se acercó a él y se puso de puntitas para darle un beso —Cuídate mucho, dile a abue que no te canse mucho— le sonrió.

—Está bien yo le digo— también sonrió.

Levana no lo iba a negar extrañaba pasar tiempo con Riki pero sabía que era parte de su deber lograr manejar sus poderes a la perfección. Sabía que su novio controlaba algunos pero no conocía que él tenía muchos más poderes que debía dominar.

El timbre la alertó, Jay se encontraba en la puerta de su casa.

—Hola princesa, ¿qué vamos a hacer hoy?— hablo emocionado.

—¿Qué podemos hacer aquí?— preguntó —La verdad no tiene mucho que me mude aquí, mis padres me dijeron que solo era una casa para vacacionar, pero porque no vamos a un parque aquí cerca y luego vamos a comer con Riki a un restaurante— sugirió Jay.

—Me parece perfecto— dicho esto ambos tomaron camino hacia el parque como en los viejos tiempos. La ciudad de los demonios estaban en construcción, por lo cual no tenía muchas cosas interesantes.

🪩 DEMONS LOVE 🪩

Jay, Levana y Riki iban de camino al restaurante en el carro de Jay. El ambiente era cómodo apesar de todo los problemas que hubo en el pasado.

—Sabes Jay, a veces siento que te guste yo no Levana— soltó Riki haciendo reír a todos.

—Tienes razón porque los que se odian se aman— continuó con la broma Levana.

—Aparte me has visto, soy muy atractivo— le coqueteó Riki a Jay.

—Siempre he estado enamorado de ti Riki— dijo Jay haciendo reír a los novios —Dejare a Levana para poder estar contigo— la chica que venía riendo se detuvo al escuchar eso, haciendo que los dos chicos se rieran más fuerte al ver su reacción.

—Sabes que te queremos— finalizó el mayor debido a que habían llegado a su destino.

La cena pasó con normalidad, incluso con más bromas similares a la de hace unos momentos. Fue un momento que se quedará grabado en sus recuerdos.

Lamentablemente Riki se tuvo que volver a ir pero ellos hicieron una parada en la casa de Jay, Levana no quizo entrar pero espero en la puerta, haciendo que el mayor se sintiera un poco preocupado por la chica así que busco sus cosas debido a que se iba a quedar a dormir con los novios, habían organizado una pijamada.

Levana iba a entrar porque se sentía muy nerviosa y observada, antes de que pudiera poner un pie en la entrada, una mano la sostuvieron de la cintura y otra fue llevada a su boca para que pudiera respirar aquel cloroformo y caer profundamente dormida.