p a s a d o

423 54 6
                                    

Hermanos Choi (Garfield & Pooh):

~ Dieciséis años antes del virus ~

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


~ Dieciséis años antes del virus ~

El pequeño niño de cinco años corría de una lado hacia el otro por toda la extensión del salón de su casa. Su padre le miraba atentamente cuidando de que no se cayera o golpeara con algo, totalmente preocupado por él.

Por otro lado un niño de aproximadamente doce años se encontraba enfurruñado en una esquina con sus brazos cruzados y viendo la escena con total envidia.

— ¿Por qué papá no puede jugar conmigo? —preguntó en un fluido coreano, su lengua materna—.

— Papá está cuidando de Pooh ahora —la mano delgada de la joven mujer acarició los negros cabellos del niño—. Cuando termine, jugará contigo.

— No es justo —hizo un pequeño puchero con su boca—. Papá siempre le presta más atención a Pooh que a mí.

— Tu hermanito aún es pequeño Garfin —mencionó su tierno apodo, casi haciéndole sonreír—. Cuando tú eras pequeño, también papá te cuidaba de la misma manera que ahora lo hace con Pooh.

Garfield negó con la cabeza y quiso quejarse nuevamente, pero un estruendo logró asustarlos a todos. Pooh se había golpeado contra la mampara que daba hacia el patio trasero y los vidrios explotaron cayéndole encima.

— ¡Pooh! —Garfield fue el primero en correr hacia él—.

~ Nueve años antes del virus ~

Pooh se miró al espejo e hizo un gesto de molestia cuando su mirada notó aquella cicatriz que atravesaba parte de su ojo izquierdo, hace seis años atrás, cuando era un pequeño niño de cinco años, sufrió un aparatoso accidente en su hogar que hasta el día de hoy le había dejado una horrible marca en el rostro.

— ¿Qué tanto te ves? —Garfield se encontraba apoyado contra el marco de la puerta de baño mirándole fijamente—. Nos haremos tarde para el primer día de clases...

— No quiero ir —se quejó—. Todos se burlarán de mi cicatriz.

— Vamos Pooh —golpeó su hombro—. Acabamos de mudarnos a Tailandia, aquí parecen menos interesados en los estándares de belleza como en Corea, te irá bien —le sonrió a través del reflejo del espejo—.

— No iré.

— Bien —bufó el mayor—. Entonces yo tampoco iré a mi último año de instituto...

— No puedes hacer eso —se giró a verlo sorprendido—.

— Claro que puedo —se cruzó de brazos—. Si mi hermanito no quiere ir, tampoco iré yo.

Pooh frunció el ceño y luego renegando salió del baño, segundos después apareció con su mochila colgada al hombro.

— Muévete —le dijo al mayor—. Se nos hace tarde...

Walkers ~ PoohPavelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora