Kkangpae- Jenlisa (G¡P)

9

⊱ ────── {.⋅ ✯ ⋅.} ────── ⊰

11:00pm

Pov Lisa

Las horas avanzaron y la noche cayó sobre nosotros. Minho, Jungkook, Jennie, Jisoo y yo nos encontrábamos reunidos alrededor de la mesa en la sala de la parcela. El ambiente se volvió increíblemente sombrío, especialmente con la mirada gélida de Jennie y la presencia imponente de sus guardaespaldas, que llevaban armas más grandes que yo. La tensión era palpable en el aire y no ayudaba en absoluto a aliviar la atmósfera inquietante que se había formado.

Jennie dejó escapar un suspiro y colocó sus manos entrelazadas sobre la mesa ─Voy a ser sincera contigo, ¿sabes por qué estás aquí, Jisoo?─dijo. Mi amiga temblorosa asintió en respuesta.

Ruby arqueó una ceja y habló con frialdad, ─Responde─le exigió. Jisoo tragó saliva nerviosamente y respondió─Vine para ver a Lisa, señora, jefa, Ruby Jane─Estaba tan nerviosa que no sabía cómo abordar el tema con Jennie.

─Jisoo, soy conocida por ser una mujer fría y calculadora, alguien que se aferra a la realidad con ambas manos ─expresó Jennie con un tono que dejaba claro su reputación.

 Rodé los ojos ante su comentario, sabiendo que Jennie era todo menos eso.

De repente Jennie le pidió a Jungkook un papel, por lo que alcance a ver estaba escrito en letras rojas y no era muy largo

─Escucha, voy a ser clara contigo─carraspeo─Firmarás un contrato de confidencialidad que te va a limitar bastante, pero ya que te has arriesgado a venir a ver a Lisa, también vas a seguir cada una de las órdenes escritas sin chistar.

─Soy la jefa aquí, y eso es algo que debes tener muy en cuenta, cualquier movimiento que tengas en mi contra te costara muy caro a ti y a tus queridos─hablo la líder de la mafia 

Jisoo escuchaba todo atenta con temor estaba sudando así que me atreví  a pasar mi mano por su rostro y limpiarla no quería que el sudor entrara a sus ojos.

Jennie me miro y alzo una ceja pero no dijo nada mas.

─Minho, bolígrafo ─de inmediato el bolígrafo entro en su mano.

—Mira, si no fueras la mejor amiga de esta niña, ya estarías en problemas graves. Ambas estamos en riesgo aquí, Jisoo. —la mayor la miro fijamente a los ojos, y Jisoo apartó la mirada de inmediato.

—¿Dónde tengo que firmar? —preguntó, mirando hacia abajo a Jennie, que tenía una mirada arrogante que no soportaba

—¿Es que acaso no sabes leer genio?—

—¡Jennie! —la miré con furia, su sarcasmo estaba pasando los límites y necesitaba detenerla. Inmediatamente, ella bajó su actitud y levantó las manos en señal de rendición.

—Está bien, mamá, no me pegues—dijo Jennie rodando los ojos. Vaya, qué prepotente estaba siendo.

Esa fue la gota que colmó el vaso. Jisoo estaba al borde de las lágrimas por los nervios y ella, molestando, no ayudaba en absoluto.

 Furiosa, me levanté de la mesa y todos quedaron mirándome atónitos. Miré fijamente a Jennie entre mis cejas y dije —Vamos afuera ya mismo, Ruby—No lo repetí ni una vez más. Pude ver cómo ella me miraba con cierto temor, como si fuera un perro regañado, pero nunca dejando de lado esa mirada intimidante que tanto la caracterizaba.

⊱ ────── {.⋅ ✯ ⋅.} ────── ⊰

Llegamos afuera y ella me miraba con total desinterés. —¿Qué es lo que te sucede? ¿Cuantos años tienes? ¿Por qué molestas tanto a Jisoo? Ella no tiene la culpa de que tú me hayas secuestrado, maniática— dije, alzando las manos en señal de alegato.

—Quiero que le pidas perdón a Jisoo después de que firme ese condenado contrato. Tú, delante de Minho y Jungkook, le vas a pedir perdón a Jisoo—dije con firmeza, viendo cómo los ojos de Ruby se abrían como platos ante mi orden.

Jennie comenzó a reírse a carcajadas, casi sin poder contenerse. Se pegaba y reía de manera tan escandalosa que Minho y Jungkook se volvieron para mirarla, pero rápidamente desviaron la mirada al ver mi expresión. Yo permanecí estática, manteniendo mi semblante frío mientras la miraba con odio, eso era lo único que provocaba en mí en estos momentos.

Después de casi quince minutos de Jennie pasando el mejor momento de su vida, se detuvo. Yo estaba mirando mis uñas y, cuando finalmente la miré, levanté una ceja—¿Crees que esto es un juego? ¿Un chiste?—le pregunté.

 "Ella no tiene ni idea de quién es la verdadera Lisa Manobal".

—Porfavor, ¡cuéntame otro!— Jennie volvió a reírse hasta que se detuvo—¿Qué te pasó? Llegaste hace tres meses y no queda ni la sombra de lo que eras. ¿Dónde quedó esa Lisa tímida que se asustaba con una hoja? ¿Vienes a darme órdenes a mí? ¿Jennie Rubyjane Kim, líder máxima de los kkangpae? ¿Quién te crees que eres, ¿Dios?—Comenzó a carcajear sarcásticamente mientras me miraba de manera egocéntrica.

Rodé los ojos y crucé los brazos, esperando a que terminara su discursito egocéntrico para seguir adelante.

—Tu me convertiste en esto, cariño, y en cierto punto te lo agradezco—dije sarcásticamente. Jennie me miró con curiosidad y picardía. Me acerqué peligrosamente a su rostro, haciendo que nuestras narices se rozaran, nuestros cuerpos quedaron completamente juntos, amoldándose a la perfección. Ella me tomó de la cintura y me apoyó en la pared. —Te digo que esta Lisa, la que tú te encargaste de crear, será tu talón de Aquiles, tu perdición, Kkangpae—finalicé empujándola, dejándola con ganas de más. Estoy segura de eso.

Jennie, que siempre está lista para todo, me tomó por detrás, acercó su boca a mi oreja y susurró —No creo que seas mi talón de Aquiles por mucho tiempo. Vas a caer rendida ante mis encantos, niña, como todos lo hacen—

—Te tendré suplicando por mí, Ruby. Estarás tan encantada que simplemente el no estar conmigo te causará sensaciones de soledad inexplicables. Dependerás de mí—

—Ver para creer, Lalisa

Estaba tan solo a unos centímetros de su boca, quería intentarlo pero tal vez seria muy pronto, esos labios tan provocativos y sus pupilas dilatadas mirando cada parte de mi rostro me lo hacían mucho mas difícil.

No lo hice.

Me aleje de su rostro, y nerviosa me aleje, mis cinco segundos de coraje ya habían pasado, Jennie comenzó a reír dulcemente.

—La Lalisa que conocí al principio, también me causa intriga.