IX

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Luego de colgar la mañana nos dirigimos a dormir, cada uno en un rincón de la habitación, no nos dirigimos la palabra para nada.

Antes de tratar de dormir le dejé un mensaje a mi mejor amiga diciéndole que me llame si había algún problema con Minah.
Apagué el celular y cerré los ojos tratando de dormir, estaba muy cansada mas no sabía si iba a lograr dormir, estaba preocupada por mi hija.

Al día siguiente me levanté temprano por una llamada de Yeji, salí de la habitación y contesté su llamada.

—Yeji, ¿pasó algo?- Pregunté preocupada.

—No, no te preocupes, Minah de milagro durmió toda la madrugada, al parecer jugó todo el día con Sunoo y Ni-ki.

—¿Y eso? Ni yo puedo dormir todo el día.

—Ay no sé cómo le hicieron, necesito que me pasen tip.

—Que nos pasen.- Me reí y ella también.

—Bueno solo llamaba para avisarte eso, sabía que estabas preocupada.

—Si lo estaba, gracias Yeji.

—Sabes que siempre puedo cuidar a Minah, aunque sea domingo.- Bromeó con lo último y reí.

En ese momento escuché que la puerta de la habitación se había abierto dejando ver a ml director despierto.

—Yaya, me tengo que ir, llegaré pronto y te cuento todo.

—Okay, ten buen viaje de regreso, ¡te esperamos!- Se despidió y colgamos.

Me acerqué donde estaba el director.

—Buenos días director Sim.- Saludé y él me devolvió el saludo.

—Hay que irnos, ¿tienes todo listo?

—Si, tenemos que despedirnos de los señores, fueron muy amables por recibirnos.

—Tienes razón, vamos.

Fuimos a la sala en donde ambos estaban sentados en el sofá.

Se dieron cuenta de nuestra presencia y saludaron.

—Venimos a despedirnos, muchas gracias por todo lo que hicieron por nosotros.- Agradecí con una sonrisa.

—Gracias, nos salvaron, por favor búsquenme en esta empresa en Seúl cuando quieran, les invitaré algo por su servicio en agradecimiento.- El director Sim sacó de su saco una tarjeta y se las entregó.

—Ay no jovencito, no tiene que hacer eso, no fue ninguna molestia.- Trató de negarse el anciano pero Sim dejó la tarjeta en la mesa.

—Muchas gracias.- Nos despedimos y nos dirigimos a Seúl.

—Director Sim, ¿qué puedo hacer para llevarnos mejor? Aunque sea mantener una buena relación en el trabajo.

—No me caes mal, pero...- Hizo una breve pausa.

—Entonces déjeme invitarle ese café que le tiré.

—Bueno... intentemos llevarnos mejor.- Aceptó y sonreí.














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Llegamos a Seúl y el director ofreció llevarme a casa, estuvimos en el camino tratando de establecer una conversación seria sin algún desacuerdo o "pelear" como unos niños...Obviamente no lo logramos, nadie creería que soy madre si me comporto así.

𝐈 𝐍𝐄𝐄𝐃 𝐔  | Sim Jake Donde viven las historias. Descúbrelo ahora