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Cap 1: El retorno de una Sultana

𝟔 𝐝𝐞 𝐦𝐚𝐫𝐳𝐨 𝐝𝐞 𝟏𝟓𝟑𝟒

✴ Üsküb (Skopje, Macedonia)

Era un día soleado, los rayos de luz entraban por los ventanales de un palacio, en una amplia estancia una mujer de 32 años, leía un documento, sin prestarle atención a nada más. El aspecto de la mujer era impoluto, sus cabellos castaños claros en un perfecto recogido. La corona y el vestido que usaba la mujer detonaban mucha riqueza, las joyas que tenía eran de la mayor calidad, cualquier mujer soñaría con lucir una pieza como la que llevaba la mujer en sus orejas o en su cuello. La lectura de la mujer se vio perturbada por los toques en la puerta

𝐇𝐚𝐟𝐢𝐳𝐞 𝐒𝐮𝐥𝐭á𝐧: Adelante- dijo la mujer sin apartar la vista del documento que leía. Oyó los pasos de alguien entrando a su estancia.

𝐅𝐞𝐫𝐚𝐲 𝐇𝐚𝐭𝐮𝐧 : mi sultana- dijo la mujer haciendo una inclinación otomana, ella era una de las criadas de confianza de la mujer sentada.

𝐇𝐚𝐟𝐢𝐳𝐞 𝐒𝐮𝐥𝐭á𝐧: señorita Feray, ¿ Que sucede? ¿Por qué las prisas?-interrogo la Sultana a su criada que tenía el rostro sonrojado y la respiración levemente agitada, revelando que habia estado corriendo antes de llegar a la estancia.

𝐅𝐞𝐫𝐚𝐲 𝐇𝐚𝐭𝐮𝐧: llegó una carta del Palacio Topkapi- Dijo la mujer entregándole la carta a su sultana

La Sultana tomó la carta y la abrió apresuradamente al ver el sello del Sultán Solimán en ella, mientras leía la carta sus ojos no creían lo que estaba leyendo. Por fin después de tantos años, sus plegarias se habían hecho realidad. La mujer dejó la carta a un lado y se levantó de su asiento con una sonrisa

𝐇𝐚𝐟𝐢𝐳𝐞 𝐒𝐮𝐥𝐭á𝐧: señorita Feray, que alisten mi carruaje- dijo la mujer con una amplia sonrisa cerrando la carta y acercándose a su criada que la miraba levemente confundida.

𝐅𝐞𝐫𝐚𝐲 𝐇𝐚𝐭𝐮𝐧: por supuesto mi sultana, pero por qué? ¿A donde viajará?-pregunto la mujer a su Sultana, la Sultana soltó una leve risa y enderezó su cabeza.

𝐇𝐚𝐟𝐢𝐳𝐞 𝐒𝐮𝐥𝐭á𝐧: Por que el día que tanto estábamos esperando ha llegado-dijo la mujer a su criada con una sonrisa. La cara sorprendida de la criada no tardó en llegar y está soltó una risa.

𝐅𝐞𝐫𝐚𝐲 𝐇𝐚𝐭𝐮𝐧: Allah a oído y respondido a nuestras plegarias-dijo la criada con una sonrisa mirando al cielo. La Sultana asintió para luego mirar a su criada.

𝐇𝐚𝐟𝐢𝐳𝐞 𝐒𝐮𝐥𝐭á𝐧: Apresurarte señorita que todos los criados lo sepan y que se pongan en marcha. Volvemos al palacio de Topkapi, por órdenes del sultán Solimán-dijo la elegante mujer para sentarse de nuevo, mientras sonreía.

La criada salió casi corriendo, para ir a cumplir las órdenes de su sultana. El palacio de Üsküb se puso en movimiento, alistando las maletas de la Sultana, que había sido llamada al palacio de Topkapi.

La Sultana quedó sola en la estancia, termino de leer la carta de su esposo, la cual le explicaba que su campaña llevaría más tiempo, pero en cuanto pudiera regresaría. La mujer decidió escribirle una carta. En ella le decía que volverá al palacio por órdenes de su Majestad, que la Validé estaba algo enferma y su majestad deseaba pasar los días en tranquilad y volver a tener la famila reunida. Sello la carta con su sello personal y se la entrego al mensajero para hacérsela llegar a su esposo.