Siempre estare contigo

Cap. 5.

El tiempo paso rápido, Izuku Solo se sentó en la cama de Bakugo y lo observo mientras el escribía en el cuaderno que solía ser de Izuku.

De la nada, el peliverde escucho a mitsuki

𝐴 𝑐𝑜𝑚𝑒𝑟, 𝑚𝑜𝑐𝑜𝑠𝑜!

Bakugo se levantó de su silla y cerro El cuaderno lentamente, luego dejó su habitación y fue hacia el comedor, Izuku lo siguió bien de cerca.

Bakugo se sentó en la mesa con su mamá y papa, Izuku vio un asiento libre en la mesa y se sentó, sin decir nada, aunque si lo hiciera, no sería escuchado. Aunque nadie lo podía ver, el sentía que estando ahí, con sus seres queridos, lo hacía sentir menos solo. Simplemente miro a la Familia de Bakugo cenar, hablando, Bakugo y su mamá pelean...

𝐸𝑠 𝑐𝑜𝑚𝑜 𝑐𝑢𝑎𝑛𝑑𝑜 𝑒́𝑟𝑎𝑚𝑜𝑠 𝑛𝑖𝑛̃𝑜𝑠

Deku pensó, esta escena, el "cenando" con los Bakugo revivia memorias de cuando era niño e iba a la casa de Bakugo a cenar.

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Cuando todos terminaron de comer, Bakugo lavo los platos mientras su mamá y su papá guardaban los manteles y los platos que Bakugo dejaba limpios. Era trabajo en equipo.

Izuku siguió a Bakugo a su habitación y vio como el se acostó en la cama listo para dormir. El pecoso vio esto como una oportunidad, y cuando Bakugo al fin estaba dormido, agarró el cuaderno que solía ser de el y lo empezó a leer.

𝐵𝑎𝑘𝑢𝑔𝑜 𝑒𝑠𝑐𝑟𝑖𝑏𝑖𝑜 𝑚𝑢𝑐ℎ𝑎 𝑖𝑛𝑓𝑜𝑟𝑚𝑎𝑐𝑖𝑜́𝑛 𝑛𝑢𝑒𝑣𝑎... 𝑄𝑢𝑒 𝑛𝑜𝑠𝑡𝑎𝑙𝑔𝑖𝑎!

Izuku siguió pasando las páginas y leyendolas con emoción, pero se paralizó al ver una luz apuntandolo. Miro desde donde provenia la luz, Bakugo lo apuntaba con una linterna.

Aunque, como el peliverde solo es un fantasma, solo vio un libro flotando. El pecoso rápidamente soltó el libro, dejandolo caer... Bakugo lo levanto confundido

Bakugo: que mierda...?

El rubio puso el libro en el escritorio de nuevo y miro al rededor, no había nada ni nadie.

𝑄𝑢𝑖𝑒𝑛 𝑚𝑖𝑒𝑟𝑑𝑎 ℎ𝑖𝑠𝑜 𝑒𝑠𝑜?

Se preguntó a si mismo mientras volvía a la cama. Se acostó y se tapó con las sabanas. Cerro sus ojos lentamente y sintió una leve brisa y frío en su cuerpo, Izuku se había acostado a su lado y lo abrazo.

Aunque Izuku ahora no dormía, disfrutó esa noche abrazando al rubio y viéndolo dormir.

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A la mañana siguiente, Bakugo se despertó y se preparó rápidamente para ir a la UA, ya que como dijo unos capítulos atrás, hoy era el primer día.

Bakugo salió de su casa con su mochila y Izuku lo siguió todo el camino hasta la prestigiosa escuela. Al llegar, El pecoso miro los alrededores con asombro, nunca se imagino que algún día estaría en esta escuela tan importante

Siguió al rubio hasta el Salón y vio como se sentó con sus pies en la mesa. Izuku mira a todos los estudiantes muy asombrado y contento. Después volvió la mirada a Bakugo y vio que un chico de pelo azul lo estaba retando por poner los pies en la mesa, pero el rubio no le dio importancia