Kensen Tensei: Wholesome Reincarnation

Capítulo 18: Continente Demoníaco

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No había dormido tanto en toda mi vida, cuando finalmente desperté -Otra vez- me encontré a mi mismo tapado con una manta y con Ignis en mis brazos, tal como había dormido Eris el día anterior -Porque ha pasado sólo un día, ¿cierto?.

Era medio día, casi anocheciendo, tenía una hambre descomunal que se hacía sentir con mi estómago rugiendo con raros sonidos.

Me reincorporé observando el lugar que me rodeaba.

El continente demoniaco, Makai; uno de los fragmentos resultantes del gran continente original, que fué dividido durante la gran guerra entre humanos y demonios. La superficie de este continente es la mitad que del continente central.

En su día, fue la zona dominada por el Rey Demonio Laplace, donde reunió a las distintas razas demoniacas. Aunque no hay vegetación en este lugar, la tierra está cubierta de grietas, los altibajos en el terreno causan tremendas pendientes y diferencias de altura de unas zonas a otras; sumado a los increíblemente enormes peñascos y montañas que bloquean la visibilidad, convierten este lugar en un laberinto natural formado por marañas de caminos.

Ese es el tipo de lugar en el que me encuentro.

Tras buscar un momento puedo ver a Eris y Ruijerd acercándose a mi posición, Ruijerd arrastra un monstruo enorme sin esfuerzo alguno mientras Eris da vueltas alrededor de él hablando sin parar; contrario a anoche no puedo ver ni una pizca de miedo en ella, algo que es reconfortante.

"¿Qué es eso?"
"Comida"

La respuesta de Ruijerd fué bastante seca, él dijo eso y luego se puso manos a la obra para empezar a asar la comida.

Mientras tanto, a mí me tocaba hablar con Eris...

"Esto... Eris, hemos acabado en el continente demoníaco"
"¡El continente demoniaco! ¡Eso quiere decir que nuestra aventura está a punto de comenzar!"
"Ah"

No esperaba ese tipo de reacción. Está completamente feliz.

Estuve un largo tiempo pensando en si decir algo más pero francamente tampoco quería arruinar el humor que tenía.

En eso Ruijerd terminó de asar la carne.

"¡¿?!"

(Esto sabe horrible)

A pesar de la enorme hambre que siento esto está tan malo que me pienso el tener que comérmelo. Durante mi vida anterior me la había pasado la mayor parte del tiempo comiendo comida de calidad, incluso en Bonna la comida seguía siendo buena, ni hace falta hablar de la que servían en el palacete. En comparación, el sabor de esto es simplemente malo. No me imagino cómo será la reacción de Eris cuando lo pruebe...

"Pues ha quedado sorprendentemente bien."

(Ah... creo, creo que ya lo entiendo. Es eso, lo mismo que dijo hace un momento. Es una aventura)

En alguna ocasión me enteré que Philip le cuenta historias de héroes, aventureros y guerreros antes de dormir, a parte de eso están las historias de Ghyslaine que tanto adora escuchar. Si sumamos todo eso es fácil darse cuenta que ella simplemente anhela ese tipo de cosas.

(Por otro lado... si esto está catalogado como delicioso, lo demás será mucho peor)

Falta de opciones -Como ya es costumbre- me ví en la obligación de comer lo que tenía enfrente.

"También se puede comer cruda"

Nada más Ruijerd dice esto, Eris con los ojos brillando se acerca a tomar la carne cruda.